Versión del senador Juan Manuel Fócil Pérez, del Grupo Parlamentario del PRD, para presentar proyecto de decreto por el que se reforman diversos artículos de la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de Particulares.


Ciudad de México, 18 de febrero de 2020.

Versión del senador Juan Manuel Fócil Pérez, del Grupo Parlamentario del PRD, para presentar proyecto de decreto por el que se reforman diversos artículos de la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de Particulares.

Buenas tardes, compañeras y compañeros senadores, con su venia señora presidenta. La red no olvida, ¿quién decide lo que olvida y lo que no se olvida?, ¿puede convivir nuestra esfera privada con el mundo digital?

Hoy en día, al menos uno de cada cinco personas ha perdido una oportunidad de trabajo por un mal uso en sus redes sociales, siendo muy simplistas, podríamos decir que la solución está en ser más cuidadosos con lo que decidimos subir a internet, sin embargo, yendo un poco más lejos, nos podemos dar cuenta que en realidad también nos daña la alta accesibilidad a datos personales, sensibles, que permite por medio de los buscadores y plataformas digitales conocer todo de todos, y dos, la información que otros comparten de nosotros sin nuestro consentimiento.

Alguien decía que estamos expuestos a una observación inclemente “como pez en acuario de cristal”, sin dejar de tomar en cuenta que gran parte del contenido que terceros o generadores de contenido, -esto de generadores de contenido es un nuevo concepto que se le da para todas aquellas personas que están subiendo información de la persona sin su consentimiento-, estas personas difunden y viralizan información atentando la esfera más íntima de las personas implicadas y éstas, al no tener sustento legal para actuar, están quedando en la desprotección total.

En resumidas cuentas, la iniciativa que hoy planteo tiene como objetivo que las personas puedan ejercer su Derecho al Olvido, esto es, borrar los datos que afecten en su vida personal a través de un procedimiento que tienen que recurrir ante el Instituto Nacional de Acceso a la Información, para que datos sensibles que los involucren y que pongan en riesgo los derechos previamente citados, sean eliminados en la red.

A diferencia de otras iniciativas, se introducen nuevas regulaciones para el ámbito de la aplicación de la ley, por ejemplo, es muy importante mencionar que aunque redes sociales como Facebook, Twitter, Google y otras, tienen sus sedes fuera de nuestro país, van a estar obligadas a responder ante las autoridades locales y poder atender esto de borrar datos que afecten la vida íntima de las personas.

Se establece la figura de generador de contenido y sobre todo, se está buscando conciliar los derechos entre la libertad de expresión y acceso a la información, con el derecho a la vida privada, la intimidad, el honor, la protección de datos personales, la no discriminación y una vida sin violencia. Esto es lo que está buscando esta iniciativa, de tal forma que exista un punto de equilibrio en el que los intereses de las grandes compañías puedan convivir respetando los intereses de los particulares.

En específico, quisiera dejar en claro que este derecho está acotado para que ningún personaje de la vida pública pueda moldear la memoria colectiva, esto es, que eliminen información donde ellos realmente estuvieron involucrados por alguna mala actuación deshonesta, esto tendrá que prevalecer porque es algo de interés público.

Por último, resulta interesante comentar que el creciente uso de la redes sociales y el vertiginoso ritmo con el que la información se mueve hoy en día, ha generado mayor productividad en términos económicos, ha fortalecido la democracia por medio de una mayor socialización de noticias e incluso, ha potenciado descubrimientos en la ciencia y la salud, no obstante algunos filósofos como el francés Guy Debord, desde mediados del Siglo XX advertía que esta era digital también implica ciertos riesgos como lo podría ser la creación de una sociedad espectáculo.

En consecuencia, podemos decir que esta nueva sociedad, con el uso de las redes sociales, está sacrificando su derecho a la privacidad, entre muchos otros derechos, con tal de mantener cierta apariencia que les permita pertenecer a esta inmensa acumulación de espectáculos en el internet. Esta propuesta busca ser un punto de partida para que podamos seguir ocupando la tecnología, sin comprometer lo que somos como personas, incluyendo nuestros datos más sensibles e información que deseamos, no se recuerde de nosotros.

Muchas gracias, compañeras, compañeros.