Sen. Ríos Piter al moderó la mesa «Presupuesto de Egresos de la Federación»


Intervención del Senador Armando Ríos Piter, al moderar la mesa “Presupuesto de Egresos de la Federación” del Foro: Paquete Económico 2017 que organiza el Instituto Belisario Domínguez.

 

·         Renunciar a la parte de los impuestos a mí me parece que es equivocado, por una razón, porque se ve bajo la óptica más demagógica que tenemos instalada desde hace muchos años. 

·         El tema del impuesto al refresco es de esas oportunidades en las cuales te permite buscar, incidir en el consumo. El impuesto busca reducir el consumo de una situación que ya es alarmante. 

·         Son enfermedades que le causan daño a nuestro potencial de crecimiento, no estamos preparados en los próximos años; nuestras finanzas públicas hoy significa casi 80 mil millones de pesos, solamente el gasto en atender este problema. 

·         Si se cae el dinero del petróleo ¿Cómo le vamos a hacer para garantizar tener un ritmo como el que necesita nuestro país de inversión en infraestructura, en educación, en salud? 

·         La gran crítica que ha tenido este impuesto, es en dónde se están yendo casi 53 mil millones de pesos, que ya se generaron en los últimos años y que no necesariamente han implicado más bebederos. 

·         Todo esto es un andamiaje que tiene que ver con ingresos, que tiene que ver con gasto público y que tiene que ver con trasparencia y rendición de cuentas. Esa es la nueva realidad fiscal que tiene el país y que tenemos que entender. 

·         Obviamente la gente vea que hay resultados, y que estamos construyendo juntos, con base en una nueva cultura, en una nueva lógica fiscal, de un pacto fiscal, que nos permita saber dónde se está metiendo dinero.

 

Armando Ríos Piter: …alrededor de las finanzas nacionales. El segundo es, convocas a más impuestos, a más tasas impositivas, o recortas gasto.

Dado que la hipótesis es mantener algunos niveles de gasto que se consideran prioritarios como, como el que hay considerado en materia de educación, en materia de salud.

Renunciar a la parte de los impuestos a mí me parece que es equivocado, por una razón, porque se ve bajo la óptica más demagógica que tenemos instalada desde hace muchos años. Y bueno, miren yo lo digo desde el PRD; en la izquierda no necesariamente nos hemos acostumbrado a construir una visión proactiva alrededor de la parte impositiva.

Yo es algo que mantengo como una crítica personal. He tenido una posición muy puntual respecto al tema del impuesto al refresco, pero solamente lo pongo eso como uno de los muchos ejemplos, en los cuales los ingresos tienen que ver con cómo convocas a la sociedad, para –identificando prioridades- poder tener recursos suficientes, que te permitan tener políticas públicas integrales.

Cito el ejemplo del impuesto al refresco, que por más polémico que sea, pero de eso se trata, construir un diálogo alrededor de lo que significa que como sociedad, pongamos dinero, aportemos recursos para garantizar ciertas políticas integrales.

Y vuelvo a citar el tema del impuesto al refresco -mañana lo habré de poner en la propia comisión- pero nos parece que es de esas oportunidades en las cuales te permite buscar, incidir en el consumo. El impuesto busca reducir el consumo de una situación que ya es alarmante.

El consumo de bebidas endulzadas; tenemos el primer lugar en obesidad infantil, niños y niñas mexicanas ocupan el primer lugar en el mundo en cuanto a obesidad.

Pero también tenemos el primer lugar de diabetes infantil, y las proyecciones –que yo no me cansaré de repetirlas- que tenemos nosotros ubicadas, y que desde el IMCO hasta varias instituciones, las han venido formulando, si no cambiamos el patrón de consumo de los refrescos en nuestro país, y de la ingesta calórica que tenemos, corremos el riesgo de que uno de cada tres mexicanos y mexicanas, en los próximos años, uno de cada tres -sean niños, sean adultos mayores, sea gente en edad, digamos económicamente productiva- corremos el riesgo de que tenga algunas de estas enfermedades crónico-degenerativas que hoy ocupan el primer lugar de muerte en el país.

