De la marimba al cine/ Siempre


A falta de pianos y pianolas.

En su cuento “De la marimba al son”, nuestro querido Laco Zepeda relata como llegó el cine a Chiapas. Cuenta que, las novedades, en Chiapas, a falta de pianos y pianolas se acompañaban con compases de marimba.

Ejecutadas en una marimba diseñada especialmente para acompañar las funciones, las películas se musicalizaban por pequeñas composiciones para cada tipo de escena. Había pieza para beso corto, pieza para beso largo, pieza para persecución de bueno o pieza para alcanzar a los malos. Y desde luego pieza para lágrima tendida. Era, dice Laco, la época de oro del cine chiapaneco.

Hoy, en tiempos de cine digital y de efectos especiales impactantes, surge una propuesta chiapaneca que de nuevo combina magistralmente cine y música.

Tuxtla Gutiérrez y su Teatro de la Ciudad Emilio Rabasa están de plácemes presentando un esfuerzo de producción cultural en el que participan instituciones y personas que han trabajado persistentemente en la escena local, en la búsqueda de desarrollar talento y formar audiencias para manifestaciones culturales de calidad.

Me refiero a Cinema Sinfónico, puesta en escena que está a punto de romper el récord de más presentaciones consecutivas con lleno total en nuestro Teatro de la Ciudad.

¿Pero de qué trata y quiénes participan en Cinema Sinfónico?

Cinema Sinfónico reúne fragmentos teatralizados de algunos de los largometrajes más taquilleros de los últimos años, La Bella y la Bestia, La guerra de las galaxias, El señor de los anillos, Titanic, El jorobado de Notredame, Piratas del Caribe, Pocahontas y Aladino, entre otros.

Caracterizados como los personajes de esos filmes, con luces y efectos especiales, actores chiapanecos evocan escenas fantásticas, épicas, románticas y dramáticas que provocan el aplauso de niños y adultos.

Pero el otro componente central de este esfuerzo escénico está en la música, que, como el nombre del espectáculo señala, es sinfónica, es en vivo y es además espectacularmente interpretada por la Orquesta Sinfónica Juvenil de Chiapas.

Esta agrupación la integran 45 jóvenes de entre 18 y 22 años. Surgió en el año 2002, primero como una orquesta infantil formada únicamente por diez niños, pero con el tiempo se fueron sumando más interesados, hasta que en 2009 se definió totalmente como una orquesta juvenil compuesta por jóvenes oriundos de nuestro estado.

Desde su inicio, los ingredientes esenciales han sido constancia y disciplina, además del convencimiento de que un proyecto de esta naturaleza requiere de un sello y una identidad propios: esta orquesta, a diferencia de otras conformadas con músicos foráneos y extranjeros, está integrada casi en su totalidad por músicos chiapanecos aficionados, y los pocos músicos profesionales que participan son los que encabezan cada sección y tienen también la obligación de tutelar a sus jóvenes compañeros, realizar ensayos seccionales, corregir técnicas y abonar al perfeccionamiento del trabajo. Es una especie de Orquesta-Escuela.

Cinema Sinfónico es prueba de cómo en Chiapas, música y cine son combinación entrañable y exitosa.

En épocas del cine mudo, en otros sitios a las películas se les acompañaba con piano. En Chiapas no, en Chiapas lo hicimos y lo volvemos a hacer con marimba y alegría.

Muchas felicitaciones a los jóvenes músicos, a los actores, al director escénico, Hiram Marina, y al director de la orquesta, el maestro Roberto Peña Quesada. Felicitaciones al Coneculta Chiapas y a su director general Juan Carlos Cal y Mayor. Gracias por recordarnos sutilmente a Laco y a la genial combinación de cine y música ejecutada por artistas chiapanecos.

@zoerobledo

Senador de la República por Chiapas.