Intervención de la senadora Angélica de la Peña Gómez, del Grupo Parlamentario del PRD, durante la inauguración del foro “Desapariciones en México: Una mirada desde los derechos de la infancia”.
Angélica de la Peña Gómez, (APG): Para el Senado de la República es muy importante que en este espacio que hoy estamos presentando las diversas personalidades que me acompañan en este presídium, destacar con mucha puntualidad la importancia de que la Ley Genera, la ley única que próximamente dictaminaremos en materia de desaparición forzada y desaparición entre particulares tenga un enfoque desde la perspectiva de infancia.
Cuando hablamos de la perspectiva de derechos humanos, estamos hablando de todos los derechos de todas las personas sin discriminación por ninguna condición, ni por edad, ni por sexo, ni por condición económica, social o la condición cultural, se ve la situación en cualquier parte de la República, incluso cualquiera que sea la circunstancia migratoria de las personas que puedan estar sufriendo ese tipo de flagelos que afectan de manera grave a los derechos humanos de las personas.
Por eso el día de hoy, es muy importante que este foro que hoy instalamos veamos este flagelo desde la perspectiva de la infancia, por eso agradezco mucho que como siempre Juan Martín García que dirige REDIM, la Red por los Derechos de la Infancia en México, hoy nos acompañe y corresponsablemente estemos organizando este foro para que podamos dejar muy claro la preocupación de las organizaciones no gubernamentales de la sociedad civil organizada respecto a la exigencia de visibilizar los problemas, los flagelos que sobreviven, a veces en las peores condiciones, niñas y niños en nuestro país.
También me parece muy importante que participe en este foro, y sobre todo en esta etapa de instalación, quien dirige desde la primer Visitaduría de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos los trabajos que tienen que ver con la atención, desde este organismo constitucional autónomo, la visión, el enfoque desde la nación de cómo también ellos están trabajando para atender y para prevenir y sobre todo para dar todo lo que se necesita en la protección de los derechos humanos, por eso agradezco mucho la presencia del Licenciado Ismael Eslava, primer visitador de la Comisión, muchas gracias.
Y por supuesto, en representación de Nelly Montealegre, que dirige ahora la Procuraduría Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, primera figura que constituimos en la Ley General de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, que tiene otras funciones de autoridad que poco a poco vamos a ir viendo las bondades de esta definición pero que hoy no nos pudo acompañar, hemos trabajado muy cerca de Nelly y me congratula mucho a quien dirige la Coordinación Interinstitucional y Política, justamente desde esta Procuraduría, el Maestro Carlos Manso, bienvenido Carlos.
Bueno, qué decir de Unicef, no hay ningún aspecto que tenga que ver con los derechos de la niñez que no tengamos también un trabajo de coadyuvancia y de coordinación como lo es el papel que tiene conferido en el convenio que el Estado mexicano suscribió con Naciones Unidos, y particularmente con el Fondo de Naciones Unidas para Ayuda a la Infancia que conocemos por sus siglas en inglés como Unicef, que hoy también nos acompañe con quien trabajamos mucho Allison Sutton, muchas gracias por acompañarnos, viene en representación de la señora representante en México de Unicef que hoy en estos momentos está trabajando con otras organizaciones en la frontera sur de nuestro país, está en Tapachula.
Por cierto, lo destacó que desde ahí empieza la problemática, empiezan a padecer la problemática que hoy nos va a ocupar con la desaparición de niñas y niños pero también la situación que sobreviven como víctimas directas o como víctimas indirectas cuando algún familiar es desaparecido. Entonces gracias, Allison por estar aquí.
Y no menos importante es, yo diría que prácticamente también la relación cotidiana con la oficina del alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos que hoy está representada por Jesús Peña Palacios, a quien le agradezco también que nos acompañe, pues no podríamos estar tratando este tema sin que esté aquí la presencia de la oficina del alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos.
Porque justamente como yo decía al principio, precisamente se trata este tema de violaciones graves a los derechos humanos de la niñez, de la adolescencia y necesitamos seguir trabajando atendiendo las recomendaciones que México, desde los distintos comités de Naciones Unidas encargados de la verificación del cumplimiento como Estado parte de las distintas, de las diversas convenciones y tratados que hemos firmado, pues obviamente que es importante atender las que tienen que ver con la materia que hoy estamos discutiendo.
Juan Martín y yo tenemos mucho tiempo trabajando juntos, me congratula mucho tener estas coincidencias y sobre todo, esta especie de presión que siempre como debe de ser desde las organizaciones de la sociedad civil, pero Juan Martín y sus organizaciones que están en REDIM, siempre atentas a exigir que desde el trabajo que realizamos lo hagamos debidamente precisamente para cumplir entre tratados, destacó por su relevancia la Convención sobre Derechos de la Niñez, todos los compromisos que México tiene para el 37 por ciento de la población de nuestro país que es menor de 18 años de edad, pero que por desgracia todavía se sigue visibilizando como un grupo vulnerable, y no como sujetas y sujetos de derechos.
