Señala Alejandro Encinas proceso de centralización en la creación de órganos autónomos


Alejandro Encinas

Es necesario dotar de fuerza jurídica a los órganos autónomos para que sus resoluciones sean vinculantes, tengan mayor certeza en su integración y gocen de plena autonomía, explicó el senador del PRD, Alejandro Encinas Rodríguez, durante el seminario Órganos autónomos y funciones de control del Senado.

 

El presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda, consideró que la presente Legislatura vive una “autonomitis” pues antes de que comenzara sólo existían tres organismos autónomos y en lo que va lleva de ejercicio se han creado siete órganos descentralizados más.

 

Señaló que estos órganos tienen una gran diversidad y complejidad en los mecanismos de integración y de las funciones, pues, tienen organismos con una influencia importante y otros con facultad de emitir recomendaciones no vinculantes.

 

Sin embargo, “por un lado se pretende acotar las facultades del Gobierno federal para ejercerlas a través de órganos autónomos que pudieran tener más confianza, pero al mismo tiempo se da paso hacia el centralismo”, dijo.

 

Expuso como ejemplo el Instituto Nacional de Evaluación de la Educación que ahora definirá los mecanismos para el ingreso, promoción y permanencia para el Magisterio, con lo cual ya no habrá intervención de los gobiernos estatales.

 

También mencionó el caso del Instituto Nacional Electoral, cuyo objetivo principal era centralizar la organización de los procesos electorales, contradiciendo los regímenes de gobierno estatales, “se le quitan facultades originarias de los estados para dárselas al INE”, dijo.

 

El legislador por el Estado de México afirmó que esta búsqueda de centralización está relacionada con la resistencia para avanzar en una reforma al sistema político del país.

 

Explicó que basta ver la reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública, cuando se crearon dos “súper secretarías”, concentrando en la Secretaría de Gobernación las tareas de Seguridad Pública, Gobierno interior y Seguridad e Inteligencia Nacional; o la Secretaría de Hacienda que ahora no sólo recauda y distribuye, sino que también fiscaliza.