Nuevo ombudsman debe tener una autoridad moral a toda prueba: Fidel Demédicis


Intervención en tribuna del senador Fidel Demédicis Hidalgo, del Grupo Parlamentario del PRD, para expresar su voto particular acerca del dictamen para la elección del nuevo titular de la CNDH.

 

Fidel Demédicis Hidalgo, (FDH): Muchísimas gracias.

 

Con su venia, compañero Presidente.

 

Compañeros senadores;

 

Compañeras senadoras:

 

El Senado de la República  –como representante legítimo del pueblo–  sin duda que tiene una enorme responsabilidad el día de hoy, nombrar a quien será el nuevo Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en México.

 

Es complicado hacer este nombramiento y hacer que este nombramiento se haga efectivo en estos momentos aciagos que vive la república.

 

La corrupción y la impunidad cabalgan sin control a lo largo y ancho de México.

 

Será responsabilidad del nuevo presidente hacer que estos dos jinetes del Apocalipsis reduzcan el trote y también los ponga en estado de inactividad.

 

Secuestros, desapariciones forzadas, violaciones a la ley, dilaciones en la aplicación de la justicia y muchos otros acontecimientos que tienen cimbrado al país, y por eso el pueblo de México vive en un terror permanente porque, lo tenemos que decir con pesar, la Comisión Nacional de Derechos Humanos no ha sabido estar a la altura de las circunstancias y de los requerimientos de un país tan sufrido como el nuestro.

 

¿Qué estoy tomando en cuenta para ejercer mi voto de manera imparcial, y sobre todo, de manera responsable?

 

El nuevo Presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos deberá ser una persona que tenga una autoridad moral a toda prueba.

 

Deberá de tener una independencia política de los poderes legalmente establecidos y de los poderes fácticos.

 

Es necesario que al ciudadano Presidente o Presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos le quede claro que el único compromiso que tiene es con el pueblo de México y con nadie más.

 

Sí, el que nombremos hoy con esta representación, le queda claro este aspecto, créanme, compañeros senadores; compañeras senadoras, que la reivindicación de los derechos humanos en México será una realidad.

 

Deberá de tener una gran capacidad y conocimiento para encarar y resolver a fondo los problemas y las violaciones de los derechos humanos.

 

Debe ser un hombre o una mujer sensible ante la problemática que tiene el país en este tema tan delicado.

 

Deberá de tener un gran liderazgo, y debe ser capaz de ponerse al frente de los trabajos de investigación  y resolución de la violación de los derechos humanos.

 

Casos como los que hoy vive el país y que han llamado la atención del mundo, por supuesto que tiene que encontrar una ruta para resolverlos de manera definitiva y darle la satisfacción al pueblo que de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos no va a permitir que los padres de los normalistas de Ayotzinapa sigan en la incertidumbre y sigan con el inmenso dolor que hoy los acoge; el caso de Tlatlaya, y otros muchos, que hoy enlutan a México.

 

Debe tener una gran creatividad para visualizar los nuevos horizontes para desarrollar la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

 

Debe de respetar, de manera irrestricta, la ley.

 

Debe ser capaz de mantener una estrecha comunicación con la sociedad civil y con las organizaciones no gubernamentales o con las organizaciones independientes de derechos humanos. No entrar en contradicción con éstas.

 

Fortalecer y utilizar todos los instrumentos que le brinda la ley.

 

Dar un efectivo seguimiento a las recomendaciones emitidas hasta su cabal cumplimiento, y sobre todo, debe de tener un gran amor por México.

 

Desde nuestra visión. ¿Cuáles son los grandes retos que se plantea para el nuevo Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos?

 

Debe entender que hay que legitimar esta comisión, y también debe entender que esa legitimación se gana con el trabajo que se realice a favor de los derechos humanos, y no solamente con los discursos.

 

Debe de garantizar la imparcialidad absoluta y plena de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y ponerse siempre por encima de los intereses particulares o de grupo, y siempre priorizar la defensa de los derechos humanos.

 

Un gran reto que, ojalá, el que nombremos el día de hoy pueda cumplirlos.

 

Debe insistir en que los derechos humanos deben ser absolutamente para todos, y debe de tener una gran objetividad para focalizar la problemática real de los derechos humanos.

 

Compañeros senadores;

 

Compañeras senadoras:

 

El nombramiento que hoy vamos a realizar, puede ser el inicio de la reivindicación de los derechos humanos de los mexicanos y las mexicanas; y también puede ser la ruta que el pueblo requiere para cristalizadas sus aspiraciones de que en México se haga justicia ante cualquier violación de los derechos fundamentales.

 

Por último decirles, que mi voto, que quede claro, lo otorgo, lo otorgo con el beneficio de la duda, y no como un cheque en blanco.

 

Por su atención, muchas gracias.