Versión Sen. Mario Delgado C. Presentación Reporte Acabando con la Guerra Contra las Drogas


Mario Delgado

Participación del Senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Mario Delgado Carrillo, en la presentación del reporte “Acabando con la Guerra Contra las Drogas-Informe del Grupo de Expertos”, de la London School of Economics.

Senador Mario Delgado Carrillo: Muchas gracias. Agradecerle al CIDE y a la London School of Economics que me hayan invitado para estar aquí en esta mesa, con gente tan distinguida como John Collins, como el doctor Madrazo, como Guillermo Cejudo, con Laura Atuesta y con Jorge Javier Romero.

Yo coincido con Jorge Javier de la importancia del reporte en la discusión global, porque una de las escuelas de economía y política pública más importante y más influyente del mundo saca este reporte y aquí en México también una de las escuelas más importantes en temas de economía y política pública hace la traducción para que llegue a más personas este reporte.

Me parece que es útil en el debate porque ayuda a quitar muchos miedos y muchos prejuicios que hay en el debate público, pero sobre todo a quienes estamos en la política, a quienes nos toca proponer, es una herramienta muy valiosa, muy poderosa, que nos ayuda a sustentar lo que estamos proponiendo, y sobre todo a tratar de encauzar más el debate, como decía Guillermo Cejudo, hacia un debate informado con estadísticas, con datos, y cada vez con menos prejuicios y menos miedos.

El reporte a mí me parece que es muy balanceado, es muy equilibrado y aporta muchas ideas y evidencias nuevas. No decreta contundentemente el fin de la guerra contra las drogas, por ejemplo, Callum clins rescata o trata de poner en contexto los alcances y los logros límite del prohibicionismo. También Kleinman y Ciscan pues señala claramente las posibilidades y los riesgos que hay en los distintos mecanismos de regulación. Es decir, acepta que todavía el tema de regulación de mercados de drogas es un tema a explorar, no concluyente y que también tenemos que… sí tiene que ir avanzando la aproximación de salud y el enfoque de riesgosidad.

A mí me gusta mucho que casi en la mayoría de los artículos se reconocen los costos diferenciados que hay entre los países consumidores y los países en tránsito o productores.

Collins da la teoría económica para explicar la meta inalcanzable que plantea el prohibicionismo. Es decir, un mundo libre de drogas pues económicamente no tiene ningún sustento, ninguna posibilidad; y sí pone en claro las consecuencias del modelo prohibicionista al aumentar el precio en el mercado de las drogas y las intervenciones violentas de los estados, la respuesta también del crimen ante esta violencia del Estado que vuelve, otra vez, al Estado a generar más violencia en una espiral tan clara como la hemos visto en México.

Casi todos los que estamos proponiendo algún esquema de regulación, incluso cuando se hace alguna propuesta partiendo desde el enfoque de salud se nos pregunta por el tema de la seguridad pública. Bueno, si esto es una respuesta o es una política de seguridad pública. A mí me gusta mucho la participación de Laura Atuesta, en este sentido, que además de hacer un claro señalamiento de la falta de medición en México y el reconocimiento de las poblaciones internamente desplazadas, que a diferencia de Colombia donde sí se mide, se reconoce y hay políticas y leyes para atenderlo, en México ni siquiera hemos reconocido su existencia.

Pero además de abordar ese tema también habla sobre… suponiendo un esquema de legalización cómo el resultado final, en términos del bienestar de las familias, va a depender de la transformación que tenga la actividad criminal, es decir, si continúa el conflicto y la violencia, y también de la reasignación del presupuesto militar hacia  presupuestos enfocados a educación o el bienestar de la población. Es decir, advierte claramente que el tema de legalizar no va a tener un impacto directamente en el bienestar de las familias en términos de seguridad pública y control de la delincuencia si no se toman otras políticas que pueden llevar luego a desacreditar cualquier esquema de regulación.

Es importante ver qué se hace con el presupuesto público, cómo se reasigna y también ver muy de cerca la transformación de la actividad delictiva, como ha sucedido en México, si vemos por ejemplo el caso de Michoacán, que la delincuencia se va hacia otras actividades y mantiene los mismos niveles de violencia. Entonces, para quienes nos preguntan de manera recurrente me parece muy acertado que Laura Atuesta nos señale los límites de esto y que otras políticas públicas se tendrían que acompañar a los esquemas de regulación, o qué no podríamos esperar completamente de los modelos de regulación.

