Paquete fiscal 2015 basa crecimiento económico en un PIB potencial sobreestimado: Mario Delgado


Segunda intervención del senador Mario Delgado Carrillo, del Grupo Parlamentario del PRD, en la reunión de comisiones unidas de Hacienda y Crédito Público y de Estudios Legislativos, Primera, durante la discusión de la Ley de Ingresos 2015.

 

Mario Delgado Carrillo, (MDC): Muchas gracias, senador.

 

Bueno, pues qué bueno que se corrigió el precio del dólar, el precio del barril del petróleo de exportación, pero hay muchas más cifras que corregir en esta Ley de Ingresos, y yo voy desde la cifra original que es la base de la estimación de la Ley de Ingresos, que es el crecimiento del PIB para el 2015.

 

El día viernes, el viernes pasado, el INEGI dio a conocer la evolución del (inaudible) del mes de agosto de 1.3 por ciento, y con esta estimación prácticamente estamos cancelando toda posibilidad de que se cumpla la meta de crecimiento de este año.

 

Es decir, para promediar 2.7 por ciento que es la estimación oficial, durante la el mes de septiembre, octubre, noviembre y diciembre tendríamos que crecer al 4.5 por ciento para que diera un promedio del 2.7.
Esto, pues está claro que no se va a cumplir y que tendremos un crecimiento este año pues cercano al 2 por ciento; y ello resulta particularmente grave porque tenemos un nivel de endeudamiento muy importante.

 

Durante el 2013, la tasa de crecimiento de la economía fue de 1.1 por ciento; sin embargo, la tasa de endeudamiento creció 4 puntos del PIB. Para el 2013, para el 2014 estaremos terminando con un endeudamiento también de 4 puntos del PIB y una tasa de crecimiento pues apenas arriba del 2 por ciento.

 

O sea, el balance en los primeros dos años de esta administración será el equivalente a 8 puntos del PIB de deuda y apenas 3 puntos, 3.5, de crecimiento de la economía.
Esto sin duda que va minando la credibilidad de nuestra economía y nos va comprometiendo. Es claro que no estamos en una regla de sustentabilidad de la deuda en nuestra economía-

 

Está creciendo más rápido la deuda, el doble de lo que crece la economía; y esto se vuelve insostenible.

 

Y es exactamente el mismo supuesto para el 2015; nuevamente se piden casi 4 puntos del PIB de deuda y aparentemente un crecimiento de 3.7 por ciento.

 

Sin embargo, el 3.7 por ciento no hay de dónde agarrarlo. Para este año se pidió un esfuerzo extraordinario en materia de gasto, incrementó casi en 10 puntos en términos reales el presupuesto público, aumentó de manera significativa la inversión porque se le dio al gobierno la posibilidad de establecer una política contracíclica.

 

Sin embargo, el PIB no responde, la economía no responde a pesar de este incremento del gasto.

 

Para el año que entra no va a crecer el gasto como creció este año, de tal manera que no esperamos una política fiscal más agresiva que este año y entonces no podríamos esperar que del lado del gobierno, que del lado del gasto del gobierno vaya a estimular la economía.

 

Los otros componentes de la demanda agregada no nos hacen ser muy optimistas tampoco, el tema del consumo es, no nos extrañe que estemos viendo niveles muy bajos, históricamente bajos, por ejemplo en el primer semestre de este año tenemos la tasa más baja de crecimiento del consumo en los últimos 4, apenas de 1.7 por ciento.

 

Y esto pues tiene lógica si vemos cuál es el ingreso de las familias, el ingreso de las familias se está cayendo, el poder adquisitivo sigue su caída que no tiene ningún freno y por lo tanto, pues si no tienen dinero las familias y tampoco tienen dinero las empresas por la Reforma Fiscal, pues no nos extrañe que el consumo esté en niveles muy bajos y que la inversión también pues esté en niveles históricamente bajos.
Entonces la pregunta es: ¿de dónde va a venir el crecimiento?, ¿de dónde va a llegar el 3.7 por ciento en el 2015? No nos queda más que encomendarnos a los Estados Unidos, que tendría que tener un muy buen año para que fuera suficiente para jalar a nuestra economía.

 

Me preocupa también estos supuestos de mayor deuda y bajo crecimiento porque no sólo es en este año, las proyecciones que se están dando de requerimientos históricos financieros del sector público incrementan la brecha de lo que va a necesitar esta administración de deuda de aquí al 2018.

 

Y la proyección al 2020 es que por lo menos van a necesitar 7 puntos adicionales del PIB de lo que apenas hace año y medio estimaban y las cifras de crecimiento económico pues se han ajustado.

 

Particularmente grave nos parece esta composición de Ley de Ingresos donde no nos blinda ante la incertidumbre internacional; es de todos conocidos que la Reserva Federal de los Estados Unidos va a terminar con su programa de estímulos, esto en pocas palabras quiere decir que va a aumentar la tasa de interés en los Estados Unidos.

