Analiza IBD experiencias de candidaturas independientes en América Latina


  • Partidos deben impulsar liderazgos sociales: Patricia de Ceballos
  • Candidaturas independientes no garantizan cambios por sí mismas: Marco Enríquez-Ominami
  • Independientes son señales de que algo en el sistema está mal: Ariel Rodríguez

 

En el marco del seminario “Nuevas formas de participación política”, el senador Miguel Barbosa Huerta y especialistas y políticos internacionales analizaron el impacto de las candidaturas independientes en América Latina.

 

El presidente del Instituto Belisario Domínguez consideró que en este momento México vive una profunda simpatía por las candidaturas independientes, pero también hay un profundo miedo de parte de quienes ejercen el poder.

 

Reconoció que el último proceso electoral no fue distinto a los de años anteriores por eso “quienes quieren ser independientes, están formando su estructura de independientes; por eso, quienes están en un partido insatisfechos, están buscando un avía de independientes y están formando, están formando una estructura para participar”.

 

Señaló que si bien éste es el momento de los independientes; muy probablemente después de 2018 en México ya no los sea pues quizá “los destacados hombres y mujeres independientes formarán su partido con perfiles estrictamente ciudadanos cercanos a la sociedad, transparentes”.

 

Por otro lado, Patricia de Ceballos, alcaldesa de la ciudad  venezolana de San Cristóbal, destacó la importancia de que los partidos políticos impulsen los liderazgos sociales para fortalecer la representatividad de la sociedad.

 

Sostuvo que en su país los mecanismos de participación ciudadana han tenido una apertura a través de políticas públicas impulsadas durante el gobierno de Hugo Chávez, que en la teoría se ven muy bien pero que en la práctica no se dan.

 

En ese contexto, denunció que en Venezuela quienes representan una alternativa o representan ideas de cambio sufren un trato discriminatorio por parte de los Poderes Públicos que inclusive son utilizados para perseguir, encarcelar o destituir autoridades legítimamente electas.

 

Resaltó la labor del Partido Voluntad Popular, en el cual milita y que ha tomado la iniciativa de potenciar los liderazgos sociales de las comunidades, pues “antes de ser líderes políticos hay que ser líderes sociales”,  lo cual ha hecho que marque diferencia respecto a otros partidos en Venezuela.

 

Por su parte, Marco Enríquez-Ominami, fundador del Partido Progresista de Chile, sostuvo que el debate debe ser en torno a la precariedad de los sistemas políticos y no sobres si deben o no existir las candidaturas independientes.

 

Afirmó que tanto México como Chile y Venezuela tienen deudas democráticas y cuando uno habla de candidaturas independientes las candidaturas independientes son una rebeldía respecto de la partidocracia.

 

“El debate sobre las candidaturas independientes es un debate reduccionista, el problema es no es si hay o no, el problema es el sistema, si hay un sistema electoral justo, si la ley de partidos  es eficiente, si hay transparencia activa en los partidos, si hay segunda vuelta electoral, si hay un presidencialismo sano, si hay un federalismo sano, es más complejo que hacer foco en las candidaturas independientes”, dijo.

 

Sostuvo que la candidatura independiente por sí misma no garantiza ningún cambio, aunque reconoció que son un tremendo aporte pues impulsan al sistema.

 

“No hay democracia sin partidos políticos, fui candidato independiente, creo que tiene que haber candidaturas independientes, más bien porque las candidaturas independientes empujan al sistema, lo modernizan, ponen los temas; lo que no sé es cómo gobierna un independiente”, enfatizó.

 

Finalmente, el doctor Ariel Rodríguez Kuri, del Colegio de México, coincidió en la importancia que tienen las candidaturas independientes sobre todo porque son correctivos y señales de alarma de lo que está muy mal en el sistema político.

 

Celebró que el Legislativo asocie también otras figuras como la consulta popular y la iniciativa ciudadana para complementar un modelo que en la medida de lo posible pueden ser un control ciudadano de algunos de los procesos políticos más importantes o al menos puede dejar un mensaje.

 

Sin embargo señaló que puede haber peligros en las candidaturas independientes sobre todo de inflar más allá de lo razonable las bondades de lo que significan estas figuras.