Insuficiente, respuesta institucional ante crisis de corrupción e impunidad: Armando Ríos Piter


Conferencia de prensa ofrecida por el senador Armando Ríos Piter, del Grupo Parlamentario del PRD, para referirse al Sistema Nacional Anticorrupción.

Armando Ríos Piter, (ARP): Qué tal, muy buenos días.

La intención de la presente conferencia de prensa es para fijar una posición personal respecto al debate que habrá el día de hoy sobre el Sistema Nacional Anticorrupción.

Como ustedes saben, están citados un grupo de expertos y miembros de distintas instituciones hoy a las cuatro de la tarde, a la Comisión de Puntos Constitucionales.

 

La intención es que el día de hoy se escuche a los expertos, académicos, actores que han participado en este debate con la finalidad de tener un dictamen en los próximos días y votar en el Senado de la República este sistema.

La intención es llamar la atención frente al debate que habrá el día de hoy, porque nos parece que el Sistema Nacional Anticorrupción ha encontrado aquí en el Senado de la República, una lógica inercial que no es conveniente.

Sabemos y lo hemos dicho que ha tenido un trabajo importante, que las instituciones han participado y que el sistema que hoy es parte de la minuta que habrá de discutirse, tiene avances significativos.Lo que nos preocupa, es que se quiera vender como una bala de plata para el tema de la corrupción.

 

Nos parece –o lo digo en términos personales- como senador de la República a mí me parece que la dimensión de la respuesta institucional que se está dando frente a la crisis de corrupción, de sensación de impunidad y la caída en la confianza de la clase política, la respuesta que se está dando con este sistema, es totalmente insuficiente.

Nos parece que si bien la minuta tiene avances, tiene una nueva forma de concebir la articulación entre las instituciones, se queda muy debajo de los escándalos que han significado la casa blanca, y mucho más de la indignación que generó un caso de corrupción también y de impunidad, que ha sido el de Ayotzinapa, en mi estado, en el Estado de Guerrero, en el municipio de Iguala.

Precisamente por eso queremos entregarles a ustedes distintas cápsulas que hemos venido llevando a cabo con entrevistas a distintos actores. Hay un importante núcleo de la sociedad que se está manifestando en distintas formas en contra de la corrupción, en contra de la impunidad.

Ustedes lo recibirán de los miembros de mi equipo; son varios usb´s. Hemos tenido la oportunidad de platicar con gente de distinta naturaleza, desde Juan Pardinas del IMCO, hasta gente que ha estado involucrada en litigios estratégicos, como Luis Pérez de Acha, que es quien ganó recientemente para Mexicanos Primero, un importante amparo que lleva a que se entregue la información sobre 13 mil millones de pesos por parte de la Auditoría Superior de la Federación, o con Agustín Acosta quien fue el abogado de Florence Cassez, o incluso con gente de otro circuito distinto al de los abogados o al de los políticos; viene ahí una cápsula en la que entrevistamos a gente de la Maldita Vecindad, La Castañeda, Espécimen, que son grupos de rock que están involucrados en la problemática social que se está viviendo.

 

Cuáles son cuatro de los ejes fundamentales que quisiéramos que los medios le den seguimiento a la discusión que habrá de darse el día de hoy.

 

No se quiere retomar el tema del fuero; presentamos una iniciativa la semana pasada con aval del grupo parlamentario, y volvemos a poner el planteamiento en la dimensión que queremos que se ponga. Si no se elimina el fuero, temas como el de la casa blanca no podrían ser discutidos en toda su dimensión ¿Por qué? Porque el presidente hoy en virtud del fuero, no sería parte del análisis de la Ley de responsabilidades de los Servidores Públicos.

Y esa parte nos parece nodal, o temas como el de los moches en la Cámara de Diputados no podrían ser atendidos verdaderamente por un Sistema Nacional Anticorrupción precisamente porque los legisladores gozan de fuero, y si es que alguien no hubiera llevado a cabo actividades ilícitas por esta razón, o en este tipo de análisis, no podrían ser controvertidos por parte del Sistema Nacional Anticorrupción.

De tal manera, que no revisar el fuero y no meterlo a la discusión, nos parece totalmente equivocado, nos parece totalmente ausente como respuesta lo que están sintiendo los ciudadanos.