Dice Laura que pensar que la legalización, el tratamiento de adicciones y la prevención del consumo como las únicas nuevas alternativas dejaría a México, a Colombia también, con un problema de seguridad que tarde o temprano se traduciría de una guerra contra las drogas a una guerra contra cualquier cosa. Es decir, necesitamos una visión integral en este tema.

A mí me gusta… la parte de explicación económica de John Collins es muy buena, a mí me gusta mucho también el nuevo enfoque que propone del multilateralismo, es decir, no ver cómo hasta el momento se ven las convenciones  internacionales, como una respuesta estandarizada, única, que tienen que aplicar los estados sin mayor discusión. Señala que en un principio las convenciones no tenían este objetivo, ni siquiera es el caso de la JIFE que ya mencionaba Jorge Javier Romero, que ahora pues se ha convertido como en el súper policía global, encargado de estar tratando de que se incida en determinada política pública o aplicación de la ley. Es una instancia que fue creada en un principio como una instancia técnica y de procesamiento de datos, y que ahora por ser una instancia internacional perteneciente a la ONU, pues debería de incorporar los principios de derechos humanos que ya plantea la ONU.

Entonces, plantea un nuevo multilateralismo que debería enfocarse a facilitar y coordinar respuestas diversificadas, basadas en un principio de pluralismo en cuanto a políticas y que se tengan también resultados en cada país, en cada Estado que se propongan a nivel internacional.

Dice que ciertos aspectos de las convenciones pues sí, efectivamente deben ser una representación de compromisos vinculantes, pero no todas las convenciones deben ser interpretadas así, o no toda la parte de las convenciones deben ser interpretadas así. Hay otros aspectos que no deben ser considerados estrictamente como vinculantes, la idea de un enfoque vinculante de solución única dice que abarque todo al interior de los Estados, que no les deje margen para una política local nunca fue la intención de quienes redactaron las convenciones.

Entonces abre una visión distinta en el tema de las convenciones, que las convenciones… que los Estados consideran a las convenciones sobre drogas como un componente subordinado de una red entrelazada de compromisos que comprenden diversos aspectos de bienestar humano y de seguridad. Entonces, con esta nueva visión quisiera hablar ahora de la propuesta que hace el doctor Madrazo de los costos constitucionales. Y ahí el ejemplo que pone en México es muy claro, de cómo se han tenido que coartar algunos derechos humanos, algunas libertades, algunas garantías individuales para darle paso a una mayor supuesta eficacia de la guerra contra las drogas.

Entonces ¿cómo tenemos –decía él– menos libertades, o cómo tenemos un Estado más represor que tiene como origen el pretexto de ser más eficaces en la guerra contra las drogas ¿y de dónde vienen esas estrategias, de dónde vienen esos compromisos? Pues vienen de las convenciones internacionales. Entonces, de estos acuerdos internacionales, sobre todo el de la convención de 1988, que es particularmente punitiva y obliga a los Estados a sancionar de manera penal muchas de las actividades relacionadas con las drogas, bueno… tiene consecuencias muy claras. Entonces, cómo utilizamos estas dos aproximaciones para el caso mexicano, es decir, cómo tenemos un enfoque multilateral mucho más abierto, con una interpretación y una lectura distinta de las convenciones internacionales, y cómo tenemos esta lectura de el aumento en los costos constitucionales que nos ha provocado la guerra contra las drogas.

Creo que eso… si combinamos ambas nos llevaría a que México entonces cuestionara la pertenencia o hiciera alguna denuncia en los tratados internacionales. Sería una denuncia que le podríamos llamar Collins-Madrazo para cuestionar alguna de las convenciones en las que está México, sobre todo si consideramos que en el caso mexicano, si bien hemos perdido derechos y garantías no todo ha sido pérdida. Creo que tuvimos una gran ganancia en 2011, cuando el artículo primero de la Constitución reconoce a los derechos humanos, ya no como garantía sino como derechos inherentes a los individuos, que el Estado debe reconocer y debe de respetar, y ya no garantías que otorga el Estado; sino que el individuo por sí mismo tiene sus derechos humanos. Es decir, que el Estado no los  otorga. Y si la Constitución es la norma suprema que ocupa la máxima jerarquía normativa en el orden jurídico mexicano, entonces los tratados que están en un segundo plano pues entonces claramente están en contradicción. De ahí que México podría pedir que se modifiquen o que se terminen algunas de esas convenciones, y aprovechando esta nueva lectura que propone Collins a nivel internacional, sobre todo porque la Constitución en México tiene ahora como objetivo el ampliar la protección a los derechos humanos, y las convenciones internacionales claramente no van en ese sentido.

