No se debe de priorizar la recaudación por encima de la disponibilidad del servicio de telecomunicaciones: Dolores Padierna


Intervención de la senadora Dolores Padierna Luna, del Grupo Parlamentario del PRD, para iniciar la discusión de los artículos reservados de la Ley de Ingreso 2015 sobre Ingresos Tributarios y Petroleros.

 

Dolores Padierna Luna, (DPL): Gracias, Presiente. En la Ley de Ingresos vienen varios tipos de contribuciones, una es en el tema de telecomunicaciones; por lo que toca a los derechos por el uso de la banda de 700 mega Hertz, en 2015, se adicionaron  los correspondientes al Instituto Federal de Telecomunicaciones que hasta 2014 los cobraba la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, pero como no se desglosan en la Ley de Ingresos de la Federación, lo que corresponde al uso del espectro radioeléctrico no se puede hacer ninguna comparación.

 

Los derechos por el uso de la banda de 700 mega Hertz si se ven reflejados en el articulado de la Ley de Ingresos de la Federación 2015, pero se deja en suspenso su aplicación hasta el 1° de enero del 2016. Entonces para qué la meten ahorita, si no se va a aplicar.

 

No se proporciona información suficiente para aprobar este decreto. Para ello se requiere que entreguen y está por ley, el proyecto de red pública compartida. Por eso cuando esta minuta propone o este dictamen propone hacer el descuento de la carga regulatoria de cobertura, calidad y precio, no se hace con bases objetivas si el Senado las desconoce.

 

Primero debiera definirse cuál es la cobertura que va a alcanzar, qué calidad se le va a exigir tener a esta red pública compartida y cuál va a ser este precio. Sin estos elementos no hay un parámetro de comparación racional para definir si los derechos propuestos son adecuados o no.

 

Tampoco se cuenta con la información fidedigna respecto a la participación del Instituto Federal de Telecomunicaciones en la determinación de este derecho. No se debe de priorizar la recaudación por encima de la disponibilidad de este servicio de telecomunicaciones. Requerimos que toda la población lo tenga y tenga acceso también a los servicios que se desprenden de las telecomunicaciones.

 

Pero tampoco debe reducirse el pago de derechos a quien sí puede pagar el uso de banda de 700 mega Hertz o permitir que se pague por debajo de lo que pudiera generar distorsiones de mercados por una competencia injusta entre concesionarios de la red pública compartida que se asocien mediante asociaciones público-privadas con el gobierno federal.

 

Este tema, lo que estamos pidiendo, solicitando, es que no se incluya, que se elimine el artículo 22 porque no aplica para la Ley 2015. Aquí mismo se está diciendo que aplicará hasta el 1° de enero del 2016. Pues ya lo veremos dentro de un año.

 

En relación al régimen fiscal de PEMEX, aunque esta Ley de Ingresos de la Federación fuera perfecta y estuviéramos de acuerdo en todos los artículos, se debería de votar en contra aunque fuera sólo por el régimen fiscal de PEMEX.

 

En la Reforma Energética se modificó el régimen fiscal de PEMEX que en teoría era para liberarlo de recursos e incrementar su capacidad de inversión. En esta limitada discusión de la Reforma que nosotros hicimos una estimación sobre las implicaciones de estos cambios.

 

La modificación al régimen fiscal de PEMEX, lejos de liberarla lejos de recursos, la obliga a endeudarse para realizar las inversiones que requiere con el fin de mantener la capacidad de producción actual y desarrollar las asignaciones que se le otorguen estimadas en alrededor de 300 mil millones de pesos anuales.

 

Ahora en el nuevo régimen fiscal se incluyen cuatro nuevas cargas fiscales, la cuota contractual para la fase de exploración, el impuesto por la actividad de exploración y extracción de hidrocarburos, la obligación de que PEMEX sea sujeto al pago de Impuesto Sobre la Renta y a un dividendo estatal que establece la Ley de Petróleos Mexicanos que aplicará a partir del 2016.

