Senadores del PRD consideraron que la reforma en materia energética generará un conflicto de inestabilidad social por las contraprestaciones por el uso y propiedad de la tierra, y por el despojo a la nación de sus recursos naturales.
Al fundamentar en contra de las minutas devueltas con cambios por la Cámara de Diputados, la senadora Angélica de la Peña consideró que las modificaciones que establecen compromisos para ejecutar proyectos de desarrollo a favor de la localidad o comunidad afectada no obligan legalmente a los contratistas a llevarlos a cabo.
“El simple hecho de establecer en el texto la palabra compromiso, definitivamente no instaura la obligatoriedad que tiene que prevalecer respecto de un contrato”, aseguró.
Y aseguró que las comunidades no tienen la certeza sobre las utilidades y pérdidas que habrán de producirse por los posibles proyectos de desarrollo de su comunidad, ni hay manera de reparar plenamente el daño causado por el desplazamiento forzoso al que se verán obligados.
Por su parte, el Senador Fernando Mayans Canabal reiteró que la soberanía y seguridad del país está en riesgo por la entrega de la industria eléctrica y petrolera que se prevé en la Ley de Hidrocarburos.
El legislador por Tabasco advirtió que esto traerá graves consecuencias en lo económico, político y social, pues se somete al país a un debilitamiento del Estado al perder el control y manejo de dichos sectores.
“El PRI, PAN y Partido Verde Ecologista permiten la entrega de la renta petrolera a empresas privadas, el aumento de las tarifas eléctrica y del gas”, denunció el senador del PRD.
Y afirmó que estas reformas son un engaño y atraco al pueblo mexicano, ya que se propicia el despojo “desmedido” a través de contratos para la exploración de hidrocarburos.
En su turno, Mario Delgado Carrillo recordó que en junio pasado presentó una Ley de Hidrocarburos alterna con principios distintos a los impulsados en las leyes secundarias de la Reforma Energética y contenía cuatro vías para impactar el desarrollo del país.
Dichas vías eran lograr el desarrollo de la industria nacional a través del desarrollo del sector energético, precios de hidrocarburos competitivos por medio de incentivos de inversión en petroquímica, garantizar que los recursos adicionales se gasten mejor, y garantizar la autosuficiencia energética del país.
Asimismo, insistió en que no se puede tener una reforma en que las principales variables sean económicas para maximizar la renta, “porque se convierte en una reforma depredadora”, por ello propuso incluir entre las variables para adjudicar contratos el tema ambiental y la inversión en petroquímica.
Además planteó la posibilidad de rondas anuales de asignación para garantizar la competencia y las mejores condiciones para el Estado mexicano, así como implementar candados para que en siete años no se pudieran ceder los contratos entre particulares.
Por último, la senadora Dolores Padierna Luna señaló que a lo largo de la discusión de la reforma energética se han usado eufemismos para disfrazar la verdadera naturaleza de la legislación, la cual es la privatización.
“Ufanados en engañar al pueblo de México, aquí han hablado de apertura, de desincorporación, de liberación, pero díganle como le digan una privatización es una privatización”, sostuvo.
Incluso dijo que la Ley debería de llamarse “Ley para el Desmantelamiento y la Extinción de Petróleos Mexicanos y lo mismo para el caso de la Comisión Federal de Electricidad”.
La Vicecoordinadora del PRD en el Senado reiteró que tanto Pemex como CFE quedarán subordinadas a las decisiones de la Secretaría de Hacienda y de Energía, lo cual elimina la poca autonomía que tenían.
Dolores Padierna afirmó que leyes secundarias en materia energética son una contrarreforma que cede los recursos más preciados del país a las trasnacionales y va en contra del interés nacional. “Esto es lo que está en la Ley de Pemex y CFE, lo demás son mentiras”, concluyó.
