Visita de Donald Trump a México es un error de todo el círculo cercano del Presidente: Miguel Barbosa


  • Gobierno mexicano queda como una plataforma útil para el republicano, advierte

 Conferencia de prensa ofrecida por el senador Miguel Barbosa Huerta, del Grupo Parlamentario del PRD, para referirse a la reunión entre el presidente de la República y el candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump.  

 

Miguel Barbosa Huerta, (MBH): Buenos días, agradezco su presencia en esta sala y quiero dar lectura a un posicionamiento sobre la visita y entrevista de Donald Trump con el presidente Peña.

 

Al día siguiente de la reunión del presidente Peña y de Donald Trump, ya no repitamos todas las cualidades del americano, hagamos un análisis y evaluación del hecho político.

 

Hay que tener presente que la elección por la presidencia de Estados Unidos, -lo digo en un dimensionamiento de las cosas- la elección por la presidencia de Estados Unidos no se está resolviendo en México, lo digo por aquellos que han opinado que a Trump se le vio presidencial durante su breve visita a nuestro país.

 

No se está resolviendo en México la presidencia de Estados Unidos.

 

Donald Trump vino a México porque está abajo en las encuestas, si no, nunca lo hubiera hecho. El presidente Peña invitó a los candidatos estadunidenses, por una errónea percepción de sentir que con la eventual presencia de ellos, asumiría una posición de supremacía política frente a quienes desean gobernar al país más poderoso del mundo, y de esa forma reponer frente a los mexicanos la aceptación perdida.

 

Ése fue el cálculo del equipo de gobierno del presidente Peña: sentir que la presencia eventual de los candidatos lo iba a poner en condición de supremacía política y que él iba a quedar investido con esa condición, con esa cualidad.

 

Donald Trump, urgido de un relanzamiento de su campaña, dio respuesta antes de una semana a la invitación que por escrito recibió del Gobierno mexicano; Donald Trump fue quien impuso la fecha y la hora de la reunión, bajo el cálculo de llevarlo a cabo esta reunión el mismo día que presentaría su propuesta en materia migratoria en Arizona.

 

Nadie esperaba, ni el propio Gobierno mexicano, que Donald Trump viniera a ofrecer disculpas de sus dichos, sus dichos en contra de México y los mexicanos, nadie esperaba eso. Lo que sí esperábamos es que el presidente Peña, frente a Trump y ante los medios de comunicación nacionales e internacionales, con mucha firmeza y dignidad le hubiera dicho que México estaba en contra de la construcción de un muro fronterizo y que se opondría como nación a ello; que México va a impedir la incautación de las remesas que nuestros connacionales envían a nuestro país por su trabajo; que México va a estar en contra de la expulsión o deportación masiva de mexicanos; y que México reprocha sus ofensas y expresiones xenofóbicas y racistas en contra de migrantes.

 

Eso es lo que hubiéramos querido escuchar del presidente Peña cuando apareció en los medios con Donald Trump y no como ocurrió, que quien nos leyó la cartilla y nos dictó su agenda fue el citado señor Trump.

 

Sólo como referencia, el asunto del muro no es quién lo pague, no es que los mexicanos quedamos tranquilos porque, según el Presidente de México, le dijo a Trump que México no pagaría por el muro. Se equivoca el Gobierno al querer referir como posición dura de su parte afirmar que el muro no lo pagará México.

 

El error del equipo de la Presidencia es histórico e incomparable con cualquier otro que se recuerde. Cómo no se pudo prever que al haber impuesto la fecha para el día del discurso de Trump para el tema migratorio, vendría a ratificar su posición y no a retractarse.

 

El error no es sólo de quienes manejan la diplomacia, sino del Gobierno en su conjunto. Yo no puedo ver este hecho, la concepción de este hecho sin la participación de la Embajada de México en Estados Unidos y de la Cancillería, pero tampoco lo puedo, la concepción de esto que ocurrió sin la opinión del equipo más cercano del gabinete de Enrique Peña Nieto.

 

No lo puedo ver y no es así, por eso es un error en su conjunto; no de un coordinador de asesores, ¡por favor!, no, es de todos, es del presidente Peña, es de la Embajada, es de la Cancillería, pero es de los que están junto a Peña, ése es el error…

 

Pregunta, (P): ¿Quiénes?

 

MBH: Luis Videgaray, sin duda que sí, y todos los que hablan de manera cercana con el Presidente. Son con quienes se concibe este tipo de situaciones.