 

El dividendo estatal no sólo nulificaría los supuestos ahorros que en realidad son ínfimos, sino que incrementará la carga fiscal de PEMEX.

 

En el artículo décimo cuarto transitorio se establece que el dividendo estatal sea de 30 por ciento, aplique a partir del 2016 y con datos de 2013, por poner un parámetro, implicaría 222 mil millones de pesos adicionales. Como resultado de aplicar este nuevo dividendo de 30 por ciento.

 

La diferencia prácticamente haría muy pesado el régimen fiscal de PEMEX.

 

En la Ley de Ingresos para 2015, se demuestra lo que nosotros dijimos, la carga fiscal en 2015 será prácticamente la misma que 2014, con una importantísima observación de que a partir del 2015 PEMEX queda con menos de la mitad de las reservas, apenas con el 49 por ciento de las reservas totales.

 

Y con el 21 por ciento de los recursos prospectivos, lo cual quiere decir que con mucho menos pagará lo mismo y eso implica un régimen muy pesado para PEMEX. Y si se implementa el dividendo estatal como está previsto en la Ley de Petróleos Mexicanos, pues todavía peor.

 

PEMEX entregará directamente al gobierno federal, además del Impuesto Sobre la Renta y el Impuesto Sobre Exploración y Extracción de Hidrocarburos, el dividendo cuando este se cobre.

 

A su vez las transferencias del Fondo Mexicano del Petróleo provendrán de los ingresos que este reciba de las asignaciones a PEMEX y de los contratos otorgados a particulares que sí van a comenzarse a recibir, pero a finales del 2015.

 

PEMEX entregará al Fondo Mexicano del Petróleo por las asignaciones que se le otorguen el derecho por la utilidad compartida, el derecho de extracción de hidrocarburos y el derecho de exploración de hidrocarburos.

 

También se integrarán al Fondo Mexicano del Petróleo los recursos que en su caso queden de los contratos otorgados a particulares después de pagar a éstos sus gastos, costos, inversiones y entregarle los hidrocarburos productos o parte de ellos y en el caso de licencias o producción compartida, los concesionarios o los licenciatarios se quedarán con toda la producción obtenida y pagarán al Estado una cuatro pequeñas contraprestaciones.

 

La carga fiscal hará imposible que PEMEX pueda desarrollar las asignaciones que se le otorguen y se le va a obligar a migrar a contratos. Es decir, a que PEMEX privatice el total de las actividades del sector.

 

Haciendo cuentas para el 2015, la carga fiscal de PEMEX se va a aumentar. Si lo comparamos con datos de los criterios generales de política económica y la Ley de Ingresos de la Federación, para 2015 la carga fiscal equivaldría a 78.8 por ciento del valor de la producción. Y para 2015 aumentaría al 81.4 por ciento con esos datos.

 

Pero tomemos los datos más recientes que son los de julio de 2014, con un precio de petróleo de 94 y no el del 86, con una plataforma de 2.3; y no de 2.5, con datos de julio de 2014 la carga fiscal será de 76.1 por ciento menor al 81.4 por ciento que será en el 2015.

 

En 2015 todavía no se aplica el dividendo, súmenle a este 81.4 por ciento el 30 por ciento. Eso es lo que le están cargando a PEMEX.

 

Por eso nosotros yo estoy radicalmente convencida de que esta ley es completamente adversa a los intereses del país y de la población.

 

Para 2015, además, se sobre endeuda a las empresas energéticas. Se está solicitando para PEMEX 110 mil 500 millones de pesos de deuda interna y 6 mil 500 millones de dólares de deuda externa. PEMEX tendría una deuda superior a 1 billón de pesos y sería creciente en el tiempo.

 

En el caso de la CFE se trata de 8 mil millones de pesos de deuda interna y 700 mil millones de dólares de la externa, la CFE tendrá una deuda de medio billón de pesos y es creciente en el tiempo porque son crecientes los contratos.

 

Quisiera también hacer algunos comentarios a este respecto muy importantes.

