Garantizar plenamente los derechos de la niñez es un tema que va mucho más allá de la aprobación de esta reforma


Lorena Cuéllar

Intervención en tribuna de la senadora Lorena Cuéllar Cisneros, para dar posicionamiento a nombre del Grupo Parlamentario del PRD de la  expide la Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes.

 

Lorena Cuellar Cisneros (LCC). Compañeras y compañeros senadores:

 

Quiero dar inicio celebrando el esfuerzo que estamos llevando a cabo por nuestras niñas, niños y adolescentes del país.

 

El dictamen que hoy se pone a su consideración, es un primer paso para saldar la deuda histórica que tenemos con nuestros 40 millones de infantes y adolescentes.

 

Como ustedes saben, de acuerdo con el CONEVAL, en 2012,  8.8 millones de niños y niñas eran considerados vulnerables por carencias sociales y 2.9 millones estaban adentro de la categoría de vulnerables por ingreso.

 

La población infantil y adolescente está fragmentada por la pobreza, vulnerabilidad, y riesgos asociados a la violencia, entre otras cosas.

 

Recordamos, que el 78.5 por ciento de la población indígena de 0 a 17 años se encuentra en situación de pobreza y 33.4 por ciento en situación de pobreza extrema.

 

Con todo y que aún nos hace falta llevar a cabo muchas acciones a favor de los derechos de nuestra niños y adolescentes, es necesario reconocer el esfuerzo legislativo que hoy se materializa en este dictamen.

 

El que los y las niños tengan que ser sujetos de derechos, no es opcional.

 

Este dictamen tiene muchos aciertos y contribuciones importantes con respecto al marco jurídico actual.

 

De ello, me parece pertinente destacar la creación de las figuras de representación originaria, representación coadyuvante y representación en suplencia, mismas que permitirá a las Procuradurías trabajar en los conflictos legales que involucren a la niñez en todo el país.

 

Asimismo, se establece el marco legal en materia de protección en temas como bullying, maltrato familiar, niños y niñas migrantes y exposición en medios de comunicación.

 

También celebro que se hayan tomado en cuenta las opiniones de distintos expertos para fortalecer esta propuesta con respecto al establecimiento de un Sistema Integral que garantice los derechos de niños, niñas y adolescentes.

 

Asimismo, es destacable el fortalecimiento del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y la creación de Procuradurías en los estados para garantizar los derechos de los infantes.

 

Este dictamen incluye sanciones a funcionarios que no velen por los derechos que se establecen y a medios de comunicación que utilicen, sin autorización, la imagen e identidad de niñas, niños y adolescentes.

 

Pese a estos avances, consideramos que  faltan muchos temas por revisar.

 

Uno de los cuales es asegurar que se deje atrás la visión asistencialista que ve a niñas, niños y adolescentes como sujetos de protección y entender que son titulares de derechos.

 

Sería lamentable que lo que hoy logramos con esta ley sea un engrosamiento de la burocracia sin la transformación de prácticas de Gobierno.

 

Por ello, es prioritario considerar el tema presupuestal para asegurar que los recursos sean suficientes para garantizar de forma efectiva los derechos establecidos en este nuevo ordenamiento.

 

Finalmente, me parece que el Sistema de protección especial que se crea a partir de esta ley, tiene la importante tarea de asegurar que los derechos que no se cumplan, sean exigibles y restituibles.

 

Como legisladores debemos tomar muy en cuenta que garantizar plenamente los derechos de la niñez es un tema que va mucho más allá de la aprobación de esta reforma, ya que significa invertir en el futuro económico y social del país, y significa trabajar en la construcción de una sociedad más democrática, más inclusiva,  justa y en paz.

 

Por último me gustaría mencionar que me alegró mucho la voluntad de mis compañeras y compañeros senadores de la Comisión para incluir dentro de la discusión, mi propuesta de incorporar a las enfermedades crónicas como prioritarias dentro del derecho a la salud de los infantes y adolescentes.

 

Como un breve dato, quiero mencionarles que la enfermedad renal crónica es la causa número 8 de muerte entre niñas y niños de 5 a 14 años de edad.

 

Es cuanto señor presidente.