El Senado de la República debe tener la facultad de autorizar o negar la participación de representaciones nacionales en operaciones de ayuda humanitaria o de mantenimiento de paz, sostuvo Zoé Robledo, legislador del Grupo Parlamentario del PRD.
Luego de que el Presidente de la República el Presidente anunciara ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas la participación de México en las Operaciones de Mantenimiento de la Paz (OMP), el senador chiapaneco señaló que esta decisión no puede ser tomada unilateralmente, sino que debe haber un debate en el que el Senado incida en las operaciones, militares o humanitarias, en las que el Ejecutivo Federal quiera participar.
“El Senado, históricamente, ha cumplido una función esencial en el marco del pacto federal mexicano: ser un contrapeso de las decisiones del Poder Ejecutivo”, afirmó Zoé Robledo.
Por ello, a través de una iniciativa que modificar los artículos 76 y 89 constitucionales, propuso que sea una obligación del Ejecutivo presentar una solicitud expresa ante la Cámara Alta para que personal militar pueda participar en una Operación para el Mantenimiento de la Paz de la ONU.
“Eso permitiría garantizar que esta asistencia tenga congruencia con nuestra política exterior fundada la paz: la no intervención, la resolución pacífica de los conflictos y el respeto a la autodeterminación de los pueblos”, argumentó.
Recordó que de acuerdo con el gobierno federal, la participación de México en las OMP será gradual y en términos del tipo de labores en las que se participará, además dichas labores podrán comprender personal militar o civil para la realización de varias tareas.
Pero sostuvo que “si las armas mexicanas van a coadyuvar a la defensa de la paz mundial, debe haber un consenso en los niveles de gobierno”.
Zoé Robledo señaló que los objetivos OMP se basan el consentimiento de las partes involucradas, imparcialidad y uso de la fuerza sólo en situaciones de legítima defensa y en resguardo del mandato encomendado.
En ese sentido, “la participación de las Fuerzas Armadas mexicanas, Ejército y Marina, en el extranjero debe tener como requisito su absoluto respeto a los derechos humanos y la acreditación en territorio nacional”.
Por otro lado, cuestionó si México está en el mejor momento para intentar mantener la paz en otros países cuando hay muchas partes en el país donde es imposible para el Estado mexicanos mantenerla.
“Si nuestros problemas de defensa de derechos humanos, de seguridad, de violaciones a los derechos fundamentados en la Constitución no son posibles de mantener, debemos reconsiderar y discutir si éste es el mejor momento para hacer un anuncio de esta naturaleza”, concluyó.
La iniciativa fue turnada a las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Relaciones Exteriores y Estudios Legislativos, Segunda, para su análisis.
