Intervención en tribuna de Senadora Dolores Padierna para presentar iniciativa sobre equidad de género en la Suprema Corte de Justicia de la Nación


VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN EN TRIBUNA DE LA VICECOORDINADORA DEL GRUPO PARLAMENTARIO DEL PRD EN EL SENADO, DOLORES PADIERNA LUNA PARA PRESENTAR INICIATIVA SOBRE EQUIDAD DE GÉNERO EN LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN.

 

Sen. Dolores Padierna Luna: El pasado 8 de marzo conmemoramos el Día Internacional de la Mujer, en el que recordamos la ardua lucha

 

Que las mujeres han llevado a cabo en favor de la igualdad, la justicia, el respeto a los derechos humanos, la paz y el desarrollo. A lo largo de la historia de nuestro país, hemos luchado en pro el acceso y goce pleno de los derechos humanos de las mujeres, en todos los ámbitos de la vida.

 

En esta valiente lucha llevada a lo largo de muchos años, quiero destacar dos hechos importantes: el 17 de octubre de 1953 se publicó en el Diario Oficial de la Federación un decreto en el que se anunciaba que las mujeres tendrían derecho a votar y ser votadas para los puestos de elección popular. Ocho años después de ese histórico suceso, en 1961, se nombró a la primera Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a la jurista María Cristina Salmorán.

 

Como hiciera mención la Ministra Olga Sánchez Cordero: “Doña Cristina Salmorán fue, desde siempre, una mujer consciente de su circunstancia histórica”; así lo hizo saber en su discurso de toma de posesión como Ministra, al señalar que: “al concurrir a la integración del más alto tribunal, acrecentaba en ella la satisfacción de servir a la patria, y que encaminaría sus esfuerzos a lograr ese objetivo; pero destacó que ella lo haría en su doble carácter de mujer y de abogada

 

Otro hecho; a los 54 años después de ese hecho histórico, solamente han sido designadas como Ministras a lo largo de 54 años, solamente han sido designadas como Ministras nueve mujeres: Livier Ayala Manzo fue designada en 1975; Gloria León Orantes en 1976; en el periodo de 1983 a 1988 se designó a las Ministras Fausta Moreno Flores, Martha Chávez Padrón, Victoria Adato Green, Clementina Gil de Lester e Irma Cué Sarquís; en 1995 se designó a la actual Ministra Olga Sánchez Cordero y, por último, en 2004 se designó a la actual Ministra Margarita Luna Ramos. A lo largo de 54 años solo nueve mujeres han sido Ministras, demostrando la inequidad.

 

 

Hoy la Suprema Corte de Justicia de la Nación sólo tiene 2 ministras, demostrando la inequidad que se tiene dentro del Poder Judicial en México.

 

Lo anterior se acrecienta si tomamos en cuenta que en la pasada designación del último Ministro de la Suprema Corte de Justicia, dentro de la terna que envió el Ejecutivo Federal a esta Soberanía, no se tomó en consideración a ninguna mujer, habiendo mujeres destacadas que pudieran haber ocupado el cargo y que no tiene un pasado tan cuestionado como el de Medina Mora.

 

Según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la participación de las mujeres en los máximos tribunales de justicia se duplicó en el periodo 2001-2011 en América Latina, pasando de un promedio de 10% a 23%, solo México mostró retrocesos.

 

En la Suprema Corte de Estados Unidos, el 33.3% son mujeres; en Brasil un 20% son mujeres; en  Argentina un 29%; en Chile 25 %; en la Unión Europea un 32% y cabe señalar que existen casos muy marcados donde el acceso de las mujeres a puestos relevantes en materia judicial se han dado de manera plena, en la Suprema Corte de Canadá, por ejemplo donde de los 9 asientos para Ministros, 4 son ocupados por mujeres, recayendo además la presidencia de ese máximo cuerpo judicial en una mujer.

 

Por otro lado, existen países donde el acceso de las mujeres a dichos puestos es casi nulo, como lo es el caso de Reino Unido, donde de los 12 lugares, solamente uno es ocupado por mujeres.

 

El Comité para la Eliminación de la Discriminación contra las Mujeres en sus Observaciones finales hacia México 2012, reconoció que dicho comité observa con preocupación la persistencia de las prácticas discriminatorias hacia las mujeres, por lo cual se emitieron recomendaciones orientadas, entre otras, a que el Estado Mexicano adopte medidas para garantizar la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres en el mercado laboral.

 

Es preciso mencionar que en esta soberanía se han impulsado acciones tendientes a fomentar el acceso pleno de las mujeres a puestos de mayor relevancia.

 

Con la reforma constitucional en materia de Transparencia por ejemplo, se dispuso en el párrafo 11, de la fracción VIII, del Apartado A, del artículo 6 constitucional que para la conformación del organismo garante del cumplimiento del derecho de acceso a la información pública y a la protección de datos personales se deberá procurar la equidad de género, con lo cual se estipuló un derecho fundamental de las mujeres en nuestra Carta Magna.

 

El primer paso para lograr una verdadera transformación en el Poder Judicial en México es garantizar que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, como Máximo Tribunal Constitucional del país, sea un espacio propicio para la igualdad entre hombre y mujeres, donde uno de los principales derechos humanos que el órgano judicial garante de los derechos humanos de las decisiones del Estado y de nuestra Constitución en el Poder Judicial  donde se consolide como acceso pleno de las mujeres a la integración del mismo, lo sea la igualdad entre los géneros; por lo cual, esta iniciativa tiene por objeto adicionar un párrafo tercero al artículo 95 de la Constitución con el fin de estipular que en la conformación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación se garantizará la equidad de género.

 

México no debe seguir rezagado en fomentar prácticas encaminadas o hacer retrocesos.

Las regresiones se están dando en todos los órdenes, ya ahora el Ejecutivo Federal sólo manda ternas de puros hombres, excluyendo a mujeres destacadas, calificadas y de larga trayectoria; debemos alertar de esto para que en los avances en materia de género no se retroceda.

 

Ojalá se logre que en la Suprema Corte de Justicia de la Nación no desaparezcan las mujeres y más bien los nuevos nombramientos sean para mujeres.

Es cuanto, gracias.