México atraviesa por una de las peores crisis humanitarias, de credibilidad de las instituciones y económicas, derivada de un largo ciclo neoliberal iniciado hace 30 años, sostuvieron senadores del Grupo Parlamentario del PRD.
En el marco de la “Tercera reunión de legisladores del Partido de la Revolución Democrática con dirigentes políticos y representantes internacionales de izquierda”, la senadora Dolores Padierna apuntó que México vive muchas de las situaciones que Latinoamérica padeció cuando la dictadura del FMI se expandió sobre las democracias del continente.
“Un Estado mínimo que se ha vuelto un Estado de máxima corrupción, una economía de mercado que se ha transformado en una economía de compadres, un modelo reformador que no ha beneficiado a la población, una economía endeudada y nuestra mayor y más importante empresa, Pemex, desmantelada en menos de dos años”, advirtió.
La vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del PRD afirmó que nuestro país ha vivido en los últimos 15 años una doble alternancia y una farsa de transición pues los gobiernos del PAN no se plantearon la idea de refundar el sistema político y sólo agudizaron la crisis.
Mientras que “el retorno del PRI a la Presidencia de la República ha combinado lo peor del antiguo autoritarismo con las deficiencias de un modelo económico que se ha agotado”.
Dolores Padierna condenó que al miedo y a la incapacidad para enfrentar la delincuencia organizada se ha sumado el uso arbitrario y criminal de la fuerza del Estado para imponer la paz de las narcofosas.
Ante estas situaciones, lamentó, el gobierno de Enrique Peña Nieto no asume su responsabilidad, sino que emprende una campaña mediática y diplomático ante organismos internacionales incluyendo un intento de manchar la reputación del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la CIDH.
“El gobierno mexicano prefiere matar al mensajero antes de modifica el mensaje, criminaliza a las víctimas, persigue a los críticos, censura los espacio informativos, margina a los opositores que no puede cooptar”, acusó.
Padierna Luna consideró que vienen tiempos difíciles para las izquierdas en México, que lejos de estar unidas, “están pulverizadas bajo una eficaz estrategia para debilitarnos, dividirnos y cooptarnos”.
Sin embargo, aseguró, las izquierdas en México están empeñadas y comprometidas en dar lo mejor los próximos eventos electorales.
El senador Luis Humberto Fernández Fuentes coincidió en que México está viviendo una restauración del autoritarismo en donde se pasó de la represión a la institucionalización.
“Se pasó de la violencia a la frivolización y descalificación de la izquierda a través de medios institucionales, se nos está atacando con las mimas armas que nosotros ayudamos a construir”, dijo.
Este uso de las instituciones de manera facciosa, apuntó, ha generado el desgaste de las mismas ante la ciudadanía.
Fernández Fuentes consideró que han existido las mejores condiciones para el crecimiento de las izquierdas, pero éstas han sido desaprovechadas por la división.
En ese sentido, hizo un llamado para reflexionar sobre cuáles son los elementos que identifican a la izquierda y los factores que la mantiene unida.
Por su parte, el senador Alejandro Encinas Rodríguez resaltó que la derecha actúa globalmente mientras que la izquierda lo hace de manera local y dividida.
“Es el momento de que dejemos atrás aquella vieja concepción de la solidaridad internacional para dar pasos a acciones conjuntas”, expresó.
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