 

La sensación que está instalada en la gente, en el pueblo de México es de enojo y frustración. Nos sentimos avergonzados porque quien ha agraviado tanto a los mexicanos vino a nuestra casa y nuestro presidente no supo defendernos.

 

¿Cómo queda el Gobierno federal y el presidente Peña después de los hechos de ayer?, ¿cómo queda después del discurso que pronunció Trump en Arizona? Debieran reconocer que es un error y no empezar a crear un supuesto control de daños saliendo a opinar lo que, dicen, Peña le dijo en privado. Hubiéramos querido que se lo dijera en público, ¿verdad?, para que tuviéramos constancia de eso.

 

México queda mal frente a Latinoamérica y frente al mundo. El daño de la entrevista sin duda es para el Gobierno federal quien no deja de cometer errores, pero también para el Estado mexicano que no se comporta como el hermano mayor de Latinoamérica.

 

¿Vendrá Hillary Clinton? Es una pregunta, sólo lo sabe ella y su equipo de campaña. Yo creo que sólo vendría si el efecto de la entrevista fuera muy favorable para TrumP: A quien sí le urge que venga es al presidente Peña para tratar de compensar su error, de lo contrario quedaría como hoy se ve, es decir, como plataforma útil para el candidato republicano.

 

Es lo que les quiero decir sobre este tema.

 

P: ¿Deja entonces un mal sabor de boca esta visita? Un pregunta del tema.

 

Y la otra: ¿qué esperas entonces del próximo informe de gobierno del Presidente.

 

MBH: Es una pregunta mucho más compleja o que tiene muchos más elementos. Bueno, es un error, nos sentimos avergonzados como nunca; alguien lo ha querido comparar con “comes y te vas”, ¿se acuerdan?, pero con “comes y te vas no nos sentíamos agraviados”, a lo mejor sí nos sentíamos avergonzados por el Presidente de la República que tuvo la ingenuidad de hablar por teléfono con alguien tan hecho o con un jefe de Estado de Cuba que tiene tanta experiencia en esto, pero no había un agravio del cual hoy nos sentimos avergonzados, de verdad que sí.

 

Hoy todos tenemos esa sensación. No es un mal sabor de boca, es un error que va a tener sin duda efectos muy profundos en la opinión de la gente sobre el Gobierno federal, muy profundos.

 

Y respecto a qué espero yo del informe, bueno, primero quiero conocer el informe para ver si tiene datos referenciados a la situación económica, la situación social, a todo lo que implican las condiciones en que viven las familias en México, a la pobreza, desde luego, a la criminalidad, si tiene evaluación y propuestas; y de esto, ni siquiera lo van a tocar.

 

P: Pero el nuevo formato…

 

MBH: No, eso no es el informe. El informe es la entrega del secretario de Gobernación a nombre del titular del Ejecutivo a la Cámara de Diputados o al Congreso de la Unión para empezar sui glosa, eso es, hoy a eso se redujo.

 

Yo también puedo asumir que la oposición hizo tanto para que el Presidente no fuera, que ahora, pues se queja pero sin deber hacerlo cuando ya no quieren regresar los presidentes de la República.

 

Antes era una obligación, por muchos años fue el Día del Presidente, después fue el Día de Tormento del Presidente, hasta que le hicieron una reforma, y no fue logro, eh, fue una pérdida estratégica no tener presente al Presidente un solo día.

 

Tiene que haber un formato, la propuesta de un formato republicano, constitucional, de diálogo. Pero eso de los 33 empresarios jóvenes, bueno, con mucho respeto para todos ellos, pero no representan al pueblo de México.

 

P: Senador, ¿el desastre de ayer termina por humillar a México?

 

MBH: Sí. O sea, nos sentimos humillados, ofendidos como nación, como sociedad, nos sentimos que nuestro Presidente no nos defendió. Tuvimos la oportunidad de que Trump hubiera regresado regañado, puesto en su lugar, así como decimos, puesto en su lugar, por el Presidente de la República.

 

P: ¿Pero faltaron pantalones o qué?

 

MBH: Faltó firmeza, sin duda, faltó dignidad, pero faltó estrategia y de todo el Gobierno federal. Véanlos cómo están hoy, véanlos, la entrevista del Presidente del programa de noticias de 10:00 de la noche es un intento de control de daños; la entrevista de la canciller en otro programa por televisión es un control de daños, o sea, fue una entrevista que se pactó después de cómo ocurrieron las cosas, no estaba prevista.