 

Esto va a provocar que muchos capitales que están invertidos en las economías emergentes, pues se regresen a los Estados Unidos, hay una reversión de capitales hacia los Estados Unidos y eso puede generar mucha estabilidad en varios países de América Latina.

 

Para nosotros resulta muy grave, lo que hemos visto en los últimos años es que se ha incrementado la demanda en Cetes por parte de extranjeros en 50 por ciento; y los valores gubernamentales en manos de extranjeros alcanza la cifra de 160 mil millones de dólares.
Hay que recordar que las reservas superan los 190 mil, pero en caso de que tuviéramos una desbandada, una regresión agresiva de capitales, pues va a meter en serios problemas la estabilidad macroeconómica de nuestro país.

 

Por eso deberíamos tener una Ley de Ingresos muy prudente que nos blindara ante esta incertidumbre económica.

 

Por ello es poco creíble también el supuesto de tasa de interés, el promedio de este año es de 3 por ciento, para el año que entra es 3.5 por ciento, pues yo me pregunto si con 50 puntos base es con lo que nos vamos a defender del incremento de la tasa de interés en los Estados Unidos.

 

Evidentemente con medio punto porcentual pues no vamos a lograr detener a estos capitales que ya están preparando su salida al prepara posiciones de largo plazo a posiciones de corto plazo durante todo este año. Hay un peligro latente, muy grave ahí para nuestra economía que en esta Ley de Ingresos deberíamos de blindar.

 

Entonces, a mi me parece que el supuesto macro de esta Ley de Ingresos es lo que deberíamos de cambiar, no deberíamos de recurrir a esta vieja fórmula del crecimiento de la deuda desmedido, el gasto primario, el déficit primario en el mes de agosto es verdaderamente preocupante, es el más alto para los últimos 32 años, 152 mil millones de pesos.

 

Esto quiero decir que nos estamos endeudando para pagar deuda y cuando tenemos un déficit primario aunque sea transitorio, porque no es el cierre del año, de este tamaño, pues entonces ya hay que ponernos a pensar qué vamos a hacer.

 

Pero no podemos seguir endeudándonos para seguir financiando un gasto corriente que no se le pone límite y tampoco se está dispuesto a revisar.

 

Por último nada más quiero decir que vamos a reservar el artículo 4 transitorio, ya que el 4 transitorio, ya que lo que se plantea ahí es que los gastos relativos a la implementación de las reformas en materia de energía; es decir, el costo de las burocracias que se necesitan o cuando menos parte de ellas, se va a dejar fuera del gasto corriente estructural.

 

 

Es decir, que no va a contar dentro del gasto corriente, que por cierto tiene límites a partir del PIB potencia, entonces es decir, lo que nos están diciendo: con esto vamos a tener una bolsa a parte sin límite y vamos a crear las estructuras a cualquier costo.
Eso no va a contar dentro del cálculo del gasto corriente.

 

Y el último gran supuesto de esta Ley de Ingresos que la vuelve absolutamente cuestionable es que se está violando la Ley de Presupuesto, bueno no se está violando, se le está dando la vuelta a la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, porque en esta Ley se estableció la regla de balance estructural para ponerle un límite al crecimiento del gasto corriente para que éste no pudiera rebasar la tasa de crecimiento del PIB potencial.

 

Entonces, cómo le hacen en este año para supuestamente respetar esa tasa de crecimiento.

 

Bueno hay una sobreestimación, exagerada, diría yo, del PIB potencial; es decir aquí Hacienda nos dice que el crecimiento del PIB potencial es 3.1 por ciento calculando que la brecha del PIB potencial para el 2015 va ser de 4.8 por ciento, cuando el Banco de México nos dice que es 2.4.

 

Es decir, el PIB potencial que calcula la Secretaría de Hacienda es el doble que lo que calcula el Banco de México, o es más del doble de lo que calcula el CIDE.

 

Entonces, en teoría se respeta la regla de balance estructural en el gasto corriente, pero se está haciendo sobre un PIB potencial inflado-

 

Si tomáramos el PIB potencial calculado por el Banco de México, el gasto corriente estructural no debería de crecer más de 0.74 por ciento, por lo tanto el crecimiento del gasto corriente estructural que se está plateando en esta Ley de Ingresos está sobreestimado y rebasaría el límite que establece la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria en la regla de balance estructural.

 

Entonces, por donde lo veamos, creemos que es un Paquete Fiscal bastante endeble, difícil de que se cumpla porque parte de una meta de crecimiento que  a la luz de lo que hemos visto en los últimos dos años se antoja imposible, vulnera los fundamentos de la estabilidad macroeconómica al pedir un endeudamientos sostenido más allá del crecimiento de la economía, lo cual no es una condición de sustentabilidad, y va sobre un gasto corriente creciente que en teoría va a de acuerdo a la regla de balance estructural, pero parte de un PIB potencial sobreestimado.

 

Esas serían mis observaciones, nos vamos a reservar para el Pleno, para presentar algunas reservas presidente, muchas gracias.