Versión de la intervención del senador del Grupo Parlamentario del PRD, Juan Manuel Fócil Pérez, para referirse al proyecto de decreto por el que se expide la Ley General de Economía Circular.


Ciudad de México, 17 de noviembre de 2021.

 

Gracias presidenta. Compañeras senadoras y compañeros senadores. El dictamen que se pone a nuestra consideración representa un paso firme de nuestro país, en la ruta de acciones contra el cambio climático, contra la contaminación de nuestras tierras, de nuestras aguas, de nuestro medio ambiente.

La aprobación de esta Ley General de Economía Circular obliga a todos los empresarios a usar materias primas que deban ser reutilizadas; introduce no solo un nuevo ordenamiento en el marco jurídico mexicano, sino que incorpora un nuevo esquema para pensar la cadena de producción y consumo. Ya no más basura en nuestro mundo.

Cambia el modelo de producir, consumir y desechar por uno en el que se conserven, se aprovechen y se extraiga máximo valor posible de los productos y después, puedan regenerarse para entrar al ciclo económico de nuevo.

Por ello, desde el Grupo Parlamentario del PRD celebramos que el Senado de la República dé este paso y apruebe esta Ley, que repito, nos propone una nueva economía, basada en el principio de “cerrar el ciclo de vida” de los productos, los servicios, los residuos, los materiales, el agua y la energía.

De esta forma, tendremos una legislación novedosa, que introduce conceptos como: Cero residuos, cadena de valor, economía circular, grupos informales de personas acopiadoras (los que hoy se llaman pepenadores), huella de carbono, reacondicionamiento, remanufactura, subproducto y valorización de los desechos.

También impulsa una política de cero residuos a través de certificaciones, enfocada a promover el aprovechamiento del valor remanente de los residuos, a efecto de desincentivar que los materiales terminen en un relleno sanitario.

Establece también la obligación de presentar un plan de economía circular para toda persona física o moral que fabrique, elabore, produzca, importe o manufacture envases y empaques, así como aparatos eléctricos y electrónicos. Así también, señala las sanciones administrativas por el incumplimiento de las disposiciones de la Ley y los plazos para subsanar infracciones.

Quiero señalar que estamos frente a una legislación incluyente, una legislación que contempla el trabajo de grupos informales de personas acopiadoras de residuos, y establece obligaciones para las autoridades respecto a su formalización y su incorporación al ciclo económico.

Con lo anterior, se busca promover su desarrollo e inclusión, así como el mercado del acopio y el reciclaje. De esta forma, hoy esta legislación, robustece la función educativa y de dirección política que tienen las cámaras.

En primer lugar, al marcar que las autoridades de los tres órdenes de gobierno, en el ámbito de sus respectivas competencias, incorporarán modalidades educativas que contemplen temas relativos a la economía circular.

Hay que educar a nuestro pueblo, a nuestros niños, a los jóvenes, a los adultos, que todos cooperen, todos exijan la no contaminación de nuestro mundo. Por otra parte, el Poder Legislativo marca el rumbo que debemos seguir, para detener el consumo y el manejo de residuos que no contempla al medio ambiente.

Hoy, en México se generan diariamente casi 103 mil toneladas de residuos, y solo se están aprovechando el 10 por ciento de estos residuos generados, o sea, la mayoría acaba en los mares, en las lagunas, contamina nuestro medio ambiente en general.

De esta forma, con la aprobación de esta Ley buscamos que no existan cuerpos de agua contaminados, ecosistemas degradados, pérdida de especies, por mencionar algunos.

Celebramos el proceso intenso de elaboración de esta Ley y desde el Grupo Parlamentario del PRD reconocemos a todos los actores de la academia, de la iniciativa privada, de la sociedad civil, senadoras y senadores que aportaron consideraciones muy importantes que se encuentran en esta Ley de avanzada y que fue encabezada por el senador Ricardo Monreal y el senador Raúl Bolaños Cacho, muy bien por esta iniciativa.

Esta aprobación es una nueva llamada para detener el daño al medio ambiente. Refuerza el compromiso de México en la pasada COP 26 de reducir 1.5 grados Celsius la temperatura global.

Ya no hay tiempo, el mundo tiene que poner manos a la obra y México, a través de esta aportación del Senado de la República, estamos haciendo una aportación muy importante en este sentido. Muchas gracias a todas y todos.