A los corruptos que se les aleje de una vez y para siempre del dinero de los mexicanos: Zoé Robledo


Propone muerte civil a funcionarios que reincidan en actos de corrupción

   

Como una medida más para combatir la corrupción en el país, el senador Zoé Robledo presentó una iniciativa para aplicar la “muerte civil” a todo funcionario público o particular que haya reincidido en actos de corrupción.

 

“Estamos planteando la muerte civil para los funcionarios por una razón, hoy la pena máxima por un acto de corrupción es la inhabilitación por 20 años, con esta propuesta la idea es que aquella persona que cometa por segunda ocasión un delito relacionado con un acto de corrupción sea inhabilitado de manera permanente de la vida pública”, expresó.

 

En este sentido, el legislador por el estado de Chiapas apuntó que la propuesta tendría consecuencias efectivas en contra de los corruptos como la inhabilitación definitiva para desempeñar empleo, cargo o comisión públicos, así como para participar en adquisiciones, arrendamientos, servicios u obras públicas, lo mismo que concesiones de prestación de servicio público o de explotación, aprovechamiento y uso de bienes de dominio de la Federación.

 

“Así como a los pirómanos se les aleja de los cerillos y los encendedores, a los  corruptos que se les aleje de una vez y para siempre del dinero de los mexicanos”, sostuvo Zoé Robledo.

 

El senador chiapaneco también reiteró que el responsable de actos de corrupción quedará inhabilitado para ejercer los derechos políticos establecidos en el artículo 35 constitucional, así como para representar a personas jurídicas.

 

Además de que “procederá la suspensión de derechos para ejercer profesión, oficio, autorización, licencia o permiso, relacionado con las actividades relacionadas con las conductas ilícitas que dan origen a la condena”.

 

El legislador comentó que de alguna forma somos muy intolerantes con la corrupción, pero muy flexibles con el corrupto y es cuestión de tiempo para que el señalado, que quizá únicamente fue exhibido mediáticamente, vuelva a aparecer en otro cargo público o en los espacios de la vida pública como si nada hubiera pasado.

 

Ante este panorama, Zoé Robledo consideró que si el problema de la corrupción en México es severo, es hora de que su solución sea equivalentemente rigurosa y severa en contra de los corruptos al aplicarles la muerte civil para que no vuelvan a corromper.

“Muerte civil, pues, para los corruptos, para que no vuelvan a corromper. El corrupto generalmente, la corrupción no se cura; la muerte civil, creemos que es la medicina que necesita el Estado mexicano para erradicarlos de tajo y de raíz, de una buena vez y para siempre”, finalizó.