 

En primer lugar que PEMEX está siendo, no están agregando a los ingresos propios de PEMEX una cantidad que ordena la ley y que es sumamente importante, que son las áreas de licitación de la Ronda Una que abarcan la superficie de 28 mil kilómetros cuadrados que sumados a los 89 mil 907 kilómetros asignados a PEMEX, da un total de 118 mil 407 kilómetros, es decir, el 30 por ciento del total de la superficie que hay con posibilidades donde ese extraigan hidrocarburos.

 

El documento de la SENER de Ronda Uno, menciona que se combinan varias áreas ya productoras, cuando la Constitución y las Leyes Energéticas dicen que todo lo que esté producido por Pemex le toca a Pemex no a los privados.

 

Pero aquí la SENER está dándole áreas productoras actualmente, por Pemex, y la están pasando a los privados, con áreas, se combinan con áreas nuevas, poco exploradas, así como con recursos no convencionales, esto significa que se están entregando a particulares, áreas donde aseguran sus ganancias o utilidades en forma inmediata y sin riesgo porque Pemex ya hizo toda la inversión  exploratoria y se tiene perfecta capacidad, de seguridad de que ahí hay hidrocarburos.

 

Pero además Pemex tiene la capacidad para desarrollarlas, porque las está desarrollando ahorita, pero esto tiene el inconveniente de que la SENER no dijo en Ronda Uno lo que sí dice la Ley, es que estas áreas productivas y todas las áreas exploradas por Pemex, Pemex llevó un costo de inversión de 17 dólares por barril, y los privados, de acuerdo a los datos que da la SENER, están poniendo una inversión de cuatro dólares por barril, siendo que la inversión de Pemex, en esas áreas que le están entregando a los privados, es de 17 dólares, si el gobierno no cobra estas inversiones ya realizadas por Pemex, significaría un regalo para las empresas de hasta 13 dólares por barril, o sea, 50 mil millones de dólares, y de ninguna manera debe permitirse que se le regalen estos recursos públicos a las petroleras privadas, además de que la Reforma Energética establece que si un área que ya exploro Pemex se le da a los privados, los privado le tienen que rembolsar a Pemex toda su inversión.

 

Si estos 50 mil millones de dólares se les pusieran como ingresos propios a Pemex, no habría necesidad de endeudarlas, etc.  Yo quisiera decir muchas cosas al respecto, pero termino esta parte de Pemex, diciendo que en las tres últimas décadas la política económica y  la política energética han tomado rumbos equivocados que han tenido como consecuencias muy graves.

 

Una.  La descapitalización de las empresas del sector Pemex y CFE, la creciente dependencia del exterior de los productos derivados del petróleo y el gas; la creciente dependencia del exterior de bienes, servicios  y tecnología para el sector; la creciente dependencia de las finanzas públicas de los ingresos petroleros, los altos precios de la energía, la desarticulación de las cadenas productivas, en especial de la petroquímica y el nulo crecimiento de energías renovables.

 

La descapitalización del sector ha tenido como causas principales la inversión insuficiente en nuestras empresas, el régimen fiscal confiscatorio, la política de precios de transferencia errónea, la administración deficiente, aunada a la corrupción.

 

Y siendo el gasto público, teniendo o siguiendo que ahí van inversiones petroleras, que generan una fuente de pago, no habría necesidad de incurrir en déficit público, Pemex y CFE  generan ganancias enormes y no tiene lógica continuar con la misma política errónea de endeudar a las empresas públicas, si ellas  generan lo suficientes para sus inversiones.

 

Paso a otro tema. Minas. La multa ridícula impuesta a la minería en México por uno de los mayores desastres ambientales en la historia, que viene en la Ley de Ingresos 2015 es un espejo perfecto, los barones, con b grande, los barones del oro, la plata y el cobre, no hay que molestarlos con nada ni para nada.

 

En la iniciativa apenas si se mencionan los ingresos derivados de las exploraciones, explotaciones mineras, y amenazaron con irse porque se les iba a aplicar nuevos impuestos, aunque luego negociaron y ya se les redujeron una parte; aunque los que aplican en el presente año, apenas promedian un tres por ciento de sus ventas.

