Eficacia de gobierno y autonomía financiera quedaron pendientes en reforma política del DF, afirma Mario Delgado


  • Se perdió la oportunidad para que la ciudad pudiera decidir sobre su financiamiento y tener una estrategia distinta, asegura

 

Durante la discusión de la reforma política del Distrito Federal, se perdió la oportunidad de dotar de verdadera autonomía financiera a la Ciudad de México, así como de garantizar la eficacia de su gobierno, sostuvo el senador Mario Delgado Carrillo.

 

Durante la presentación del libro “Hacia una Constitución para la Ciudad de México”, realizada en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, el senador por el Distrito Federal indicó que es inexistente una autonomía política plena si no se cuenta con una autonomía financiera.

 

“Se perdió la oportunidad para que la Ciudad pudiera decidir sobre su financiamiento y tener una estrategia distinta en la planeación urbana, en la planeación de infraestructura, en esta ciudad no hay planeación a mediano ni largo plazo, justamente porque la variable de financiamiento es una variable que está sujeta a los equilibrios políticos y a las coyunturas de fin de año”, informó.

 

Además, Delgado Carrillo subrayó que se debe analizar la eficacia de gobierno y cómo influirá la nueva Constitución de la Ciudad de México para que la provisión de servicios sea más eficiente y oportuna.

 

En ese tenor, el senador apuntó que las alcaldías estaban vistas como el nivel de gobierno más cercano a los ciudadanos que se planteaba en esta reforma, y el cual era una gran oportunidad para tener una figura evolutiva del municipio.

 

“Me parece que la solución que se da está más enfocada en resolver el punto de vista de falta de representación política en lo que eran las delegaciones, es decir, establecer una especie de cabildo para que fuera más plural, para que no hubiera un gobierno unipersonal como lo es el delegado, sino que tuviera equilibrio, un balance y creo que ahí se va a lograr porque esta especie de cabildo, estos consejeros que se van a tener tienen facultades importantes, es un contrapeso real de lo que será el alcalde”, indicó.

 

No obstante que consideró que la reforma se queda corta en cuanto a establecer las facultades y atribuciones de las alcaldías, reconoció que en los trabajos de la Asamblea Constituyente se están dando iniciativas que puedan facultar a esta instancia de gobierno para ser más eficientes y cercanas a la ciudadanía.

 

Asimismo, el senador enfatizó que la reforma constitucional dejó pendiente para el Congreso de la Unión los temas de régimen de capitalidad y el desarrollo metropolitano del Valle de México, que no son materia del Constituyente.

 

En ese sentido, propuso la coordinación entre la Asamblea Constituyente y el Congreso de la Unión para analizar los alcances que permite la reforma política en estas dos materias para generar propuestas que propicien el desarrollo de la Ciudad.

 

“Mi propuesta en el Constituyente es, que en el momento que termine el Constituyente, que se tengan dictámenes, tengamos los lineamientos generales que den pie a estas dos iniciativas en el Congreso de la Unión y que podamos potencializar la autonomía de la ciudad y el desarrollo metropolitano”, finalizó.

 

 

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