 

Segundo punto. No se pone a los ciudadanos en el corazón del sistema; nosotros lo que queremos es que el sistema no quede a capricho o a voluntad política; queremos que la lógica de los pesos y los contrapesos que tiene el sistema, tengan un principio motor, tengan un catalizador y que sean los ciudadanos, no solamente en la cúspide del sistema –que sería en el secretariado técnico- sino ahí en tierra, donde se hacen las licitaciones y terminan violándose los derechos de los contribuyentes, donde los presidentes municipales terminan distorsionando los recursos, donde los síndicos terminan comportándose mal y entregando autoridades, lo que tendrían que estar haciendo que es supervisar a las policías, se las terminan entregando a los criminales, necesitamos que los ciudadanos se vuelvan el motor y el catalizador del sistema.

Tercer planteamiento. No se quiere que las recomendaciones sean vinculantes. Si las recomendaciones no son vinculantes, pueden caer en la lógica de ser simples llamadas a misa, y que nadie las atienda y otra vez que se quede a la voluntad política, la posibilidad de combatir la corrupción.

Y por último. El cuarto punto que nos parece una enorme deficiencia, y que nos parece que se quiere pues seguramente jugarle el dedo en la boca a lo que buscamos nosotros como Sistema Nacional Anticorrupción.

No es parte nodal del sistema la Secretaría de Hacienda; el Servicio de Administración Tributaria y la Unidad de Análisis de Inteligencia Financiera, deben de ser parte de la columna vertebral del análisis de lo que es el combate a la corrupción.

Porque si lo que queremos es verdaderamente entender cómo funcionan fenómenos como el de los relojes que hace poco se volvió tan famoso, pues lo que tenemos que entender es ¿cuáles son los ingresos que tienen los funcionarios o que tienen los servidores públicos, o que tienen los legisladores, y cómo están viviendo? ¿Cuál es el tipo de vida, cuál es el formato de vida que tienen? Si tienen relojes de 700 mil pesos, que con toda claridad el análisis permita saber de dónde se está ganando dinero y cómo se está gastando.

Si no se tiene el corazón financiero como parte importante de la inteligencia del sistema, la verdad es que se le va a estar dando una suerte de atole con el dedo a los ciudadanos.

Y lo que no queremos es que se apruebe algo que tal vez falla en los discursos de los próximos días de decir “se está aprobando el sistema Nacional Anticorrupción, ya tenemos un nuevo modelo”, cuando en realidad lo que se está aprobando pues es un sistema de coordinación de instituciones que buscan luchar contra la corrupción, así se debería llamar.

No es un Sistema Nacional, no tiene fuero, no tiene la parte financiera, no tiene la parte hacendaria, no tiene la parte de los ciudadanos. Es una suerte, si vemos lo que es el Sistema de Coordinación de Instituciones para Luchar contra la Corrupción, pues es, nosotros lo queremos llamar, es un SICILUCO, es el acrónimo de lo que tiene, no es un Sistema Nacional Anticorrupción.

De tal manera, compañeros y compañeras, que queremos dejar  muy en firme que éstos serán los cuestionamientos que habremos de hacer hoy a los expertos, éstos son la columna vertebral de los planteamientos que estemos debatiendo en torno a este Sistema Nacional Anticorrupción.

Y dejar muy claro que si esto sea aprueba así como está, pues nos vamos a quedar muy cortos de lo que verdaderamente en la calle se está expresando, de lo que manifiestan las encuestas de humor social respecto a la mala percepción que se tiene de la clase política.

Para cerrar, yo considero que el Sistema, cómo está planteado, tiene avances, sí, es algo importante, pero se queda muy corto, sumamente corto respecto a la dimensión y tamaño de respuesta que tendríamos que estarle dando a la crisis que, por la corrupción y por la impunidad, está viviendo el país.

Si alguien tiene alguna pregunta, yo estoy a sus órdenes.

Pregunta, (P): Senador, yo quiero preguntarle su opinión respecto a, bueno es prácticamente inminente, ayer incluso las Juntas de Coordinación Política de las dos Cámaras dijeron que se va a sacar este sistema prácticamente sin cambiarle una coma de lo que enviaron los diputados.

Entonces quisiera yo saber finalmente si, digamos lo que usted está planteando es que se le hicieran algunas modificaciones, esto se entiende que no va a suceder, pero se puede, digamos por cuentas separadas, trabajar este tema, por ejemplo del fuero, que es lo que han dicho los panistas, que ellos también se comprometen a que también el asunto se debata con todas la iniciativas que están ahí, digamos en la palestra.

