Versión estenográfica de la intervención del coordinador Miguel Ángel Mancera Espinosa, del Grupo Parlamentario del PRD, durante las Audiencias Públicas para la Integración de la Agenda Legislativa de los Derechos de las Niñas y Mujeres de México, en la sede del Senado ubicada en Xicoténcatl, colonia Centro.
Muchas gracias, muy buenos días para todas y todos ustedes, quiero saludar al presidente de la Comisión Nacional, a las distinguidas senadoras y a las integrantes de los organismos que nos acompañan hoy, representantes de una lucha internacional y también del Gobierno de la República.
Sólo para insistir en un tema que me parece fundamental porque estamos a punto de entrar a ese debate, que es el de los delitos graves.
Yo podría compartir este planteamiento que hacía el presidente de la Comisión, en el sentido de que es preferible que no existiera la prisión preventiva, ojalá lleguemos hacia ese punto, ojalá lleguemos a un punto en donde las medidas cautelares que tenga México sean bastantes y suficientes para poder llegar hasta eliminarla, que es lo que nos está planteando Naciones Unidas.
Pero lo que hoy estamos discutiendo es por qué sí está el homicidio como delito grave, con prisión preventiva oficiosa, y por qué no el feminicidio; ese es el enfoque que hoy se está planteando.
Estamos hablando de una muerte violenta por razones de género; este debate yo lo recuerdo cuando teníamos las reuniones de procuradores y entonces, platicábamos con Malú en ese entonces, y cuando llevábamos esta propuesta, que no existía, de incluir la tipificación del feminicidio en las legislaciones locales, hubo varios procuradores que dijeron que era ocioso que se hiciera esto, porque ya existía el homicidio.
¿Qué razón de ser tiene? Lo acabo de oír otra vez en la Cámara de Diputados, “¿y para qué quieren el feminicidio si ya tenemos el homicidio?”
Entonces, si nosotros no damos una señal clara ahí, -y ahí sí yo adelanto-, el PRD va a ser inflexible en este punto; evitemos que se vuelva delito grave el delito electoral, por ejemplo, que están planteando.
¿Pero por qué?, no encontraría yo la razón para que dijéramos que estamos cometiendo un exceso, aunque conozco los criterios de Naciones Unidas y entiendo cuál es la lógica, pero si no avanzamos en este asunto, vamos a seguir teniendo los señalamientos.
Porque hay diferencias de criterios en los tribunales, se hacen carpetas de investigación que comienzan con homicidio cuando hay una muerte de mujeres, cuando el protocolo latinoamericano lo que recomienda es que se inicie también con la investigación, primero, para descartar todas las posibles implicaciones de violencia de género. Primero descártenla, incluso cuando hay suicidios, incluso cuando hay suicidios o cuando se trata, de inicio, de lo que pareciera ser una muerte accidental.
La Suprema Corte de Justicia también ha establecido, en sus resoluciones, esta orientación, entonces, yo creo ahí, y entiendo por supuesto el planteamiento del presidente de la Corte, no se abra ya el Artículo de la Constitución para aumentar el catálogo, ya no se aumente.
Pero este es muy importante, esto no se puede modificar en la Cámara de Diputados, porque estaría rompiendo también con algo que es simbólico y como siempre se ha dicho, pues lo que no se menciona, no existe.
¿Por qué nuestra Constitución considera que el homicidio es un delito grave de prisión preventiva oficiosa y el feminicidio no? Yo no tendría hoy una respuesta, o sea, si a mí me preguntaran técnicamente, en técnica jurídica penal, en relación a la gravedad del delito, en relación a la repercusión social, ¿en relación a qué?
Yo creo que ahí debemos de insistir, yo estoy convencido que ese punto, que además lo reitero ahora el presidente de la Mesa Directiva, el senador Martí Batres, debiéramos de insistir en eso, es una voz muy importante el de las mujeres para lograr este avance.
Y en todo lo demás pues vamos a estar apoyando, como ya se decía aquí, esperemos que en este periodo salgan ya, queden en ley, queden las reformas, las iniciativas que se han impulsado por varias de mis compañeras y mis compañeros en el Senado de la República, y que van a dar un avance consistente.
Yo creo que ahí vamos a tener también pues puntos muy importantes en esta protección de derechos humanos de la que hablaba el presidente, de la que hablaban representantes de ONU y de Gobierno Federal, y por supuesto, temas sustanciales que van a ir visibilizando más este enfoque.
Es algo que se está volviendo, incluso, ahí en el Senado, yo se los quiero platicar, en el lenguaje mismo de las leyes; déjenme decirles, por ejemplo, que cuando llegó el dictamen de la Fiscalía General de la República, decía “cuáles son los requisitos para ser el fiscal”, ¿no?, entonces ahí empezó también, bueno, desde que hagamos las leyes, no pongamos estas prácticas ahí reiteradas.
Por eso si ustedes hoy leen esta Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, van a ver qué dice, “la persona titular de la Fiscalía”, ya no dice “el Fiscal”.
Pero todavía tenemos en reglamento, todavía tenemos en nuestras disposiciones del Senado, que dice “los senadores sesionarán”, “los senadores”, y no se menciona nunca a las senadoras.
Entonces estamos en esas tareas de manera permanente, pero yo quería insistir solamente en el asunto del feminicidio, el por qué, no es solamente un asunto de querer agravar o de “es que si lo dejamos al arbitrio judicial”, que yo sé que está ahí, pues entonces eliminemos la prisión preventiva de todos, también del homicidio, ¿porque cuál es la diferencia?
Se llega a ese punto, será muy bueno, pero si estamos considerando que para esos delitos hoy no tenemos las medidas cautelares suficientes y por eso se establece una prisión preventiva oficiosa, no verían la diferencia entre homicidio y feminicidio, porque si hacemos esa diferenciación, estamos abonando en algo que ha sido una lucha de varios años y que creo que va por buen camino.
Es cuanto presidenta, muchas gracias.
