La reforma política del Distrito Federal enfrenta tres grandes retos: la promulgación de una constitución para la capital del país, un nuevo modelo municipal y la garantía de los derechos humanos, destacó el senador Mario Delgado Carrillo.
Al inaugurar el foro Hacia una Constitución para la Ciudad de México, el legislador del Grupo Parlamentario del PRD afirmó que la Reforma Política del DF cobra una mayor dimensión por el contexto actual del país y la búsqueda de la autonomía de la Ciudad nos ha llevado a debates muy importantes.
“Son retos que tiene la reforma política de la ciudad que no sólo tienen que ver con nuestra capital, sino que tiene que ver con todo el país y con el momento que estamos viviendo”, dijo.
Como ejemplo, sostuvo que “a consecuencia de la autonomía de la ciudad, tendríamos que de inmediato hacer, por primera vez para la capital de la República, una constitución”.
El presidente de la Comisión del Distrito Federal del Senado de la República consideró que ésta puede ser una gran oportunidad para hacer un momento refundacional de la Ciudad de México.
Señaló que “a 190 años de la existencia de esta ciudad, pero también a casi 100 años de nuestra Constitución del 17, ahora tan distinta, tal vez esto sea una gran oportunidad para que hagamos una reflexión de qué haremos con nuestra constitución”.
Por otro lado, Mario Delgado señaló que el modelo municipal es obsoleto, pues, dijo, “parece que en todos lados la crisis de inseguridad, la falta también de recursos económicos, la crisis de derechos humanos tienen que ver también con un modelo municipal que está en muchos lugares agotado”.
Por ello, el senador comentó que la propuesta en la reforma política del DF es transitar hacia una alcaldía donde habrá un cabildo de concejales, con lo que se cumplirá la parte de la representación política de la población.
Sin embargo, Delgado Carrillo agregó que aún falta atender la parte ejecutiva, es decir encontrar un equilibrio entre la representación política y las acciones de gobierno.
Además, agregó que dado que el 70 por ciento de la población mexicana vive en ciudades y no existe ningún sustento jurídico para las zonas metropolitanas, “resolver el problema metropolitano de la Ciudad de México tendrá una implicación para la mayoría de los habitantes de este país”.
En presencia del presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Miguel Barbosa Huerta, el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova, Porfirio Muñoz Ledo y Pedro Salazar, del Instituto de Investigaciones Jurídica de la UNAM, Delgado Carrillo recordó que a partir de la reforma 2011 los derechos humanos son el eje fundamental de garantías plasmadas en la Constitución.
Por ello, precisó que se debe acelerar el proceso de cómo el resto del entramado jurídico tiene que armonizarse a partir de la visión de derechos humanos y cómo se hace una constitución partiendo de esa base.
Y es que, apuntó, “esperaríamos que la Constitución de la Ciudad de México tuviera como visión fundamental, como eje central desde inicio, la protección y garantía de los derechos humanos”.
Finalmente, aseguró que con la ambición suficiente y si no se aborda esta reforma como una ley más o como un tema de coyuntura bajo cálculos políticos, la Ciudad de México puede ser refundada y tal vez se encuentren nuevos caminos para nuestro país.