¿Hay esa posibilidad, o de plano ve usted que la idea o la intención es seguir dejándola  en la congeladora el asunto?

ARP: Yo creo que si no se hacen estos cambios, el Sistema Nacional Anticorrupción se va a quedar muy corto y no va a dar los resultados que se le van a querer vender a los ciudadanos.

Se requiere que se haga un compromiso público por parte de todas las fuerzas públicas de que éstos son los temas que verdaderamente posibilitarían una articulación integral frente al tema.

¿Cuál es el riesgo que se corre? Sí, que ahí se  vote un Sistema Nacional Anticorrupción, que se haga un cambio constitucional y que las cosas se queden a la deriva; y que después pase lo que ha venido pasando, que haya una ley reglamentaria, omisiones, ausencias, que los que tienen la mayoría simple, llamada mayoría calificada, se quieran ir por la corta y que lo que quieran hacer es eso, darle atole con el dedo a la gente.

Entonces, ¿cuál es mi planteamiento fundamental? Hoy para eso vienen personas representativas importantes para poder escuchar si es que están de acuerdo o no con que estos elementos le darían la verdadera potencia al Sistema, si es que nos estamos quedando cortos o no.

 

Porque cuál es la historia que han querido vender, que si no se aprueba en los términos la minuta, entonces ya no va a salir. Qué es lo que está pasando, pues que están asustando a mucha gente, que con buena credibilidad, con buena fe, están apostando a que este sistema sirva.

Los quieren espantar, les dicen “si no se vota así, pues entonces ya no va a salir; ésa es la peor forma de hacer leyes. Pero peor aún, un tema como el combate a la corrupción y este sistema, lo peor es engañar a la gente y que dentro de la zozobra quede algo cojo, quede algo limitado, quede algo que no sea suficientemente sólido.

¿Cuál sería el planteamiento? Que haya un compromiso público sobre estos temas, para eso las audiencias tienen dejar sembrados estos asuntos y que haya una nitidez contundente sobre el tema del fuero, sobre el tema de la participación ciudadana, sobre el involucramiento de la Secretaría de Hacienda, del SAT y de la Unidad de Análisis e Inteligencia Financiero; y sobre todo sobre la parte vinculante, éstos son elementos que le dan verdadera cohesión y profundidad, dientes suficientes a lo que puede ser un verdadero Sistema Nacional Anticorrupción y no el SICILUCO que nos quieren presentar.

Suena a chachalaca su SICILUCO, ¿no?

P: Senador, ¿qué tan conveniente podría ser en un momento dado que no se esté discutiendo ahorita y se aguante para la siguiente Legislatura, sobre todo en Cámara de Diputados, donde se prevé posiblemente un escenario donde la oposición podría tener ya mayoría y poder manipular ahora sí con los puntos que usted está  planteando y que se puedan incluir todos estos temas y no legislarlo y sacarlo al vapor como se está pretendiendo?

ARP: Bueno, ya hay un acuerdo como se preguntaba, los principales grupos parlamentarios se han manifestado por que esta minuta salga en los términos en los que está.

¿Qué es lo que nos parece indispensable? Dejar claramente asentados cuáles son los temas que al faltar lo dejan en una posible discapacidad a este Sistema; segundo, que haya un compromiso público de legislar sobre estos temas y al final del día, si es que la oposición gana la Cámara de Diputados, pues será un piso mínimo que nos permitirá el día de hoy dejar muy en claro cuál es la lógica, le espíritu, en la cual debemos llevar a cabo la legislación secundaria y, si es necesario, un nuevo cambio constitucional que tenga esta trascendencia.

A mí me parece enormemente criticable que lo quieran sacar en esta dinámica de decir “es que si no, no va a salir nada”. Porque eso lo que demuestra es la falta de compromiso real que hay sobre legislar sobre esta materia.

Cuando nos tocó legislar en la parte de telecomunicaciones fueron hojas, hojas y hojas que dejaron claramente establecido en el texto constitucional la profundidad de la reforma.

Y aquí lo quieren dejar en vaguedades, de tal manera que ésa es la forma en que se entiende la relación con los poderes fácticos y ésa es la forma en que se entiende la relación con la sociedad, que hoy lo que clama es combate a la corrupción y combate a la impunidad.

¿Alguien más?

Listo, gracias.