Conferencia de prensa del Senador Armando Ríos Piter sobre excitativa a iniciativa para defender los intereses del Estado mexicano en contra de acciones de gobiernos extranjeros, y sobre Punto de Acuerdo para exhortar al Ejecutivo Federal a que convoque a las fuerzas políticas, a construir un plan contingente integral, frente a la nueva administración en Estados Unidos.
· Es una excitativa para que en lo inmediato, las comisiones que por parte de la Mesa Directiva, tienen la iniciativa que presentamos hace poco más de dos meses, sea analizada, revisada y votada, dictaminada, cuanto antes.
· La iniciativa que tiene que ver con las medidas que tiene que tomar nuestro país, frente a las decisiones que hoy, ya no son una propuesta de campaña por parte del candidato republicano, sino que hoy significan ya un planteamiento de política pública por parte de Donald Trump.
· México tiene que poner sobre la mesa, con toda claridad y nitidez, que está dispuesto a someter a revisión interna, todos y cada uno de los tratados y acuerdos intersecretariales que tenemos con ellos.
· A partir de los 22 años que lleva el Tratado de Libre Comercio, México ha colaborado y ha coadyuvado en una visión de alianza estratégica, en una visión de sociedad comercial, en la construcción de algo que va más allá de la parte comercial y económica.
· El Congreso de la Unión, tendrá que dictaminar con toda claridad, que ni un solo peso del erario, será utilizado para financiar ninguna obra pública que vaya en contra de los intereses de México, háblese en concreto el muro.
· Un Punto de Acuerdo, en el cual exigimos que el Poder Ejecutivo, tenga un planteamiento muy claro de convocatoria a todas las fuerzas políticas, económicas y sociales en el país, para que tengamos una discusión nacional de qué es lo que vamos a poner nosotros en esa revisión de la relación bilateral.
· Que el presidente se deje de estar empujando el Tratado Transpacífico que está muerto.
· Que el Senado de la República reoriente todo el esfuerzo organizativo que hemos planteado para revisar el TPP, a revisar las condiciones de la relación bilateral.
· Vamos a buscar a Andrew Cuomo, a Bill De Blasio, tanto gobernador como alcalde Nueva York, y a todos y cada uno de los políticos que en Estados Unidos hoy, se han venido manifestando en contra del discurso que se instaló en el proceso electoral.
· Vamos a buscar a todas y cada una de las empresas norteamericanas que están de este lado de la frontera, para tejer una gran alianza.
· Si Enrique Peña Nieto y su gobierno no tiene la convocatoria, este Senado de la República, como cuerpo plural y colegiado está obligado por llevar las relaciones exteriores, a tener mucha claridad en cómo va a dar respuesta.
Armando Ríos Piter (ARP): Muy buenos días, buenas tardes ya.
La convocatoria –y les agradezco mucho la atención- es a comentar sobre dos documentos que estamos presentando hoy al pleno del Senado.
Uno es una excitativa para que en lo inmediato, las comisiones de Relaciones Exteriores, y todas las que por parte de la Mesa Directiva, tienen la iniciativa que presentamos hace poco más de dos meses, sea analizada, revisada y votada, dictaminada, cuanto antes.
Me refiero a la iniciativa que tiene que ver con las medidas que tiene que tomar nuestro país, frente a las decisiones que hoy, ya no son una propuesta de campaña por parte del candidato republicano, sino que hoy significan ya un planteamiento de política pública por parte de Donald Trump.
Tan sólo revisando las declaraciones de los últimos días, aquello que se veía, o que veíamos nosotros como amenazas claras y directas a nuestro país, ya son planteamientos y propuestas para los primeros 100 o 200 días de la administración norteamericana, que habrá de tomar posesión el 20 de enero.