 

Las ocho columnas de muchos diarios de prensa es control de daños, resaltando lo que le dijo Peña, es control de daños.

 

P: ¿Qué debió hacer Peña?

 

MBH: Eso que dije, debió haber dicho ante los medios la posición de estar en contra del muro y que como nación nos vamos a oponer; la posición de estar en contra de que sean incautadas las remesas; la posición de estar en contra, de impedir una expulsión masiva de connacionales; y la posición de reprochar y estar en contra de los dichos xenofóbicos, racistas, de ofensas contra los mexicanos migrantes.

 

Ésa es la oposición. O sea, yo no esperaba que hubiera venido Donald Trump a retractarse, a como dijo “que se hinque”, dijo alguien, el ex presidente Fox, “y que pida perdón”, por favor, eso no ocurre. Vino y controló, no solamente determinó el día y la hora, determinó el desahogo de la conferencia de prensa, ustedes que son tan sensibles, fue una conferencia de prensa, no sé si no pactada, no sé si no prevista, pero que se circunscribió para preguntas que hicieron periodistas que venían con Trump, que se formularon en inglés.

 

Eso cómo es posible, en todo caso se pacta que dos preguntas de periodistas mexicanos y dos extranjero, o tres.

 

O sea, desde ese momento yo ya veía el dejo, la actitud del presidente Peña –muy preocupado- asimilando ya el error enorme, de la canciller en un estado de shock; así es que es lo que ocurrió y no estoy diciendo nada de lo que ustedes no den cuenta en las imágenes que todos vimos.

 

P: ¿Cómo hizo quedar Donald Trump al presidente Peña?

 

MBH: Mal, vino como un autoritario, es un gran comediante, vino a quererse presentar, como a reponer una nueva actitud y nos vino a gritar, como dicen las señoras, “le dije su precio”. Así vino a hacer, en esa actitud vino.

 

Era la gran oportunidad de que se hubiera regresado regañado, estaba en México y en Los Pinos, ¿quién tiene ahí la autoridad para hacer lo que quiera?, el Presidente, se hubiera regresado regañado.

 

Esa es la situación, alguien que llega a tu casa a faltarle al respeto, ¿qué le haces?, yo lo corro, pero antes le digo cosas, porque si no, pierdo el respeto de mis hijos.

 

Si yo no defiendo a mi familia, no defiendo a mis hijos, yo pierdo el respeto de ellos. Y es lo que hizo –vean el traslape que están haciendo de lo que es el Presidente de la República- pierde el respeto de los mexicanos.

 

No estoy queriendo sacar, de verdad, coyuntura, no. Entonces callémonos todos.

 

P: Senador, en tu análisis, ¿cómo queda el Gobierno de México ante la eventual posibilidad de que también la candidata demócrata Hillary Clinton venga al país, toda vez que algunas encuestas la mencionan a ella en la delantera por la presidencia estadounidense?

 

MBH:  La respuesta a la carta enviada hace una semana, eso es dicho de la canciller, hace una semana se enviaron las cartas, no lo esperaban con la brevedad que lo hizo Donald Trump, lo esperaban para más tiempo y esperaban que la reunión podría darse –si se daba- después del regreso del presidente Peña de China, después.

 

Quien aprovecha el momento para determinar la fecha y la hora es Trump y su equipo, para el día en que iba a presentar su discurso sobre migración en Arizona, eso está a la vista, ¿cómo no se pudo reflexionar a qué venía?, ¿qué de plano ya no hay inteligencia política en el Gobierno?

 

Ahora, ¿vendrá Hillary Clinton? A ver, vendrá solamente si lo necesita, Donald Trump lo necesitaba y vino, y se sirvió con la cuchara grande. Hillary Clinton Vendrá solamente si lo necesita.

 

Tengamos la dimensión de que en México no se está resolviendo la elección de Estados Unidos, a quien le urge que venga a México no es Hillary, es Peña. Si no viene Hilary Clinton a México, si no viene, va a quedar Peña como quien por ingenuidad, por error, le puso una plataforma idónea, una plataforma a Trump.

 

Lo que pasó ayer es una plataforma que utilizó Trump a su favor.

 

P: ¿Se suma a este error el no haberse reunido con los dos candidatos en la misma fecha o al mismo tiempo?

 

MBH: No vas a disponer desde México de su agenda.

 

P: ¿Pero sí se puede planear, no?

 

MBH: No, no llegan a eso los candidatos.

 

P: Son candidatos, no son presidentes.

