Exige Lorena Cuéllar medidas para garantizar seguridad de niñas y niños en centros de atención infantil en caso de incendio


Lorena Cuéllar

Intervención en tribuna de la senadora Lorena Cuéllar Cisneros, del Grupo Parlamentario del PRD, para presentar iniciativa con proyecto de decreto para reformar la Ley General de Prestación de Servicios para la Atención, Cuidado y Desarrollo Integral Infantil.

 

Lorena Cuéllar Cisneros, (LCC): Muchas gracias, senador presidente.

 

Con su permiso, compañeros senadores:

 

En la memoria de las y los mexicanos, quedará el 5 de junio de 2009 como el día en que ocurrió una de las peores tragedias de nuestro país: el incendio de la Guardería ABC, donde fallecieron 49 niños y 76 resultaron heridos, todos de entre cinco meses y cinco años de edad.

 

A la fecha, se nos ha dado a conocer como probable causa, el haberse propagado un incendio de una bodega contigua, propiedad del Gobierno del estado de Sonora.

 

De acuerdo con la asociación Movimiento Ciudadano por la Justicia “5 de Junio”, tomando como base los peritajes realizados en la bodega señalada, puede reconocerse que el origen del fuego fue un sobrecalentamiento de una toma de energía eléctrica, aunque también se ha sospechado que el incendio pudo haber sido provocado de forma intencional.

 

El caso es que a la fecha, no hay ninguna persona bajo proceso judicial por estos acontecimientos, pues de un total de 19 funcionarios involucrados, la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha exonerado a todos.

 

Bajo este contexto, un tema salta a la vista de manera inmediata: la exigencia de garantizar condiciones para la atención y cuidado de niñas y niños en dichos centros de atención.

 

A partir de 2009, presentaron varias iniciativas con la intención de subsanar las deficiencias en cuanto al cuidado y seguridad de las estancias infantiles, todas, al ser dictaminadas en su conjunto, dieron forma a la Ley General de Prestación de Servicios para la Atención, Cuidado y Desarrollo Integral Infantil, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 24 de octubre de 2011.

 

La publicación de dicha ley constituyó un avance importante para garantizar que las condiciones de prestación de servicios para la atención, cuidado y desarrollo integral infantil sean de calidad, sin embargo la aplicabilidad  ha sido limitada y muchas estancias siguen funcionando sin los apropiados niveles de seguridad.

 

Cabe mencionar que la Ley retomó puntos muy importantes contenidos en una norma oficial mexicana previamente establecida, en relación a las medidas de seguridad  con las que cuentan las estancias infantiles.

 

Dicha norma, exige entre otras condiciones, que los establecimientos, además de cumplir con lo dispuesto en la Ley de Protección Civil, deberán observar, disposiciones en función de su capacidad instalada y asimismo medidas de seguridad frente al riesgo de incendios y debiendo ser obligatoria su observancia y por ende, necesarios organismos que garanticen la certificación y un medio viable para el mecanismo.

 

Sin embargo, a pesar de que la norma está establecida desde el 2011, hoy en día su aplicación es sólo opcional y no se revisa con detenimiento en materia de incendios, de ahí que exista un riesgo potencial de accidentes por su falta de prevención y observancia.

 

De acuerdo con la Federación Latinoamericana de Quemaduras, el 70% de las quemaduras se presentan en niñas y niños y la mayoría de estas requieren hospitalización siendo las causas más comunes las quemaduras por escaldadura o líquidos calientes, fuego, electricidad y químicos.

 

De acuerdo a datos de la Secretaría de Salud, en México se reportaron 109 mil 479 casos de quemaduras en el año de 2007 y en 2008 se registraron 114 mil 385.

 

El problema es tan grave que hoy las quemaduras son la causa número 11 de muerte en México en niñas y niños de 1 a 4 años de edad, de acuerdo a datos del Instituto para la Medición y Evaluación en Salud.

 

Gracias a la inclusión del tema en el debate público, diversos actores han tenido la sensibilidad y el sentido de la responsabilidad necesario para establecer convenios con expertos que por años han trabajado el tema, tal es el caso de la Fundación Michou y Mau.

 

A partir de su creación, la Fundación Michou y Mau opera como una organización no lucrativa destinada a la asistencia y prevención de quemaduras en niñas y niños mexicanos.  Según estipulan en su sitio web, su misión es “que ningún niño mexicano con quemaduras severas, muera por falta de una oportuna atención médica especializada”.

 

De su experiencia en el tema, esta fundación ha establecido convenios con diversas autoridades, entre las cuales se encuentra el Gobierno de Naucalpan, que junto con el DIF local, ha coadyuvado a la certificación de 15 estancias infantiles.

 

Dicha certificación implica, entre otra cosas, la validación de la efectividad de los protocolos de evacuación, revisión de instalaciones de gas y eléctricas, y verificación de existencia de cortafuegos.

 

En cuanto al Poder Ejecutivo, el DIF nacional a través de su presidenta, ha impulsado la certificación de estancias infantiles operadas por el DIF en Quintana Roo, en el estado de Hidalgo y en el Estado de México.

 

Desafortunadamente estas certificaciones no son obligatorias en todos los centros de cuidado infantil, razón por la cual, prácticamente todos ellos operan en dudosas condiciones que garanticen la seguridad especialmente ante accidentes relacionados con fuego e incendios.

 

La propuesta central de esta iniciativa busca que se garantice que todos los centros de cuidado infantil cuenten con una certificación contra incendios que sea otorgada por el Estado, que es el responsable de velar por los derechos humanos de las y los niños, incluyendo su derecho a la salud y a la seguridad.

 

Para que esta propuesta sea viable, será importante considerar que los gastos asociados se contemplen en el presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2015.

 

Considerando los tiempos y costos que se requerirán para certificar a todos los Centros de Cuidado infantil, esta propuesta busca que a largo plazo se certifique a todos los centros de cuidado infantil, empezando por las estancias que determine el DIF Nacional, dando prioridad a las zonas en donde habita una mayor proporción de población en vulnerabilidad.

 

Un tema trascendental como la seguridad de nuestras niñas y niños debe supeditarse a la voluntad política de los gobernantes, por lo que es imprescindible que la certificación antiincendios sea requisito indispensable para operar centros de cuidado infantil.

 

Las tragedias ocurren en los momentos menos esperados, y como sociedad no podemos presenciar acontecimientos tan dolorosos una vez más.

 

Los invito, compañeros a que se sumen a esta propuesta.

 

Es cuanto, señor presidente.