Con el propósito de fomentar y dar mayor impulso a la investigación científica y tecnológica, el senador Armando Ríos Piter propuso otorgar a los inversionistas e investigadores incentivos fiscales en proyectos de inversión dirigidos a ese ramo.
Ante el rezago de nuestro país en ciencia, tecnología e innovación y la disminución presupuestaria en la materia, el senador del PRD sostuvo que es necesario diseñar estrategias para evitar la pérdida de competitividad, así como mantener y fortalecer las capacidades de las instituciones de educación superior y centros públicos de investigación
En ese sentido, presentó una iniciativa para modificar el artículo 196 de la Ley del Impuesto sobre la Renta que busca impulsar la inversión privada y coinversión en universidades e institutos públicos nacionales con perspectivas de viabilidad técnica y financiera, desarrollando esquemas de generación y aplicación de conocimiento que recuperen las inversiones.
Al fundamentar su propuesta, Ríos Piter apuntó que la contribución de México a la producción mundial de conocimiento no alcanza ni el 1% del total y, mientras que la experiencia muestra que para detonar el desarrollo científico es conveniente una inversión superior o igual al 1% del PIB, en el país se invirtió apenas el 0.5% del PIB en 2012, el nivel más bajo entre los miembros de la OCDE e incluso menor al promedio latinoamericano.
Además, subrayó que en 2015 la Ley de Egresos de la Federación sólo destinó al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología un monto de 33,706.7 millones de pesos, y para 2016 se consideran 34,010 millones de pesos, es decir, un incremento menor al 1%.
En ese sentido, Ríos Piter aseguró que su propuesta permitirá avanzar en la búsqueda conjunta de esquemas exitosos de vinculación entre las actividades de ciencia y tecnología y el sector productivo.
Esto, añadió, contribuirá a romper paradigmas e influirá decididamente en la reactivación de la economía, el mejoramiento de los niveles de competitividad y el crecimiento sustentable del país.
La iniciativa plantea estímulos fiscales a contribuyentes que realicen inversiones en proyectos de Investigación; desarrollo tecnológico, innovación, formación de recursos humanos, infraestructura y divulgación Científica y Tecnológica, permitiéndoles acreditar hasta un 10 % del Impuesto sobre la Renta.
Asimismo, para evitar cualquier distorsión en el objetivo de la propuesta, se establecen límites como que el monto de la acreditación a distribuir entre los contribuyentes participantes no excederá de 1,000 millones de pesos por año.
Además, el estímulo no rebasará los 100 millones de pesos por contribuyente o proyecto, ni podrá acumularse respecto al ejercicio fiscal anterior.
“Esta iniciativa contribuye a una nueva política de integración entre el sector privado y público, en torno a una meta sexenal de mejorar las condiciones de investigación y competitividad del Estado mexicano”, aseveró.
La iniciativa fue turnada a la Cámara de Diputados para su análisis.
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