Ciudad de México, 02 de diciembre de 2021.
Con su venia presidenta, buenas tardes, compañeras y compañeros senadores. Giovanni Sartori, uno de los grandes politólogos contemporáneos decía que la democracia no se debe entender simplemente como un principio aritmético donde quien más sume siempre gana, en sus palabras, esta es la dictadura de la mayoría, sino como un sistema representativo que forma mayorías pero a la vez reconoce, da voz y respeta a las minorías.
En este sentido, las comisiones de investigación son comisiones especiales creadas por las cámaras que tienen como objeto esclarecer temas de interés público y los resultados de estos gobiernos, por lo tanto, el Poder Legislativo funge como un contrapeso dentro del Estado y las comisiones investigadoras son mecanismos de control que ayudan a limitar, auditar, vigilar a otros órganos del gobierno e incluso a particulares.
Por ejemplo, en la elección presidencial de Estados Unidos del año 2016 se documentó que la agencia de publicidad Cambridge Analytica adquirió de forma ilícita la información personal de 50 millones de usuarios de Facebook, y con estos datos logró manipular el algoritmo de la red social para manipular el contenido que visualizaban los usuarios, robó datos e incluso hizo chantajes a actores políticos, entre otras prácticas que beneficiaron el entonces candidato Donald Trump.
Ante esto, diversas instituciones gubernamentales norteamericanas decidieron investigar a fondo, una de estas instituciones fue el Senado de los Estados Unidos. Durante la investigación la Cámara Alta citó a comparecer a diversas personalidades del sector político y empresarial de Estados Unidos, uno de ellos fue Mark Zuckerberg dueño y creador de Facebook, quien fue cuestionado sobre cómo su empresa permitió que los datos personales de 50 millones de usuarios fueran robados y violaba las políticas de privacidad de la empresa. Finalmente, Facebook fue sancionada con cinco mil millones de dólares por malas prácticas y obligada a reestructurar por completo su política de privacidad.
En este sentido, las comisiones investigadoras deben ser prerrogativas y herramientas para que las minorías parlamentarias y por qué no, las mayorías, tengan acceso a mecanismos para vigilar el actuar de los gobiernos o asuntos que sean de interés general. Desde el Poder Legislativo estamos para vigilar, ser críticos, cuestionar y ser realmente un contrapeso al Poder Ejecutivo, hacer este contrapeso ayuda a que haya gobiernos de honestos y eficientes, no debe ser que las cámaras de legisladores sean comparsas del partido en el poder.
La creación de estas comisiones es algo cotidiano en el marco internacional, por ejemplo, en España el Senado se integra por 263 legisladores y se necesita el apoyo de al menos 25 senadores para crear una comisión investigadora. En México somos 128, la mitad que en España y se necesitan 65 legisladores, casi el triple de legisladores para poder formar una comisión legislativa.
En México tenemos ejemplo de estas comisiones que han sido exitosas en los últimos 10 años, ya sea que se haya formado en la Cámara de Diputados o en el Senado, por ejemplo, tenemos el caso del seguimiento del caso Ayotzinapa, agresiones a periodistas, seguimiento al Aeropuerto de Texcoco, caso Oceanografía, caso Odebrecht -que hasta hoy sigue causando polémica en la opinión pública-, todas ellas avaladas por la entonces mayoría parlamentaria, por la demanda social generalizada.
Paradójicamente la creación de estas comisiones ha descendido exponencialmente durante este sexenio y no específicamente por falta de solicitudes, si no por la negativa de los grupos mayoritarios. En democracias consolidadas, de acuerdo a diversos índices de democracia, como en Dinamarca, España, Uruguay, Suecia, actualmente existe un gran número de comisiones investigadoras, ya que es el cuestionamiento y la vigilancia del poder lo que hace que las prácticas de gobierno sean mejores en los países.
Es importante señalar que en el contexto mexicano más comisiones investigadoras, por cierto, no significa más dinero ya que de acuerdo a la Ley Orgánica del Congreso estas comisiones no generan ningún impacto presupuestal, debería ser una opción para la minoría poder crear una comisión que investigue por ejemplo, los casos de corrupción que se presenten en el Gobierno Federal, la corrupción en Comisión Federal, en Pemex; los problemas de la Línea 12 del Metro que causaron muerte de muchos ciudadanos de la Ciudad de México; las altas tarifas de Comisión Federal, irregularidades en programas sociales en fin.
Se pudiera investigar por qué se están dando estos casos que generan y lesionan el patrimonio de los mexicanos. Pudiera ser la supuesta corrupción en el Aeropuerto de Texcoco y recientemente exhibidas por Latinus, sobre la corrupción en Santa Lucía. Desde el PRD siempre hemos sido críticos al poder en turno, siempre hemos creído en la división de poderes y hemos protestado a favor de la autonomía del Poder Legislativo y velado por el empoderamiento el respeto a las minorías. Es cuanto presidenta.
