Discurso de la Senadora Lorena Cuéllar Cisneros, durante la presentación de su Segundo Informe de Actividades Legislativas


La política es la práctica ciudadana por excelencia. Es la actividad privilegiada que transforma nuestra realidad.

Hacer política desde la izquierda, es impulsar esa acción trasformadora a favor de quienes más lo necesitan, a favor de la sociedad, a favor de mujeres y hombres,a favor de la equidad y de los derechos de todas y todos.

Hoy en la izquierda estamos haciendo historia. Hoy el PRD, como fuerza política de millones y millones de mexicanos, preside las dos Cámaras que conforman el Congreso de la Unión.

Quiero dar la bienvenida y valoro de todo corazón la fraternidad, la solidaridad, y la presencia de mis compañeras y compañeros senadores:

Bienvenidas y bienvenidos a Tlaxcala, tierra de lucha, de historia y de trabajo. Nos sentimos muy honrados con su presencia.

Agradezco a los:
Diputados Federales y Locales.
Presidentes Municipalesy funcionarios de los Ayuntamientos del Estado.
Gracias por su apoyo y por su trabajo a favor de las y los tlaxcaltecas.

Agradezco la presencia del Presidente del Comité Ejecutivo Estatal del PRD, Manuel Cambrón Soria, así como de los distinguidos cuadros políticos, ex-servidores públicos y líderes locales.

Sean todos bienvenidos.

Con afecto y especial estima, doy la bienvenida a los integrantes de:

Cámaras y asociaciones de empresarios;

A las agrupaciones sindicales y

A los representantes de Instituciones Académicas, Organizaciones Sociales y de la Sociedad Civil.

Desde luego, valoro y reconozco la presencia de mis amigas y amigos representantes de los medios de comunicación, que me han hecho el favor de acompañarme durante mucho tiempo, haciendo de su labor una herramienta útil y efectiva, para informar a nuestra sociedad. Mi agradecimiento especial a todos ustedes.

Permítanme expresar mis sentimientos de amor y cariño a mi querida familia, que ha sido mi fuerza, y mi inspiración.

Y especialmente a todos y cada uno de ustedes, que son la razón de mi esfuerzo, ya quienes he entregado y dedicado esta vida de servicio.

Señoras y Señores.
Les quiero preguntar. ¿Cómo recordarán ustedes, el año 2014?

Pasamos momentos difíciles en los ámbitos político, económico y social, que significó una serie de transformaciones y reformas que han afectado terriblemente a las y los mexicanos. Y eso se refleja en sus casas.

En este sentido, el Gobierno Federal se empeñó en vendernos la ideade que con estas reformas, vendría un México prospero, con muchas inversiones, fuentes de empleo y beneficios para todos.

Sin embargo,la realidad de millones de mexicanos es otra:

Tenemos un crecimiento económico débil.
El desempleo está creciendo.
Sufrimos recortes presupuestales que afectan a laspersonas en pobreza.
Los precios de la gasolina, la luz,y los alimentos, suben de manera permanente.
Mientras que a los grandes empresarios les son condonados miles de millones de impuestos, nuestrospequeños comerciantes, siguen encontrando trabas y obstáculos para seguir subsistiendo.
En nuestro país, siendo una nación petrolera, pagamos una gasolina de 13.57 pesos, mientras que en Estados Unidos, cuesta 9 pesos por litro.
La educación,se encuentra sumida en un profundo rezago.
Millones de familias viven con temor permanente, debido a que nuestra sociedad está secuestrada por la inseguridad.

Otro flagelo que agravia a todos los mexicanos, y que con justa razón reclaman ponerle fin, esla impunidad.

Impunidad de los delincuentes que amenazan nuestras vidas, y a nuestras familias.

Impunidad de los políticos que violentan o transgreden la ley y los más elementales principios éticos, lo mismo con casas de lujo, que con negocios al amparo del poder.

