Lo que se discutirá estos días en el Senado de la República no es una reforma energética, es un claro despojo del petróleo de la nación, aseveró la Senadora del PRD, Dolores Padierna.
“Hoy presenciamos una auténtica contrarreforma malinchista, entrega nuestro bien más preciado a los recursos extranjeros a cambio de cuentas de vidrio, ésta no es una reforma energética, éste es un claro despojo petrolero, aunque lo nieguen y lo disfracen se trata de un golpe a la propia Constitución”, dijo.
Al presentar ¡ su voto particular en contra del dictamen por el que se expide la Ley de Hidrocarburos y se reforman diversas disposiciones de la Ley de Inversión Extranjera; Ley Minera y Ley de Asociaciones Público Privadas, la Vicecoordinadora del PRD afirmó que los cambios en materia energética y de hidrocarburos en el país es motivado por los intereses de Estados Unidos.
“Asistimos a la aprobación de una auténtica contrarreforma energética, no es modernización petrolera sino la integración de México a los intereses geopolíticos de Estados Unidos, lo que anima a estos cambios contrarios al interés nacional”, sentenció.
Padierna Luna advirtió que las reformas secundarias en materia energética faculta a extranjeros para explotar los hidrocarburos de la nación sin mecanismos de protección para la población y al medio ambiente.
“México pasará del boom petrolero al crack energético, perdemos soberanía energética a cambio de una improbable bonanza derivada de la inversión privada, estaremos en el lado opuesto de aquel sueño lejano de grandeza, pasaremos de administrar la abundancia a concesionar el futuro de la nación con una irresponsabilidad y sentido antipatriótico, similar a la dictadura de Antonio López de Santa Anna”, señaló.
La legisladora perredista afirmó que ningún beneficio de estas reformas será tangible para la población y aseveró que los precios de la luz, del gas y las gasolinas no bajarán, como lo ha promocionado el gobierno federal.
Y advirtió que por el contrario aumentarán “las tarifas de energía eléctrica aumentarán, las gasolinas perderán los subsidios y se incrementará su precio y lo mismo sucederá con el gas de consumo doméstico”
Padierna Luna señaló que lo llamado “ocupación temporal” en realidad será una privatización y extranjerización de la tierra, de los hidrocarburos y los recursos naturales.
“El proyecto de Enrique Peña Nieto representa la entrega de la soberanía energética nacional al dominio de Estados Unidos, a los capitales extranjeros, a las grandes compañías petroleras, es un retroceso histórico imperdonable”, puntualizó.