Entonces, son enfermedades que le causan daño a nuestro potencial de crecimiento, porque son enfermedades que causan un terrible daño, pérdidas personales en términos de amputaciones, digamos escenas realmente dantescas que hoy se viven en muchos del país, especialmente en las zonas más marginadas, en las zonas más pobres, que además son las que menos infraestructura hospitalaria tienen para atender este tipo de enfermedades, que son duraderas en tiempo, que son realmente terribles en cuanto al sufrimiento de quienes las tienen, y pues donde no estamos preparados en los próximos años; nuestras finanzas públicas, donde hoy significa casi 80 mil millones de pesos, solamente el gasto en atender este problema.

Entonces, lo cito como un ejemplo, porque se busca que caiga el consumo; se busca –y ahí entro a la parte de gasto- que este dinero vaya directamente a la parte de prevención; prevención de este tipo de enfermedades y que sea un diálogo abierto.

Obviamente hemos tenido –y lo cito como un ejemplo- porque hemos tenido obviamente un enfrentamiento con la industria que tiene sus posiciones legítimas –no las deslegitimo- pero de eso se trata la discusión en este momento, si se cae el dinero del petróleo, si se nos cae la plataforma y solamente podemos volver a tener ritmos similares en los próximos 10 o 15 años, con las inversiones sustantivas que se hagan en aguas profundas o en lutitas, o en alguno de los otros ingresos petroleros que se pudieran tener, pues la gran pregunta a los mexicanos y a las mexicanas, es ¿Cómo le vamos a hacer para garantizar tener un ritmo como el que necesita nuestro país de inversión en infraestructura, de inversión en educación o de inversión en salud, como el ejemplo que les estoy poniendo.

Por eso la parte del gasto es importante, la parte obviamente de los ingresos, y la última que es, la parte de la supervisión del gasto.

La gran crítica que ha tenido este impuesto, es en dónde se están yendo casi 53 mil millones de pesos, que ya se generaron en los últimos años y que no necesariamente han implicado más bebederos, más agua potable, mejores condiciones para educación en materia de cultura nutricional o de cultura física.

Pero como ustedes ven, todo esto es un andamiaje que tiene que ver con ingresos, que tiene que ver con gasto público y que tiene que ver con trasparencia y rendición de cuentas. Esa es la nueva realidad fiscal que tiene el país y que tenemos que entender.

Ya no hay un espacio para tener enormes ingresos que viniendo del petróleo, pues de repente no le preocupen a la gente porque llegan de alguna manera ¿no?

Hoy cada vez más salen, y saldrán del bolsillo de cada ciudadano o ciudadana, de cada persona que pague el Impuesto al Valor Agregado, de cada persona que pague el Impuesto Sobre la Renta.

Entonces, obligadamente tenemos que garantizar un muy sólido sistema de rendición de cuentas.

Si la gente está poniendo su dinero, pues exigir que no se lo roben por la corrupción, que no se pierda en la ineficiencia, o que si están convocados en un mandato muy claro, para prevenir algún problema como el que estoy citando, pues obviamente la gente vea que hay resultados, y que estamos construyendo juntos, con base en una nueva cultura, en una nueva lógica fiscal, de un pacto fiscal, que nos permita saber: oye, le estamos metiendo dinero, y como país estamos consiguiendo que nuestros niños dejen de ser el primer lugar de obesidad infantil.

Creo que este ejemplo, y perdón si me extiendo, ilustra mucho en qué va el Paquete Fiscal del 2017. Las fuerzas políticas nos rasgamos las vestiduras de que haya recortes de un lado a otro, y eso, pues obviamente tiene que ver con mucho de cómo funciona nuestra democracia.

Lo que tenemos que hacer es garantizar que haya un debate de alturas, para identificar cuáles son los retos que tenemos hoy, y cuáles es la sociedad que queremos construir para el futuro.

Y por eso, el tema de los ingresos, de los egresos, y de la rendición de cuentas, sin duda alguna, hoy es un tema importante por la discusión que tenemos en el Senado, pero será la gran discusión – como sociedad me parece- en los próximos meses y sin duda alguna de los próximo años.

Habiendo abusado un poco del uso de la palabra, les presento a quienes nos acompañan el día de hoy.

-=0=-