De tal manera que, lo que nosotros pedimos es que la iniciativa que tiene que ver con que, si los Estados Unidos deciden de manera unilateral terminar con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, México se reserve la capacidad de poner a discusión y a revisión interna, todos y cada uno de los tratados y acuerdos intersecretariales que tenemos con ese país, en términos del Derecho Internacional y la visión de reciprocidad, si es que los Estados Unidos, y la nueva administración, deciden terminar de manera unilateral -como tan solo lo comentaron el día de ayer- en los primeros 200 días de la administración de Donald Trump, México tiene que poner sobre la mesa, con toda claridad y nitidez, que está dispuesto a someter a revisión interna, todos y cada uno de los tratados y acuerdos intersecretariales que tenemos con ellos, especialmente aquellos que tienen que ver con condiciones de seguridad entre ambos países.
Hay que decirlo, con toda puntualidad, a partir de los 22 años que lleva el Tratado de Libre Comercio, México ha colaborado y ha coadyuvado en una visión de alianza estratégica, en una visión de sociedad comercial en la construcción de algo que va más allá de la parte comercial y económica.
Hemos colaborado en términos de inteligencia, de compartir información, de seguridad fronteriza que hoy el presidente electo de los Estados Unidos, no considera, o no ha traído con la claridad a la mesa.
México tiene que poner sobre la mesa este planteamiento con toda puntualidad y con toda claridad.
La iniciativa también señala que el gobierno, y especialmente el Congreso de la Unión, tendrán que dictaminar con toda claridad, que ni un solo peso, ni un solo centavo mexicano del erario, será utilizado para financiar ninguna obra pública que vaya en contra de los intereses de México, háblese en concreto el muro que ha venido planteando desde hace un año y meses, el candidato hoy electo como presidente de los Estados Unidos.
Y un tercer planteamiento de esta excitativa es, poner a revisión todos los instrumentos de política pública, que tenemos a nuestro alcance, si es que fuera la decisión del gobierno electo, atentar contra los recursos, las remesas que envían nuestros connacionales del otro lado de la frontera, a las comunidades mexicanas.
Esa es la excitativa que estamos planteando el día de hoy, en la exigencia puntual de que las comisiones que tienen esa iniciativa, la revisemos, la discutamos, y obviamente la votemos.
Esto es, digamos en un contexto en el cual el gobierno federal, ha sido extraordinariamente tímido en su respuesta a las agresiones que se tuvieron durante la campaña, pero que hoy ya son planteamientos de política pública para los primeros 100 días de gobierno de Donald Trump.
Frente a esta respuesta tímida, nosotros lo que exigimos es, que frente a cada ofensa que se ha hecho al pueblo de México, tengamos una respuesta clara, puntual, firme y con dignidad como país.
En este momento de incertidumbre en el que están por redefinirse muchas de las variables estructurales sobre las cuales se basa y se sustenta nuestra relación con nuestro vecino, hasta hoy un aliado –y que esperamos que siga siendo un aliado- tenemos que dejar claro que es lo México trae a la mesa en esa relación.
Por esa razón también estamos presentando un Punto de Acuerdo, en el cual exigimos que el Poder Ejecutivo, tenga un planteamiento muy claro de convocatoria a todas las fuerzas políticas, económicas y sociales en el país, para que frente a este entorno de incertidumbre, y frente a estos planteamientos, tengamos una discusión nacional de qué es lo que vamos a poner nosotros en esa revisión de la relación bilateral.
Que el presidente se deje de estar empujando el Tratado Transpacífico que está muerto; es un tratado que está muerto y que no tiene ninguna razón de seguirse revisando, y que el Senado de la República –así lo planteamos en el Punto de Acuerdo- reoriente todo el esfuerzo organizativo que hemos planteado para revisar el TPP, a revisar las condiciones de la relación bilateral.
Que nos dejemos de esas inercias absurdas que hoy tratan de mantener algunos actores; he escuchado al secretario de Economía, querer seguir empujando algo que está muerto, que no va a tener ningún futuro, pensemos en nuestras prioridades, y nuestra prioridad hoy está que toda la capacidad política, económica y social, se ponga a revisar y a analizar, de qué manera vamos a entrar a un nuevo contexto en la relación bilateral -que por lo pronto yo quiero subrayar- puede ofrecer una gran oportunidad, sí y sólo sí, no la vemos de manera inercial; sí y sólo sí, la pensamos con toda claridad, y no jugamos al avestruz, como el gobierno de Peña Nieto lo ha venido haciendo, a partir de hace un año y meses.