Impunidad de quienes abusan de la necesidad y la desesperación de las personas, para llegar al poder, y desde ahí, privilegiar sus intereses económicos.

Y el escenario, se torna más difícil porque las más altas esferas del poder federal, lo mismo la Presidencia de la República, que la Secretaría de Hacienda y los partidos políticos, se encuentran en medio de escándalos, que nos han hecho perder la confianza y la credibilidad de sus actos y, por añadidura, abonan al descrédito de todos los políticos.

En esta penosa realidad, millones de mexicanas y mexicanos enfrentan su vida, dando cuenta que el ingreso que perciben les alcanza para menos.

Viven con el temor de padecer una enfermedad o accidente, y carecer de seguridad social.

Nuestros jóvenes talentosos y preparados, almacenan sus conocimientos en el armariodel desempleo y el subempleo,porque no hay oportunidades suficientes y dignas para ellos.

Hombres y mujeres, en su extrema desesperación, migran lejos de su tierra, desintegrando a sus familias.

En síntesis, esta es la dolorosa situación que se vive detrás de cada puerta,en millones de hogares.

Realidad que contrasta, con la publicidad gubernamental, que día a día se desmorona y confirman la falsedad de esas promesas de bonanza y prosperidad.

Y Tlaxcala, no es la excepción.

Sé que están preocupados, sé que están tristes , sé que tienen dolor e impotencia por ver a nuestro Estado que se nos va de las manos, déjenme decirles una cosa, yo también estoy triste, yo también estoy enojada , a mí también me duele ver a Tlaxcala como está.

¡Nuestros ancestros nos enseñaron a ser grandes guerreros! Y nosotros lo somos.

Y a pesar de las adversidades, las carencias y a todo lo que nos enfrentamos día a día, seguimos luchando por salir adelante.

Déjenme contarles una historia de vida. Hace unos meses, visite la casa de la Sra. Elena Corona, ella es ama de casa del municipio de Cuaxomulco y es madre de Michelle y Arabia, de 20 y 22 años, que sufren de insuficiencia renal.

Una, ya con dialisis y la otra hemodializada, este escenario es desgarrador, pues ha acabado con su patrimonio y viven en la desolación total, y lo pongo como un ejemplo de los miles de casos que hay en nuestro estado.

¿Se pueden imaginar el sufrimiento, el dolor y la impotencia de estas madres? Ellas, nos piden a gritos, nuestra ayuda.

Día a día, se incrementan los casos de esta enfermedad en Tlaxcala, ante los ojos ciegos y oidos sordos del Gobierno Estatal.

No queremos el silencio impune de los responsables de atender este problema.

Seguiré denunciando esta situación y haré todo lo que humanamente esté a mi alcance, para dar soluciones y seguir estando a su lado.

Para mi, la sociedad no son números, no son estadísticas, son personas con identidad y familia, con un corazón que sufre y padece los estragos de un modelo socioeconómico que ha sumido y condenado a la mayoría, a vivir en condiciones de pobreza.

Lo que hoy nos demandan los ciudadanos, es honestidad y cumplir lo que se promete.

Por eso, hoy la mayor demanda de mujeres y hombres son soluciones.

Soluciones para que el gobierno cubra la deuda históricaque tiene con más de 53 millones de mexicanos, que viven en la pobreza.

Cuando recorro los municipios y voy a las comunidad es escucho de viva voz sus necesidades y problemas más sentidos.

Todo lo que me plantean lo tengo presente, y es un compromiso que hago con Tlaxcala y con las y los tlaxcaltecas.

Porque, estoy convencida que es posible construir un Gobierno honesto, eficiente y con convicción, para dar respuesta a nuestra necesidad de paz, de seguridad y de justicia.

Tenemos dos caminos por delante:

El de gobiernos del pasado, siguiendo recetas de la macroeconomía moderna fallida, y otro, el de los ciudadanos que aspiran a una sociedad más digna y próspera para todos.

