Exige Benjamín Robles políticas que verdaderamente apoyen al campo mexicano


Intervención del senador Benjamín Robles Montoya, del Grupo Parlamentario del PRD, para expresarse a favor del punto de acuerdo por el que se declara el año 2015 como el año de la Ley Agraria.

 

Benjamín Robles Montoya, (BRM): Muchísimas gracias, diputado presidente.

 

Qué bueno, compañeros y compañeras, qué bueno que legisladores del PRI presenten este punto de acuerdo para declarar el año 2015 como el año de la Ley Agraria.

 

Qué bueno, qué bueno que lo hacen, aunque sea en el discurso demuestren esta preocupación y quieran enaltecer las políticas que un momento le dieron rumbo y sentido a esta nación.

 

Lamentablemente, a eso venido también a subir a la tribuna, estos gestos ornamentales, decorativos, insustanciales palidecen, compañeras y compañeros, ante los hechos, ante lo que realmente importa.

 

Efectivamente el 6 de enero de este año en la conmemoración del IC aniversario de la promulgación de la Ley Agraria, el presidente de la República anunció la preparación de la reforma profunda al campo donde afirmó que la misma coadyuvaría a detonar al productividad y competitividad de de campesinos e indígenas.

 

Pues bien, dicha reforma como tal no se ha presentado por cálculos políticos o por la razón que quieran, pero no se ha presentado o a lo mejor debiese decir “no, la Reforma al Campo sí se hizo y se llama Reforma Energética”.

 

Miren ustedes, compañeras y compañeros, quieren venir aquí los amigos legisladores del PRI a celebrar la Ley Agraria de 1915 cuando hace escasos meses aprobaron la intromisión u ocupación territorial, cuando en los hechos no hacen más que atentar contra la propiedad social y legalizar el despojo de los recursos naturales.

 

Hoy la situación del campo es irrefutable. Existe una dependencia alimentaria principalmente, como todos sabemos, hacia los Estados Unidos, de casi el 50 por ciento de la demanda interna de alimentos; hay un déficit de la balanza agropecuaria; dos millones de empleos perdidos en el sector, ha crecido al migración desde el campo mexicano hacia los Estados Unidos y hacia las ciudades más grandes de aquella nación; aumento también sin duda de la pobreza en el área rural.

 

Desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio, el primero de enero de 1994, cerca de 2.3 millones de campesinos han dejado sus tierras para emigrar a los Estados Unidos o a las ciudades de nuestro territorio, las más grandes; y otros cinco millones de productores decidieron dedicarse a actividades distintas con mejores remuneraciones con el agraviante de que existe el riesgo de que México llegue a exportar el 80 por ciento de los alimentos que al población demanda.

 

Es por eso que lo que debiese preocuparnos y ocuparnos hoy no es solamente estas actividades que incluso estamos dispuestos a aprobar, sino que el verdadero exhorto al presidente de la República debiese ser atender la marginación y la pobreza que existe en el campo.

 

Y eso es también debiese dedicarse e interesarles a los legisladores que estamos en esta Comisión permanente. Por eso creo que para logar todo esto, compañeras y compañeros, diputado presidente, con esto termino, resulta imprescindible emprender programas de modernización de la Administración Pública de manera integral y, apunto, a fin de que se opere con mayores índices de eficiencia en beneficio de los productores del campo, de su productividad, de su innovación y del desarrollo de sus capacidades.

 

Y ninguno de los puntos que incluye el punto de acuerdo presentado por el diputado proponente lo menciona, por eso quisiera proponer que se incluya en este punto de acuerdo precisamente lo que tenga que ver con el verdadero rescate al campo mexicano y no nada más medidas ornamentales que de  nada le sirven a la población que vive en el campo.

 

Es cuanto, diputado presidente.