Ciudad de México, 21 de octubre de 2020.
Con su premiso presidente, queridas compañeras y compañeros todos, la necedad es la madre de todos los males, así lo dijo Marco Antonio Cicerón, un escritor y orador, político romano. Hoy el Senado de la República hará historia, pero no una que escriba un capítulo de bienestar, de desarrollo y de respeto a los derechos ya ganados de la ciudadanía, sino de tragedia, de uso faccioso y sin sentido de poder público que habrá de recordarse por décadas.
Tenemos que ser claros, el verdadero objeto de este debate no es extinguir o derogar una forma de financiamiento por el conducto de fideicomisos, de actividades ciudadanas, sino que sí estamos transitando hacia un Estado cada vez más totalitario, unipersonal y radicalizado, un fideicomiso público es un fondo que tiene y administra recursos públicos para cumplir un fin específico, esencialmente para colaborar en el cumplimiento de las funciones del Estado, principalmente en áreas prioritarias de desarrollo, a través de él se etiqueta recursos para fines específicos y acciones en beneficio de sectores vulnerables o situaciones imprevistas, esta figura jurídica tiene sus reglas y condiciones y controles. Es mentira que la discrecionalidad sea causa de su desaparición, pues son auditables y controlados principalmente por la Secretaría de Hacienda.
Con la desaparición de estos 109 fideicomisos que se propone se les está dando la espalda a las mujeres que sufren violencia, a los periodistas, a los defensores de derechos humanos y a familiares de víctimas, investigadores, científicos, a la ciencia y a la tecnología, a los damnificados por desastres naturales, ero en el caso particular de esta reserva se está afectando, queridas senadoras y senadores, de manera especial a nuestros adultos mayores ex braceros, para ellos es doblemente difícil allegarse de recursos, simplemente les estamos dando la espalda.
Los braceros, los ex braceros, compañeras y compañeros, los migrantes que radican fuera de este país son la principal fuente de economía del país a través de las remesas que ellos nos envían día con día, y hoy se les está dando la espalda a aquellos hombres y mujeres que abandonaron su familia y se fueron a trabajar a los Estados Unidos, hicieron un fondo allá en los Estados Unidos mediante un acuerdo entre México y esa nación, y el compromiso fue que regresando se los entregarían, y muchas, y muchos, y me atrevo a decir que esos movimientos de ex braceros la mayoría votó por Morena para que quede muy claro, y ustedes conocen perfectamente eso.
En lugar de pagarles a los pobres ancianos que andan sufriendo enfermedades crónicas degenerativas hoy les están dando un machetazo, cuando deberían de cubrirlos de una vez por todas esa lucha que por más de 15 años han venido sosteniendo, y hoy en lugar de pagarles lo que se está haciendo es acabar con ese fideicomiso que con mucho esfuerzo se logró.
Qué lástima queridas compañeras y compañeros senadores, principalmente Morena porque aquí hay varios que nos conocemos y nos conocemos muy bien, pero muy lamentable, queridas amigas y amigos, que hoy sin escuchar a nadie más, más que a una sola persona, ustedes van a votar para extinguir fideicomisos como de esta naturaleza. Qué lástima, creí que estaba en un Parlamento patriota, en un Parlamento democrático, pero hoy veo que solamente responden a una sola indicación. Muchas gracias.