 

MBH: Pero no son del PRI ni del PAN, ¿me explico?

 

P: Digo, no tienen la estatura del PAN.

 

MBH: Pues por eso mismo. Peña sintió que estaba poniéndole condiciones, era el momento, el que le sugirió esto, el que le propuso esto le dijo “es el momento de poner supremacía política frente a los que quieren gobernar el país más poderoso del mundo”, así lo concibieron.

 

Eso fue lo que los llevó, “es el momento de instalarte como el Presidente que sentó a los candidatos”, por favor.

 

No es el tamaño del comediante que vino.

 

P: Y desde su óptica quién puede (inaudible).

 

MBH: No, sin duda tiene que ser la Cancillería y el equipo cercano a Peña Nieto, entre los que sin duda debe de estar Luis Videgaray, sin duda que sí.

 

Nada que el coordinador de asesores.

 

P: Senador, ¿después de esto es necesario revisar la política exterior y la diplomacia que se está llevando a cabo en el país?

 

MBH: A ver, mira, Ana, la política exterior está definida en nuestra Constitución.

 

Aquí no estamos hablando de jefes de Estado, estamos hablando de candidatos, pero sin duda la diplomacia es toda forma que un gobierno, todo un conjunto de formas que un gobierno desarrolla para que el país tenga una mejor relación con personas, con países, vínculos comerciales, políticos, de toda forma.

 

Eso es la diplomacia. La diplomacia hace posible los imposible o hace que las formas sean las formas más sutiles y hay momentos de absoluto éxito, engañaron al Gobierno mexicano, lo engañaron, pensaron que se iban a instalar como los hombres de la alta diplomacia que sientan a los que quieren gobernar al país más poderoso del mundo.

 

¿Va a venir Hillary? Desde mi opinión, no, salvo que lo necesitara, salvo que esta entrevista le provocara a Trump un gran desarrollo, entonces vendría. A quien le urge que venga es a Peña, y ahorita están haciendo relaciones para que venga. No va a venir, salvo que ella dé la nota de que viene.

 

P: ¿Crees que fue un error, no a la vista de los resultados, sino a la vista de las intenciones?

 

MBH: A ver, a lo mejor no es un error invitarlos, es un error que le hubieran aceptado la fecha, la hora, antes de su viaje a China, el mismo día que pronunció su discurso en Arizona, y el error fue no haberle dicho a Trump lo que le debió haber dicho, es lo que ya pongo yo, ponga énfasis, se pudo haber ido regañado, se pudo haber ido con la cola entre las patas Trump, se pudo haber ido, el error fue no haber actuado con firmeza, ese fue el error.

 

Ya que estaba acá, ya que había condiciones, había estado acá, ¿cuál tenía que ser? La firmeza, le dijo su precio, hubiéramos dicho.

 

P: ¿Coincide con esta precisión en el sentido de que Trump terminó por usar al Presidente?

 

MBH: Siempre la dije, en mis tres tuits primero del día martes lo dije, que venía a usarlo, venía a aprovecharse, venía a sacar lo que pudiera, y hoy está visto, está visto, se presentó como un gran comediante, como un gran comediante, no le atribuyo que se haya presentado con un aspecto presidencial, no, vino, es un gran comediante, y no tuvo la dureza el Presidente de ponerlo en su lugar.

 

Ya estoy hablando pues como, como hablamos… ¿sí o no, Andrea? Llegas como papá o como mamá, tienes tus hijos, llega alguien y te ofende en tu casa, par que tus hijos te respeten ¿qué tienes que hacer? Contestar y defender el honor y la dignidad de la familia, ¿verdad? Así se sienten los mexicanos.

 

P: Senador, ¿no debió haber consultado al Congreso para una decisión como esta de invitar a un personaje así?

 

MBH: No, tampoco. Ahora el Congreso tiene que tener una opinión al respecto, porque cómo, al senador Gamboa lo entrevistan todos los días ahora en la mañana para opinar, es control de daños, pues.

 

P: ¿El Senado prevé algún extrañamiento?

 

MBH: Yo lo voy a promover, pero seguramente se van a poner el PRI y el PAN.

 

P: ¿El PAN también?

 

MBH: Sí, seguro. Van a querer que comparezca la Canciller para explicar… No, acordemos un extrañamiento desde ya.

 

P: ¿En qué términos sería?

