Pronunciamiento del Grupo Parlamentario del PRD ante el triunfo del Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos el pasado 8 de noviembre


Pronunciamiento del Grupo Parlamentario del PRD ante el triunfo del Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos el pasado 8 de noviembre.

 

Ante el triunfo del candidato Republicano Donald Trump en las pasadas elecciones del 8 de noviembre en Estados Unidos, el escenario cambió y no para bien. Lo importante para México será una redefinición pronta de nuestra política exterior con Estados Unidos y con el resto del mundo.

 

No podemos permitirnos acciones de pánico que nos lleven a la parálisis o al miedo. Tampoco podemos minimizar la situación, pensar que no pasará nada, que todo fue una estrategia para ganar votos. Mucho menos podemos esperar un comportamiento magnánimo del nuevo Presidente norteamericano.

 

Ante esta nueva etapa, caracterizada por la incertidumbre, el Grupo Parlamentario del PRD en el Senado de la República, considera que México debe definir una política exterior de Estado.

 

Debemos hacerlo de una manera conjunta y con prioridades claras. No es momento de achicarse frente al triunfo de un personaje como Trump, sino contribuir a la creación de una ruta para enfrentarlo.

 

Los ejes de esta nueva política exterior deben considerar lo siguiente:

 

Primero: con firmeza, debemos decirle a un Trump presidente lo que no le pudimos manifestarle a un Trump candidato. Son cuatro cosas: que no le permitiremos que ofenda ni a nuestro país, ni a nuestra gente; que estamos en contra de la construcción de cualquier muro fronterizo; que condenamos cualquier deportación masiva de mexicanos y que no permitiremos la incautación de remesas.

 

Segundo: sabemos que la primera consecuencia del triunfo de Trump será el probable incremento de muestras de discriminación contra nuestros compatriotas. La población de origen mexicano en Estados Unidos enfrentará una situación de vulnerabilidad nunca antes vista. Nuestros compatriotas deben tener claro que el Estado mexicano, sus poderes públicos y su servicio consular y diplomático les brindaran toda la ayuda necesaria.

 

Tercero; el Gobierno mexicano debe generar una estrategia y un plan de acción inmediato para atender los efectos del triunfo de Trump en la franja fronteriza y para enfrentar los efectos económicos, como la depreciación del peso frente al dólar, el retiro de inversiones y la incertidumbre bursátil.  Así como establecer un plan ante una muy probable revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

 

Cuarto: el triunfo de Trump es una amenaza global, por eso México debe buscar diversificar sus relaciones con otras naciones y zonas afectadas por el resultado de las elecciones en Estados Unidos. Me refiero a buscar aliados en Europa, Asia y Latinoamérica para detener la especulación y generar una integración con una posición de Estados Unidos, diametralmente diferente a la actual.

 

Asimismo, ante las pretensiones bélicas de la nueva administración estadounidense será necesario redefinir nuestro papel en la promoción de la solución pacífica de los conflictos.

 

Los estadounidenses votaron. Respetamos su decisión, al final del día tienen en Donald Trump al presidente que merecen; sin embargo, México y el resto del mundo no tienen por qué resignarse a padecer a un personaje como Trump. Tal vez, esta noche larga y llena de dudas sea el preámbulo de un cambio sustancial en la política mundial.

 

Senador Miguel Barbosa Huerta

 

Coordinador Parlamentario

 

0-0-0