 

¿Por qué no se van, por ejemplo a Estados Unidos?, porque allá pagarían diez por ciento de regalías, además de todos los impuestos regulares de cualquier otra empresa extractiva, simple y sencillamente están en México porque México es un paraíso fiscal para la minería, como lo será para las petroleras, dicho por el propio Secretario de Hacienda.

 

Aquí son beneficiarias de la opacidad y reciben un tratamiento fiscal de privilegio, no solo pagan poco, sino que reciben estímulos que no se otorgan a otros sectores. Es fundamental que la Secretaría de Hacienda informe con detalle los resultados de la Reforma Hacendaria en lo que corresponde al sector minero.

 

También que se busquen nuevas fórmulas para que los recursos mineros sean una auténtica riqueza nacional que contribuya a reducir la desigualdad, a impulsar el desarrollo y a aumentar los ingresos públicos de la federación.

 

Cabe señalar que las menciones a los ingresos mineros en la Ley 2015, son nulas o de muy poca relevancia y opacas, están metidas dentro de la Secretaría de Economía, revueltas en una bola de cosas, no están desglosadas y, por lo tanto, hay que irse a buscar la información y nosotros la buscamos en, por ejemplo con Mackensi.

 

Estas omisiones no son fortuitas, por el contrario siguen reflejando  la opacidad y el trato fiscal privilegiado que tienen las mineras en el país.

 

Entre las ausencias más destacadas de la Ley de Ingresos es que no se especifica sobre lo que se espera recaudar sobre derechos relacionados por la actividad minera, ni con los impuestos que empezaron a aplicar este año, no hay nada de información al respecto, este es un dato que debería de transparentarse o especificarse en el Ley, o es que no les están cobrando nada, o se lo queda la Secretaría de Hacienda, no informa nada, o en qué se utiliza si es que lo cobran.

 

Es una desvergüenza que el Congreso apruebe cosas como las que están aprobando para el sector minero. Hay otros dos impuestos, estamos hablando de un tema muy largo en la ley, toda la carátula del artículo  uno.

 

Bueno, el tema de consolidación fiscal, viene en el artículo 25, uno de los mayores retos que ha tenido el gobierno mexicano en materia tributaria, es el combate a las prácticas que buscan eludir las obligaciones fiscales a través de prácticas de planeación fiscal, o aprovechamiento de vacíos legales.

 

Uno de los más grandes problemas ha sido el relativo a la consolidación fiscal, que en la Reforma Hacendaria de 2013 cambió su nombre por el régimen opcional para grupos de sociedades, pero conservando su esencia en la estructura de la consolidación fiscal, con el fin de hacer más eficiente el combate a las prácticas y en beneficio de las personas más necesitadas, nosotros estamos planteando eliminar el régimen opcional de sociedades para que los “Holdings”, y las transnacionales paguen la tasa del Impuesto sobre la Renta, que pagan el resto de las empresas, y se acabe con los favoritismos tributarios, los amiguismos del poder y los pagos de facturas anticipadas que es lo que representa este régimen privilegiado para las megaempresas, si estás pagan entonces se puede bajar la tasa del impuesto a las medianas empresas, que junto con las pequeñas y los asalariados, son las que sostienen este país.

 

Nosotros proponemos eliminar este impuesto tal como lo prometió Enrique Peña Nieto y el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray.

 

También me quiero referir al artículo quinto transitorio en relación a los REPECOS,  que tiene como propósito que el Congreso de la Unión cuente con mayor información sobre el destino de los recursos públicos destinados  a lo que ustedes aprobaron  crear un fondo de compensación del régimen de pequeños contribuyentes y del régimen de intermedios, pero sobre todo eliminar este régimen para regresar al régimen de pequeños contribuyentes y obligar al Gobierno Federal a buscar nuevos mecanismos para buscar la formalización del sector y obtener información que son las razones que dio para eliminar a los repecos.

 

El plazo que no aplique para este régimen de incorporación debe de aumentarse hasta que no haya condiciones económicas para los pequeños contribuyentes.

 

Es cuanto.