- Presenta el senador petición para retomar el proceso legislativo que permita la recuperación del poder adquisitivo del salario
- Entre enero de 2013 y agosto de 2015 el salario mínimo aumentó 1.16 por ciento en términos reales, mientras que la canasta básica aumentó 9.05 por ciento
La política económica en México ha fallado pues ni el país ha crecido como lo prometieron ni los empleos creados son de calidad y dado que no se han tomado las medidas necesarias para que los trabajadores y las familias tengan una mejor situación económica, es urgente sacar de “la congeladora” el dictamen en materia de desindexación del salario mínimo, afirmó el senador Mario Delgado Carrillo.
El legislador realizó un exhorto al Senado de la República para que se someta a segunda lectura y posterior discusión y votación el dictamen que ya tiene casi 10 meses de retraso.
“La reforma de desindexación del salario mínimo representa una condición necesaria para recuperar su poder adquisitivo. Hoy el salario mínimo no cumple su mandato constitucional de ‘satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer Ia educación obligatoria de los hijos’. El salario mínimo en México es precario, ganar un salario mínimo significa vivir en Ia pobreza y esta reforma representa una oportunidad para dignificar el salario”, afirmó el senador Delgado Carrillo.
Consideró que la consecuencia de la Reforma Laboral ha sido una caída en los empleos que reciben más de tres salarios mínimos y prueba de ello es que con base en datos del Inegi, tan sólo en el último año 2.3 millones de trabajadores se han sumado a la informalidad.
Delgado Carrillo dijo que la mala situación en la que se encuentran los trabajadores mexicanos se agudiza no sólo por la falta de calidad en los empleos que se generan, sino también por la precarización del salario.
“A los trabajadores mexicanos cada vez les alcanza menos para comprar con el salario mínimo vigente. A pesar de que se ha señalado la estabilidad de la inflación, no se ha considerado el impacto del aumento en la canasta básica. Entre enero de 2013 y agosto de 2015 el salario mínimo aumentó 1.16 por ciento en términos reales, mientras que la canasta básica aumentó 9.05 por ciento”, expresó.
Además de que en ese mismo periodo el Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza aumentó 10.7 por ciento lo cual significa que hay un 10 por ciento adicional de la población que no puede comprar la canasta alimentaria con sus ingresos laborales, esto es, más de 50 millones de mexicanos.
Por lo anterior urgió a la Mesa directiva a del Senado de la República para que se someta a segunda lectura y posterior discusión y votación el dictamen de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales, Trabajo Y Previsión Social y de Estudios Legislativos el Proyecto de Decreto por el que se reforman diversas disposiciones de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en materia de Desindexación del Salario Mínimo.
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