Ciudad de México, 16 de agosto de 2021.
Muy buenas tardes a todas y a todos ustedes. Saludo con mucho gusto el senador Eduardo Ramírez, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República; al senador Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República; a los integrantes de las diferentes coordinaciones de los Grupos Parlamentarios, a mis amigos coordinadores que se encuentran presentes, al senador Dante Delgado, al senador Miguel Ángel Osorio Chong; a mis compañeros al senador Fócil, al senador García Conejo.
Quiero dar la bienvenida a esta Cámara a las y los autores y compositores, a las y los integrantes del Consejo Directivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México, de manera particular al presidente, al maestro Martín Urieta y a Roberto Cantoral Zucchi director General de la Sociedad de Autores y Compositores de México. A nombre propio y del Grupo Parlamentario del PRD, es un gusto participar en la propuesta y organización de homenaje a todas y todos ustedes, a su trayectoria artística, así como a la contribución al arte y cultura de México.
Quiero recordar de manera especial, quiero recordar al artista con el que hablamos de este homenaje en varias reuniones, un entusiasta promotor de la música mexicana, defensor de los derechos de autor y maestro de maestros, me refiero al muy querido maestro Armando Manzanero que el próximo día 28 cumplirá ocho meses de su partida. Hoy lo recordamos y lo tenemos presente en este acto todas y todos nosotros.
Al mencionar este legado hacemos el compromiso de trabajo conjunto con todos y cada uno de ustedes, con sus propuestas para seguir en la defensa y preservar los derechos de autor y la música de todos y cada uno de nosotros, también debo mencionar al maestro Roberto Cantoral quien desde 1982 y hasta su fallecimiento en 2010, dedicó su vida a la defensa de los derechos de autor, a defender la música de muestro país y a elevar la calidad de vida de las y los compositores.
Hoy la fortaleza del gremio, de su organización, sin duda se debe, en mucho, al liderazgo del maestro Cantoral el cual se continúa en el trabajo permanente de todos sus compañeros y de sus hijos. También recordamos al maestro Juan Gabriel, el admirado compositor que el día 28 de agosto cumplirá cinco años de su repentina muerte y quien a pesar de su desaparición física sigue con sus canciones, la alegría que transmitió en cada una de sus presentaciones queda en la memoria musical de México. Son precisamente las diferentes emociones y los instantes que cada uno de ustedes con su talento y dotes musicales nos motiva y que hoy nos lleva a entregar estos reconocimientos.
Son esos momentos, esos poemas que hacen canciones lo que ha hecho que nombres como Consuelo Velázquez, Álvaro Carrillo o Agustín Lara, por mencionar algunos, crucen nuestras fronteras y que cientos de artistas del mundo hayan interpretado y sigan interpretando sus canciones. Como ha dicho continuo una joven compositora, Paty Cantú, “componer es emocionarse por compartirle al mundo algo que no solamente debe ser tuyo sino de todos”.
Este homenaje es una forma, una forma nuestra, de reconocerles, de confirmar que lo señalado por Federico Nietzsche es cierto “la vida sin música sería un error”. Hoy entregamos reconocimientos a talentosos artistas que siguen entregando, eso, su talento, a México, Alex Syntek, Alex Lora, Carlos Lara, a Fato, a Horacio Palencia, Martín Urieta, a Memo Méndez, a Teodoro Bello, a Paty Cantú. Y también rendimos homenaje a Agustín Lara, a Cuco Sánchez, Alberto Domínguez, Álvaro Carrillo, Elena Valdelamar, Tomás Méndez, José Alfredo Jiménez, Consuelo Velázquez, Francisco Gabilondo Soler, Roberto Cantoral, Gonzalo Curiel.
Al leer estos nombres ¿quién no evoca una tarde de infancia en la casa familiar escuchando la música de Cri Cri?; ¿quién no piensa en el momento en que se dice y se contradice “bésame mucho”?; en donde vemos con impaciencia “el reloj que marca las horas” y que no detiene su camino; ¿quién no ha vibrado en una noche de infusiones y brindis con “Paloma Querida”, “Paloma Negra” o “Cucurrucucú Paloma” sin importar si la versión es de Miguel Aceves Mejía, Pedro Infante, Lola Beltrán, Jorge Negrete o Ángela Aguilar?
¿Quién no ha seguido la interpretación de esa triste “Canción de amor” o ha cantado “Mi credo” o “Mujeres divinas” ?, sólo por mencionar algunas, porque sin duda compañeras y compañeros podría llevarme a una segura bohemia, de continuar recordando más de estas bellas canciones que serán permanentes inspiraciones de nuestro México.
Por ello, muchas gracias, gracias porque sus letras le han cantado a México, a la luna de octubre, a la vereda tropical, a la tierra mojada, a ciudades como la de México y Guadalajara y por supuesto, a muchas mujeres en todas las formas y de todas las maneras. Gracias porque esta música ha forjado las emociones y la forma de querer de miles de mexicanos y mexicanas. ¡Que viva México! Y enhorabuena para todos ustedes.