Frente a ustedes reafirmo que mi compromiso es seguir al lado de las y los ciudadanos.

Así, da cuenta cada uno de mis actos a lo largo de mi vida pública y privada.

Estoy convencida que sólo la unidad nos dará la fuerza, y el empuje necesario para salir adelante, más allá de nuestras diferencias políticas e ideológicas.

Lo que nos une son las causas de Tlaxcala y de su gente.

Estamos en una etapa de cambios, juntos estamos llegando al momento de hacer historia.

Por ello, los invito a sumar esfuerzos con convicción, con determinación, con entereza.

Los invito a que trabajemos de la mano, para cambiar a nuestro país, para cambiar a Tlaxcala.

Trabajemos unidos, porque ésta no es tarea de una sola persona, sino de todas y todos.

Hoy,puedo mirarles a los ojos y decirles con toda sinceridad, que estos dos años en el Senado de la República he trabajado incansablemente bajo estos principios.

Quiero decirles, que cada vez que subo a la tribuna del Senado tengo presentes sus rostros, sus sonrisas, y sobre todo su voz, que la hago mía,para denunciar las injusticias, para proponer soluciones, para señalar las necesidades, y para hacer leyes justas que en verdad se cumplan.

Es una alta responsabilidad, pero también un gran honor el encargo de representar a Tlaxcala y el de legislar para todos los mexicanos.

Por eso hoy, estoy aquí, para dar la cara ante la sociedad que represento.

Para mostrarles que la dirección que llevamos es un camino donde el pasadono podrá repetirse.

Porque nuestro trabajo está cambiando historias de vida.

Porque cuando se quiere, se puede.

Amigos todos, este día, con certeza puedo afirmar:

Que toda mi vida la he dedicado a las mejores causas de Tlaxcala, la he dedicado al servicio por una sociedad más justa, equitativa e igualitaria;porque estos son principios esenciales, bajo los cuales, se forman valores de paz, convivencia y respeto.

Que es posible atreverse a romper inerciasy vencer resistencias.

Que es posible demostrar al mundo que sabemos superar nuestras adversidades.

Pero, sobre todo, que con honestidad, con coraje y con determinación, es posible cambiar el rostro de México, y en especial el de Tlaxcala.

Que mi compromiso inquebrantable, es continuar trabajando en favor de quienes menos tienen y que merecen más, mucho más de lo que ahora reciben.

Tlaxcala, tierra de cultura e historia, tierra de liberales y revolucionarios, tierra de poetas, esperanzas y sueños.
Tierra de trabajo, y de hombres y mujeres con grandeza de espíritu, y de convicciones.

A todas y a todos, les agradezco mucho su presencia.

Verlos aquí, me impulsa a seguir adelante, y me compromete a dar más por mi tierra y por todos ustedes, y por miles y miles de tlaxcaltecas más. Hoy,con esta oportunidad, estoy más comprometida que nunca.

Seguirérecorriendo cada vereda, cada colonia, cada ejido, para encontrarnos, para conversar, para escuchar y fincar un compromiso de trabajo conjunto.

Gracias por su amistad, por su cariño, y por todo el amor que inspira mi trabajo.

¡VAMOS BIEN Y HACIA ADELANTE!

VAMOS BIEN, VAMOS JUNTOS Y CON LA TOTAL CONVICCIÓN DE QUE PRONTO, MUY PRONTO, HABREMOS DE ASUMIR UN GRAN RETO.

¡EL RETO DE LLEVAR A TLAXCALA A LA ALTURA DE SU GRANDEZA, A LA ALTURA DE SUS SUEÑOS Y ANHELOS DE TODAS Y TODOS LOS TLAXCALTECAS!

¡VAMOS JUNTOS!

¡VIVA MÉXICO!

¡VAMOS JUNTOS!

¡VIVA TLAXCALA!

¡QUE VIVA TLAXCALA!