Intervención del senador Alejandro Encinas Rodríguez, del Grupo Parlamentario del PRD, durante las Audiencias Públicas en Materia de Seguridad y Justicia para analizar las propuestas enviadas por el Ejecutivo con presidentes municipales.
Alejandro Encinas Rodríguez, (AER): Muchas gracias, senadora Gómez; muy buenas tardes, bienvenidos, señores presidentes municipales.
Yo creo que hemos escuchado dos posiciones sumamente interesantes, que no solamente dan cuenta de la cara del otro lado de la moneda, sino que demuestran que en el tema de seguridad, combate al delito y procuración de justicia, pues no hay recetas únicas ni todo es blanco o negro.
Y creo que desde la intervención de los propios gobernadores, ha habido matices importantes. Aquí los gobernadores se refirieron al caso de mando único, coincidiendo los dos gobernadores y el Jefe de Gobierno, pero no dijeron, en el caso del Distrito Federal, que efectivamente existe mando único, pero no existe una policía única.
Porque en el Distrito Federal hay una Policía Preventiva, hay una Policía Auxiliar, hay una Policía Bancara Industrial, hay una Policía Montada, hay hasta Policía Turística, está el Cuerpo de Granaderos; y eso implica que existen varias corporaciones que evitan el control desmedido del poder que ha llevado a prácticas deleznables en el mando único y en la policía única.
El mejor ejemplo negativo que podemos poner es el caso del general Arturo Durazo, donde en la Secretaría de Seguridad Pública en la Ciudad de México, donde se centralizó en una sola policía todo el mando y acabó administrando al crimen, no combatiéndolo.
Hay otros ejemplos muy negativos como es el Batallón del Radiopatrullas en el Estado de México, en donde fue tal la fuerza de este Batallón de Radiopatrulas que no solamente sustituía a las policías municipales, sino que sustituía a la autoridad municipal y hacía contrapesos a la propia Secretaría de Gobierno.
Entonces yo creo que primero vamos dejando claro la diferencia entre mando único y policía única, que son cosas distintas. El propio gobernador de Morelos dijo que había un mando único, pero el mando único hacía el nombramiento del mando municipal que iba a cumplir con el rango de policía de buen gobierno. El planteamiento de Graco Ramírez señala la existencia de la policía municipal.
Y aquí conocemos dos experiencias muy interesantes. El caso del municipio de Guadalajara, que está en una zona metropolitana que concentra más del 60 por ciento de la población del estado de Jalisco y en donde la mayor parte de la población no vive en Guadalajara sino que hay otros municipios más poblados, pues han buscado innovaciones como la policía de carácter metropolitano para poder enfrentar un fenómeno que corresponde a una delimitación territorial claramente definida en donde, en este caso, a diferencia del Distrito Federal donde la zona metropolitana en su mayor parte se encuentra en el Estado de México, se encuentra en una sola entidad.
Y esto implica que pueden irse estableciendo mecanismos diferenciados de acuerdo a las características de, no solamente una zona metropolitana, de una región o incluso de comunidades donde están asentados pueblos originarios. Porque yo no veo una policía única encargándose de garantizar la seguridad en los municipios de usos y costumbres de Oaxaca o en las zonas indígenas de Chiapas o donde existen las policías comunitarias en Guerrero.
Yo creo que hay que partir del principio de que si bien hay que delimitar el régimen de facultades, competencias y concurrencias en materia de seguridad pública, sin desatender lo que señalaba el senador Luis Sánchez respecto a la procuración de justicia, y es que se requiere hacer una política diferenciada de acuerdo a las características específicas de la región, del desarrollo socioeconómico, de su composición étnica y cultural, del tipo de delito que se comete, el modus operandi de los grupos delictivos y no aplicar una fórmula que lo que va a hacer es dar fuerza (inaudible) a una policía que no la vero atendiendo los problemas de la vía pública, de las riñas, del comercio en la vía pública, de las faltas administrativas en los municipios y mucho menos teniendo injerencia en las vidas de las comunidades indígenas.
Yo por eso creo que es una experiencia muy importante la que hemos conocido y yo por eso le preguntaría al presidente municipal de Guadalajara el desarrollo de esta experiencia, que ya la había habido antes en materia de coordinación metropolitana porque en el caso del Valle de México tarde o temprano habrá que constituir una policía de carácter metropolitana, que hubo ya intentos cuando el Mando Único de Región Centro en el 2005 y en el 2006, cuando se hicieron programas compartidos en la zona limítrofe (inaudible) con el Dsitrito Federal,
Porque esta lógica de centralizar todo el mando en poder, debiendo dotar al Ejecutivo no solamente la facultad de intervenir en cualquier momento en municipios o en los estados, o incluso además de disolver a los cuerpos policiacos y asumir los mandos y disolver los municipios, no va a resolver el problema, sino lo va a complicar.
Yo quisiera conocer sus opiniones al respecto.
