Los senadores del PRD, Armando Ríos Piter y Zoé Robledo, exigieron que se le dé al caso Ayotzinapa la dimensión justa pues se trata de un parteaguas histórico que refleja la realidad de muchas regiones del país.
El senador Armando Ríos Piter hizo un llamado a dar la dimensión que merece el debate sobre los hechos ocurridos en Iguala el 26 de septiembre de 2014, pues no se trata de un caso aislado, sino de un acontecimiento que representa la realidad de muchas regiones de México.
Ante el pleno del Senado de la República, el legislador del PRD sostuvo que el caso es problema del Estado mexicano, y Enrique Peña Nieto, como representante del mismo, debe dar las garantías a todos los mexicanos de que no se repetirá un hecho similar.
Hizo un exhorto para se le dé seguimiento a los planteamientos del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la CIDH porque no va haber un solo desaparecido en el país al que el caso Ayotzinapa no le ayude a saber lo que debe hacerse.
Ríos Piter rechazó que el debate tenga el propósito de sacar raja política y aseveró que si hay funcionarios involucrados, deben ser encarcelados sin importar el partido al que pertenezcan.
“Que acabe en la cárcel, que no haya impunidad para nadie, en el nivel municipal, en el nivel estatal, pero tampoco en el federal”, dijo.
A su vez, el senador Zoé Robledo aseguró que Ayotzinapa marcó un antes y un después en la historia de México, “antes de Ayotzinapa insistían, decían, repetían que en México poseíamos todo; después de Ayotzinapa los mexicanos saben que no tenemos nada, que no caminamos derecho hacia el cielo, que estamos extraviados por el camino opuesto”.
El legislador por Chiapas afirmó que es necesario entender que después de los hechos ocurridos en Iguala se esfumó la confianza en los políticos y la política, creció el malestar social y que la brecha entre las autoridades y la sociedad se convirtió en un enorme abismo.
Recordó que una de las exigencias de los familiares de los normalistas desaparecidos es la creación de una unidad especializada que tenga supervisión internacional y que esté compuesta por dos instancias, una que indague sobre la desaparición de los 43 estudiantes.
“Y la otra que investigue el montaje de las autoridades con el que se les pretendió engañar. Ellos como muchos otros mexicanos se sienten engañados”, mencionó.
Finalmente, Zoé Robledo dijo que el Senado de la República debe sensibilizarse ante la indignación social y contribuir con soluciones que permitan recuperar la confianza de la sociedad en las instituciones.
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