Y lo quiero remarcar porque parte de la situación que hoy vamos a discutir en las tres mesas de trabajo, tienen que ver precisamente en la insistencia de que visibilicemos la existencia de niñas y niños como sujetos de derechos.
Hay una gran diferencia cualitativa respecto a verlos como hijos, hijas, los menores que eso si ya sería el extremo de la definición peyorativa y discriminatoria hacia niñas y niños, pero no juntando estos dos mundos, nuestros hijos, las niñas y niños que tienen derechos con el otro submundo de menores en donde se sufren distintas discriminaciones que conllevan precisamente a la violación de sus derechos humanos y que necesitamos seguir trabajando para que sean atendidos.
Si nosotros no tomamos consideración, y hay que insistir, lo hemos insistido mucho, en atender de manera prioritaria a niñas y niños de cada etapa de su desarrollo cognoscitivo entonces estamos frustrando el proyecto de vida de esa persona, de esa niña, de ese niño, y no hay manera de entender que esto se pueda lograr si no se concibe sustantivamente y ese cambio en el que debemos seguir trabajando de que ciertamente, estas personas, ser menores de edad no puede ser de ninguna manera una justificación para no reconocerles como sujetas y sujetos de derechos.
Esto quiere decir, ni más ni menos, que efectivamente, la responsabilidad fundamental primaria es de sus familias, sus padres, sus madres, la familia cercana es la primera responsable pero cuando hay fallas ahí, la responsabilidad es del Estado, así dice el cuarto constitucional, y en esa parte tenemos muchas fallas, muchas fallas, porque el Estado se desobliga porque es un asunto de padres y madres cuando la responsabilidad debiese ser del Estado, proveer todo lo necesario para que padres y madres, familiares, tutores, custodios puedan atender debidamente y garantizar cada uno de los derechos de las niñas y de los niños en nuestro país.
Dice alguien que son el futuro del país, pues no, son el presente del país, son el presente de nuestra nación y por desgracia observamos que cada vez crecen más en evaluación que se hace por Coneval, por Inegi, por todas las instituciones encargadas de revisar, las universitarias, etc., por desgracia se ha quedado ya acuñada desde que el rector de la UNAM, el rector José Narro en su momento, en México hay millones de ninis, pues hoy observamos que esas cifras de ninis, que ni trabajan, ni estudian, están creciendo de manera dramática, trágica, pero también tenemos que señalar la irresponsabilidad de quienes no hemos hecho lo suficiente para contrarrestar, para prevenir, para cambiar esas cifras.
Hoy vamos a hablar de uno de los flagelos terribles que alguien diría no tiene nada que ver el tema con derechos de la niñez, la desaparición forzada de la que son víctimas niñas y niños, porque acompañan eventualmente a algún adulto que de repente lo desaparecen con sus hijas e hijos, estaban ahí circunstancialmente y son víctimas de la desaparición forzada que es perpetrada por agentes del Estado o por aquiescencia del Estado.
Y por supuesto también, la otra desaparición que estamos también planteando de manera puntual como un tipo de delito, la ley que estamos trabajando a partir del mandato constitucional de la desaparición entre particulares, quién pensaría que ese tipo de situaciones las estemos padeciendo en nuestro país como si estuviéramos en un país de guerra, bajo una dictadura, la desaparición forzada concebida en la época del nazismo, y después en las dictaduras centroamericanas, sudamericanas, y algo que vemos muy lejos en México por desgracia es una realidad que no podemos acostumbrarnos a ella.
Y desgraciadamente, afecta a las niñas y a los niños, hoy vamos a hablar de eso.
De tal manera, que me congratula darles la bienvenida y sin más ni más, gracias Juan Martín, estaremos atentos después de las conclusiones de la tercera mesa nos digan cómo tenemos que rescatar cada una de sus propuestas y vindicarlas en el proceso de dictamen de las leyes que próximamente estamos ya concretando su dictamen para cumplir con esta exigencia que nos han señalado de manera reiterada, contundente las organizaciones de familiares, de personas desaparecidas y ciertamente ya lo hacemos muy tarde.
Hemos recibido familiares que tienen 10 años, nueve años, ocho años, siete años, es increíble, seis años, cinco años, buscando a sus seres queridos, tocando puertas durante todos estos años y nadie les había hecho caso, hoy tuvimos que reformar la Constitución para hacer una sola ley nacional y estamos trabajando en la ley secundaria, por lo tanto es muy pertinente lo que van discutir.
Muchas gracias.
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