Propone Benjamín Robles que únicamente el Coneval determine los criterios para la medición de la pobreza


Intervención en tribuna del senador del PRD, Benjamín Robles Montoya, para  presentar la iniciativa con proyecto de decreto por el que se adiciona un último párrafo al artículo 33 de la Ley del Sistema Nacional de Información Estadística y Geográfica.

 

Benjamín Robles Montoya, (BRM): Muchas gracias, senadora presidenta.

 

Compañeras y compañeros.

 

Con afirmaciones que rayan en la sinrazón, el titular del INEGI, Julio Alfonso Santaella, ha venido sosteniendo que he venido mejorando el ingreso de los hogares mexicanos.

 

Santaella así los dio a conocer en un boletín de prensa a mediados de julio y casi a finales en una comparecencia que también tuvo aquí en el Senado de la República.

 

Santaella aseguró que los trabajadores y que las familias encuestadas tienden a declarar menos ingresos de los que reciben. Esto significa, eso es la opinión clara de un servidor, que según el INEGI, los ciudadanos tienden a ser ciudadanos, eso es lo que nos quiere decir, pues afirma que la cura para eliminar esa discrepancia entre la verdad y la mentira el INEGI dice que la resuelve en la aplicación de una metodología de presión en contra de los encuestados para obtener los datos solicitados.

 

Esto incluye el regreso de los encuestadores a los hogares para validar la información. Bajo esos nuevos criterios de lo que debe de ser una encuesta, el INEGI, queda claro que la convirtió ya en un tipo de interrogatorio inquisitorio.

 

Y ha sido con este tipo de métodos, compañeras y compañeros, que lograron demostrar en documentos, en informes, la supuesta mejoría en los datos que están recabando.

 

Porque según los nuevos cálculos de ellos, se deduce que el número de pobres en México podría haber llegado a una disminución de casi 9 millones de personas.

 

INEGI oficialmente consiguió, por ejemplo, que en Puebla el ingreso de los hogares creciera en un 60 por ciento; según el INEGI, en Chihuahua creció en un 40 por ciento; según Santaella, el Oaxaca, dice, que se tenga ya un promedio actualmente mensual de ingresos del orden de los 9 mil 571 pesos, es decir, 319 pesos diarios, cómo se ve que no conoce Oaxaca.

 

Cuando en la realidad hay 1.3 millones de trabajadores en la informalidad, cuando el número de pobres sin duda ha crecido en más de 300 mil personas en los últimos años y cuando 300 mil oaxaqueños ganan menos de un salario mínimo, por lo tanto nosotros decimos que las mentiras que viene planteando el INEGI vienen como producto de esta información y ahora resulta que en México mucha de la población –la mitad, según el INEGI- vive ya debajo de la línea de pobreza.

 

Es falso, pero lo que queda claro es que este plan con maña del INEGI tiene como objetivo justificar los brutales cortes del gasto social asignando menos recursos a los que tienen menos como ya se ve en el recorte de esos 239 mil millones de pesos para el presupuesto 2017.

 

Por eso, senadora presidenta, aquí yo sostengo que hay un atropello a la dignidad, un atropello a la inteligencia humana, pero también un atropello a la legalidad toda vez que de acuerdo a la Ley General de Desarrollo Social, promulgada, como lo recordamos todos, en el 2004, se creó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, el Coneval, con la finalidad de garantizar la medición del impacto y la evaluación permanentemente de la política de gasto social.

 

Según la ley citada, Coneval es explícitamente la institución que establece los lineamientos lineamientos y criterios para la definición, para la identificación y la medición de la pobreza, garantizando la transparencia, objetividad y rigor técnico en dicha actividad.

 

Porque tiene que ver con el tema, por otra parte destaco, para hacer un poco de memoria, que en abril de 2008, se promulgó la Ley del Servicio Nacional de Información y Estadística y Geografía, sistema del cual se hace cargo el INEGI y cuyo objetivo es realizar acciones tendientes a lograr que la información del interés nacional se sujete a principios de accesabilidad, transparencia, objetividad e independencia.

 

Información que deberá, así lo plantea la ley, generar, en colaboración con otras instituciones, según el cálculo a realizar, en este caso, pues el de los ingresos que permita medir la pobreza, debiese haberlo hecho con el Coneval.

 

Es en razón de esto y bajo estas circunstancias que sostengo que para evitar lo que no ocurrió así, y que porque el INEGI justificó su actuar en argucias e imprecisiones legales que vengo a presentar esta iniciativa que tiene como propósito incorporar a una institución muy importante en este contexto.

 

Porque en efecto, tal como lo ha precisado el propio Coneval en su pronunciamiento al respecto, la modificación que hizo el INEGI resulta incongruente y esa incongruencia se observa, sólo por poner unos ejemplos, en el anuncio que el incremento real del ingreso corriente de los hogares  a nivel nacional aumentó del 11.9 por ciento.

 

Por lo tanto, nosotros consideramos en esta iniciativa, señora presidenta, que para lograr la defensa de la economía familiar, vengo a presentar esta iniciativa para que sea el Coneval, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, quien determine las normas relativas a la información que produzca y requiera para el cálculo de la pobreza y ninguna otra institución podrá hacer esta labor de acuerdo como se presenta en la norma escrita.

 

Esta iniciativa que ampliamente la detallo en lo que hoy aparece en la gaceta y que quisiera rogarle, senadora presidenta, me obsequie para que también la misma iniciativa sea incorporada al diario de los debates.

 

Es cuanto.

 

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