 

MBH: No lo sé todavía, pero lo voy promover, lo voy a diseñar, hay que hacer un extrañamiento por lo que pasó, no venir, ¿para qué sirve? Es como la venida de Castillo ayer, ¿qué les dije? ¿Para qué sirve? ¿Se los dije o no se los dije? ¿Para qué iba a servir? Le montaron una vacilada una balandronada, en el día que se elige la Mesa Directiva, una vacilada, pues.

 

Qué mal andamos también acá.

 

P: ¿Qué tendría que hacer el gobierno de Peña?

 

MBH: Puede hacer muchas cosas, puede fijar posiciones firmes ya, está obligado, eso que dice: es una amenaza para México, pero lo dice después de que se fue, no lo dice en presencia de Trump, y es uno de los controles de daños que intentan manejar.

 

Dice: es una amenaza para México… Ah, ¿por qué no se lo dijiste al cabrón en su cara? ¿Verdad que sí?

 

Un día yo era estudiante de la Universidad Metropolitana, estudiaba medicina, y un muchachito joven, bueno, flaquito, delgadito, medio insoportable le caía mal a un grandote, y a  lo mejor tenía razón el grandote de que le cayera mal el otro, porque era medio insoportable, y le dice “te voy a golpear”, y le dice “el día que quieras, porque con un solo golpe que te pegue y aunque después me mates voy a sentirme satisfecho”, ¿sabes qué hizo el grandote? Ya no lo tocó. Así hay que estar, actuó con mucha valentía, con mucha inteligencia, me acuerdo de eso, para mí eso es una lección de vida, la que yo recuerdo de esa vez, así tiene que ser.

 

P: ¿Senador, y en a nivel internacional cómo va a quedar la imagen de México?

 

MBH: Mal frente a Latinoamérica, mal frente al mundo, el Estado mexicano no termina de comportarse como el Estado, no empieza a comportarse, termina por comportarse como el hermano mayor de Latinoamérica, mal.

 

P: ¿Y en Estados Unidos?

 

MBH: Yo no veo que los mexicanos en Estados Unidos por haber venido Trump, vayan a votar por Trump, yo espero que sigan indignados y más de que vino a su país a ofendernos.

 

Sí decepcionados de su gobierno, de su presidente, pero muy indignados, muy indignados porque vino a nuestro país a ofendernos.

 

P: ¿Los deja desprotegidos a los connacionales?

 

MBH: Bueno, es una amenaza, son amenazas las que es vierte, el hecho de que los va a deportar, que les va a incautar las remesas o el valor de su trabajo sí los tiene preocupados, sí los tiene angustiados, y es cuando tienes que asumir una posición de nación a nación.

 

Yo que he sido un lector, ya no mucho, profuso del Siglo XIX, bien recuerdo cómo veían a México cuando no se había consolidado a la nación pero no conocían del valor del carácter de un hombre, Benito Juárez.

 

Cuando llegan los franceses y todo se vuelve una tendencia de afrancesamiento, todo, la forma de vestir, los niños empezaban a aprender francés, porque era el idioma que iba a utilizarse en México, las costumbres era un afrancesamiento terrible. Los mexicanos se reunían en el panteón de San Fernando a bailar el Día de Muertos y a desarrollar las costumbres mexicanas, y entonces cuando hubo un reporte de esos hecho, Guillermo Prieto dijo, no lo recuerdo con exactitud, cuan importante era que tuviéramos un mexicano feo como Presidente, que no podía tomar chocolate sino chopear chocolate, que no podía montar un caballo sino una mula, pero que era tan importante que en ese momento hubiera un mexicano así gobernando un país que quería ser aniquilado.

 

Entonces México es un país que tiene una enorme trascendencia de dignidad y por eso después de este error, el presidente Peña debería de asumir una posición de máxima dignidad, eso es lo que le queda a Peña, no encubrir su error, a lo mejor ni siquiera reconocerlo, pero asumir una posición de máxima dignidad, “a ver, ya pasó esto, pero a partir de esto, esto más esto”, eso es lo que debería de hacer el presidente Peña, desde mi opinión.

 

P: Senador, usted dice que los mexicanos no van a cambiar su visión de no votar por Trump, esto no les crea confusión, el hecho de que el Presidente al tipo que los insulta día a día.

 

MBH: Bueno, ése es un motivo de indignación, desde mi opinión, yo no veo a ningún mexicano que vota en Estados Unidos cambiando su posición porque vino a México, sino veo a un Estado mucho más contrariado, mucho más ofendido, de quien vino a México y ofendió aquí en su casa a los mexicanos.

 

Gracias.

 

 

 

0-0-0