Entonces, bueno, ahí hay una propuesta que… puede haber dos aproximaciones: una, con modificaciones a la ley sobre la celebración de tratados en nuestro país donde, desde mi punto de vista, hay alguna posibilidad para que el Congreso pudiera cuestionar la pertenencia a algunos de los tratados o hacerle un exhorto al Presidente de la República, quien es el encargado de firmar los tratados y modificarlos, pues para pedir una suspensión o modificación de algunos de los tratados que propician la guerra contra las drogas en nuestro país.

También, bueno, decir que en el Senado de la República propusimos también la modificación a la Ley General de Salud para permitir que la Canabis, el tetrahidrocanabinol, ya no sea una sustancia prohibida, sino que sea una sustancia controlada, regulada, todo su proceso desde producción hasta su prescripción médica.

También el doctor Madrazo señala cómo por primera vez en muchos años hay una invasión en estos costos constitucionales donde, con la Ley de Narcomenudeo el Estado lo que hace es compartir la parte punitiva, policial, de la guerra contra las drogas y lo hace además de una manera muy ineficaz. Entonces, lo que estamos proponiendo es que sea concurrente también el tema de cultivo, para que entonces los gobiernos locales puedan establecer una política integral de drogas distinta solamente a la parte persecutoria policial, y puedan hacer, como lo han propuesto algunos legisladores en la Ciudad de México, una política basada en la reducción de riesgos y daños a partir del control sanitario de las autoridades locales.

Esa es la propuesta que está el Senado de la República. El día de hoy y mañana tenemos en el PRD nuestra sesión plenaria para definir nuestra agenda de prioridades para el siguiente periodo legislativo y ahí vamos a insistir en que el grupo parlamentario pueda ponerlo como una de las prioridades en la agenda legislativa a partir del primero de septiembre.

Por último, quiero retomar una idea también del doctor Madrazo que publicó en un libro del Tecnológico de Monterrey, junto con una colaboradora de él, Ángela Guerrero, que es algo que decía el doctor Cejudo: Bueno, nos falta información, quisiéramos tener un debate de estos temas como lo tenemos con pobreza o como lo tenemos con otros temas en nuestro país. Sin embargo, es más bien como una guerra, como un debate ideológico lleno de mitos, donde no nos cuestionamos la eficacia de lo que estamos haciendo. Y también son políticas públicas y también es presupuesto público que no está sujeto a evaluación.

Por ejemplo, en los últimos doce años se ha triplicado el presupuesto para seguridad pública, y los indicadores, las metas, los resultados con los que ellos miden o pretenden justificar el aumento del presupuesto, pues no tienen nada qué ver con lo que es deseable desde el punto de vista del ciudadano. Porque presentan estadísticas de detenidos o droga confiscada, sin embargo, para el ciudadano tiene cada vez niveles mayores de violencia y cada vez mayor consumo de drogas problemático o acceso de los jóvenes a las drogas. Es decir, no hay una coincidencia entre lo que es deseable desde el punto de vista del ciudadano, en materia de resultados, y lo que está presentado la autoridad como resultados.

Entonces, tendrían que estar sujetas estas políticas a una evaluación, como evaluamos muchas otras, por ejemplo, en el caso de la pobreza nos tardamos muchos años en determinar qué políticas eran eficaces para combatir la pobreza o no. Hoy tenemos una instancia, el Coneval, autónoma, que se encarga de decir: bueno, esto funciona y esto no funciona. A mí me parece que en el caso de la seguridad pública, en el caso del tema de las drogas pues sí deberíamos tener una evaluación parecida. Por lo tanto, o ampliamos las facultades del Coneval o creamos una instancia autónoma, independiente, para tener una evaluación científica, periódica, sistemática y tener indicadores de desempeño y de meta de esta, que es una de las principales aspiraciones de nuestro país.

No tiene por qué dejarse en el ámbito de la especulación o de una evaluación superficial, sin ninguna estadística. Creo que puede ser una vertiente interesante tanto para el CIDE como para el London School of Economics, que en el mundo tengamos una aproximación más científica, metódica, a la evaluación de esto que también es gasto público y son políticas públicas, de los países.

Pero felicitar nuevamente a la London School of Economics, a quienes han hecho posible este reporte. A nosotros nos cae muy bien, nos viene muy bien, en el debate público en México el año pasado invitamos a José Miguel Insulza que presentara el reporte que hizo la OEA en el Senado de la República y eso fue lo que derivó en la iniciativa que presentamos en el Senado. Y hoy nos viene muy bien que desde uno de los Think Tanks más importantes en el mundo, de economía, pues tengan este reporte el día de hoy. Así que muchas gracias y muchas felicidades.