Las leyes secundarias en materia energética en el tema fiscal están llenas de buenos deseos que son muy diferentes a los que realmente se plantea, ya que existen omisiones que contradicen dichas leyes, afirmó el senador del PRD, Rabindranath Salazar Solorio.
Al manifestar su voto en contra en lo general de las leyes secundarias en materia energética en lo referente al tema fiscal, el secretario de la Comisión de Energía destacó la omisión de la definición de renta petrolera que únicamente aparece en la Ley de Hidrocarburos.
“Esta definición es necesaria para evitar riesgos de ambigüedad y para evitar que no se puedan establecer los gravámenes respectivos a los conceptos que integran esta renta petrolera”, dijo.
Insistió que México no se puede comparar con Noruega o Brasil como algunos legisladores pretenden hacerlo por las grandes diferencias, principalmente en el tema de transparencia y corrupción.
Subrayó que los artículos 24 y 25 de la Ley de Ingresos de Hidrocarburos establecen que las contraprestaciones son menores en relación a los beneficios que pueden tener los contratistas.
Asimismo, el senador morelense señaló que los contratistas podrán deducir todos los costos por periodo o trasladarlos a periodos subsecuentes si es necesario, es decir que no hay un límite en los costos que podrá deducir una empresa.
“Sin duda es una situación complicada en virtud de no poder tener el control de los costos que podrán establecer las trasnacionales y pondrán en una gran desventaja a Pemex en virtud de los dividendos que está obligado a pagar”, dijo.
Destacó que la Comisión Nacional de Hidrocarburos no está presente en el planteamiento de los lineamientos relativos a los costos de la industria, lo que propiciará que agentes ajenos al sector puedan establecer los criterios de valor de los costos.
Acerca de la propuesta para la creación del Fondo Mexicano del Petróleo, consideró que debió llamarse “Ley de la Subtesorería de la Federación o Ley para la creación de la alcancía del Gobierno federal”, ya que está diseñado únicamente para la administración de recursos generados por contratos y que estarán a disposición del Gobierno.
Finalmente, señaló que la Ley de Federal de Presupuestos y Deuda Pública consolida el desfalco y transfiere la deuda del pasivo laboral a los mexicanos.
“No estamos en contra del apoyo al asunto de los deudores, sino el destino de los recursos, es decir que esta gran deuda, quisiéramos saber con mucha claridad hacia dónde se destinó”, dijo.
