Ciudad de México, miércoles 04 de abril, 2017
INTERVENCIÓN
Intervención del senador Isidro Pedraza Chávez, del Grupo Parlamentario del PRD, durante la comparecencia ante comisiones del Gobernador del Banco de México Alejandro Díaz de León Carrillo.
Isidro Pedraza Chávez (IPC): Gracias.
Bienvenido Maestro Alejandro Díaz de León.
Yo creo que el Banco de México fue sometido a una dura prueba en el año 2008 frente al riesgo financiero mundial que vivimos desde entonces, y a partir de ahí la economía mundial se encuentra en recuperación.
Ustedes han visto como los anuncios temerarios de Donald Trump –apenas recuperándose la economía- ya inició una guerra comercial, llamada por él, con la fijación de aranceles y na serie de cosas que han estado provocado la caída de las bolsas de valores.
Yo creo que en México habiendo sorteado los retos de la crisis financiera global y la recisión, el Banco de México se enfrenta ahora al mayor registro de incremento de inflación en la historia de nuestro país: 6.67 por ciento al cierre de 2017, que es la mayor en 17 años.
Tradicionalmente, y a lo largo de las últimas dos décadas, la inflación en México ha derivado principalmente de la elevada sensibilidad de la economía mexicana a las perturbaciones externas, al aumento de los precios de las materias primas, la apreciación del tipo de cambio o a las entradas y controles de capital –como usted bien lo ilustraba ahí en las gráficas-.
El Grupo Parlamentario del PRD se ha dado a la tarea de revisar los últimos informes del Banco de México que usted encabeza y hemos encontrado que de forma reiterada durante 2017 han atribuido los costos de la inflación principalmente por la incertidumbre por las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Bueno, particularmente llama la atención la argumentación y exposición que se presenta alrededor de la liberalización adelantada de los precios de las gasolinas y los energéticos.
En el informe del segundo trimestre del 2017, en la página 6, señala que los niveles que han venido presentando la inflación general anual en este año, reflejan el efecto de los diversos choques; destacan los efectos del proceso de liberación de los precios de los energéticos, en particular, de las gasolinas y del gas L.P.
O bien, en la página 53 del propio informe, donde cita desde inicios de 2017 la inflación fue afectada por la depreciación de la moneda nacional y el aumento en su volatilidad, así como por los aumentos de algunos energéticos derivados del proceso de su liberalización.
Sin embargo, toda vez que la volatilidad del peso frente al dólar ha sido menor al avanzar las rondas de negociación del TLCAN, parece previsible que el riesgo se ha ido diluyendo en la psique de los mercados del dinero y del humor internacional.
Adicionalmente existen enormes subsidios que se destinan al mercado de la gasolina. En 2017 el subsidio para gasolinas fue de 67 mil 934 millones de pesos, equivalente al presupuesto total del estado de Chihuahua.
A partir de su exposición y de los informes, resulta evidente que la reforma Energética para los objetivos de estabilización de los precios de nuestra economía -más aún con la decisión de adelantar la liberalización de los precios de gasolinas y energéticos en enero de 2017- de acuerdo con el Banco de México la casusa de la mayor racha inflacionaria, en 17 años, es fundamentalmente explicada por la liberación de los precios de la gasolina y los energéticos.
Para el Grupo Parlamentario del PRD es de vital importancia precisar este tema, porque lo prometido por el Gobierno Federal, lo debatido en las reformas –se cansaron de decirnos y hasta de mandar comerciales en la televisión- de que con esta seria de acciones se iban a reducir los precios de la gasolina y de la luz eléctrica y el gas.
Y creo que esto solamente quedó en un simple anuncio y en una intención fallida y en una herramienta que ni siquiera ha permitido el crecimiento o el decrecimiento en nuestro país.
En este contexto, el Grupo Parlamentario del PRD observa que en materia cambiaria una coordinación absoluta a partir de un mecanismo que invade la autonomía del Banco de México, pero al final del día es una coordinación.
Pero a partir de su exposición en materia de preservar el valor adquisitivo de nuestra riqueza al interior, existe una contradicción entre la Secretaría de Hacienda y un órgano autónomo como es el Banco de México.
Incluso en los análisis que presenta usted ahí de mercado y de varias cosas.
Yo quiero hacerle algunos cuestionamientos en ese sentido.
El Banco de México reconoce que la inflación es explicada principalmente por el precio de la gasolina y combustibles, incluso ajustando en su último informe la perspectiva de inflación para los próximos 12 meses –ya la dijo usted- del 3 por ciento.
¿Cómo estima usted que habría sido la evolución en 2018, sin la Reforma Energética?
Y luego, ya el senador Patricio fue muy amplio en el comentario del costo del crédito de los bancos; y en ese sentido hemos estado tratando de equilibrar las condiciones de los empresarios con y hemos presentado la iniciativa de la insolvencia económica, que el ciudadano pueda declarar insolvencia económica por las razones que ahí se presentaron.
Y entonces, a partir de la modificación de nuestro sistema jurídico y del impacto y la globalización de este sistema bancario -usted ya lo vio, que la banca es fuerte- ¿Cuál sería la posición del Banco de México para introducir al derecho mexicano la figura de insolvencia económica como un derecho de los usuarios de servicios financieros para que en situaciones extraordinarias puedan declararse en banca rota y evitar abusos de los bancos o entidades comerciales al momento de cobrar adeudos?
Lo comento porque actualmente existe una iniciativa y en aras de generar condiciones de discusión enviamos incluso ya a la presidencia de esta comisión, el proyecto de dictamen de la Ley de Insolvencia Económica, y existe la necesidad de discutir esto, de tener una definición y ,por ejemplo, nos hemos ido comparando con las naciones más desarrolladas en muchos temas, pero en este de protección de derechos humanos creo que también tenemos que compararnos con el caso de Inglaterra y Estados Unidos, donde las principales matrices de la banca extranjera que radica en México están ahí, y como legisladores tenemos la obligación de reconocer estas figuras de protección de derechos en nuestro país.
Esa sería la última pregunta que yo le haría a usted señor Gobernador. Y al comentario de mis compañeros, me sumo a reconocer el trabajo que está usted realizando al frente de la institución.
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