De tal manera, que la última convocatoria y el señalamiento del Punto de Acuerdo es que toda la red consular, hoy que escuchamos hace dos días que dos o tres millones de mexicanos puedan ser deportados hacia nuestro país, se ponga y se active con todas las capacidades que tenemos a nuestro alcance, para brindar no solamente asesoría jurídica y asistencia a nuestros connacionales, sino que el rediseño de un presupuesto que acaba de ser aprobado, y que se hizo en un contexto totalmente distinto a este cambio que acaba de ocurrir en los Estados Unidos, pueda tener dinero suficiente para la atención de nuestra batería diplomática, pero también dinero suficiente para tener nuevos puntos de contacto con organizaciones de derechos humanos, de este lado de la frontera y de aquel lado, para poder tener una gran red de soporte con aquellos que puedan ser afectados por las decisiones.
Cerraría con el último comentario. México no puede mantenerse en una condición inercial; tenemos que salir a buscar a todos y cada uno de los aliados que vean que está en riesgo un contexto de crecimiento y de posibilidades de desarrollo como el que hemos tenido.
Vamos a buscar –lo digo por parte de mi oficina- a Andrew Cuomo, a Bill De Blasio, ambos, tanto gobernador como alcalde Nueva York, y a todos y cada uno de los políticos que en Estados Unidos hoy, se han venido manifestando en contra del discurso que se instaló en el proceso electoral y que va en contra de muchos de nuestros connacionales.
Vamos a buscar a todas y cada una de las empresas norteamericanas que están de este lado de la frontera, para tejer una gran alianza.
El llamado es muy claro y muy puntual, si Enrique Peña Nieto y su gobierno no tiene la convocatoria, este Senado de la República, como cuerpo plural y colegiado está obligado por llevar las relaciones exteriores, a tener mucha claridad en cómo va a dar respuesta.
Esperamos que sea una respuesta que permita una construcción proactiva con Estados Unidos, pero salirnos de una visión inercial, que por timidez o incapacidad, hemos visto hasta estos días por parte del gobierno de la República.
Pregunta. ¿Quién espera que apoye todos estos puntos, dentro y fuera del Senado? ¿Ha hablado usted con otras fuerzas políticas, y con qué organizaciones aquí en México, podría usted buscar apoyo en lo inmediato?
ARP. Bueno, yo espero que todas las fuerzas políticas que están aquí, que se han manifestado en contra del discurso de odio, en contra del discurso xenofóbico, actúen en consecuencia.
Que todas las fuerzas; precisamente por eso el Senado, como el espacio de representación plural, veamos con seriedad lo que significa la incertidumbre de un discurso que se ha instalado no solamente en contra de muchas de las variables fundamentales sobre las cuales está sostenida nuestra relación, sino muchas de las variables en las cuales ha descansado el mundo que hasta hoy hemos conocido.
Entonces, que todas las fuerzas políticas se entreguen de manera inmediata a construir eso.
Por eso estoy planteando, que todo el andamiaje que construimos para revisar el TPP, hoy se ponga a revisar la relación México – Estados Unidos, con la finalidad de tener una visión muy clara, y sobre todo propositiva y proactiva, pero sí lo quiero decir con toda claridad, frente a cada discurso amenazante, México tiene que tener una respuesta clara y contundente, para que se nos vea con la dignidad que representamos, con claridad para señalar con toda firmeza qué es lo que representa México en esa relación.
México es el país más importante para los Estados Unidos y este el momento de dejarlo claro y en evidencia; la convocatoria obviamente es al Senado de la República, a las fuerzas políticas que están aquí, pero en la oficina que yo represento –donde además de todo representamos a un millón y medio de connacionales guerrerenses, que viven muchos de ellos en Chicago, o que viven en Los Ángeles o que viven en Dallas, Texas, tener la posibilidad de armar relaciones con los clubes de migrantes que están de aquel lado de la frontera, con los políticos –repito- americanos que están en contra de ese discurso que está instalado, y con las distintas, son miles de empresas norteamericana, que hoy también ven en riesgo y en una condición de incertidumbre, lo que hemos construido en 22 años.
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