Zacatecas, ¿muestra del futuro electoral? / Revista Siempre


El próximo 5 de junio se llevarán a cabo en diferentes entidades de nuestro país elecciones para elegir gobernadores, diputados locales y presidentes municipales. La elección de Zacatecas es particularmente interesante, ya que nos muestra características que observaremos para la elección presidencial de 2018: un PRI con un candidato débil que convence poco; un candidato de Morena competitivo; un candidato del PAN-PRD lastimado por la división del partido al que pertenece y la contraoperación interna; el PT compite solo; dos candidatos independientes y un candidato que representa a un partido político de reciente creación (Encuentro Social), vocalista de la Banda Jerez, que de acuerdo con la última encuesta registra un crecimiento importante.

Esta ecuación nos muestra que la atomización de la oferta política le es funcional al PRI. Por ejemplo, en el proceso electoral de 2010, la coalición PRI-PVEM-Nueva Alianza obtuvo 43.20% de la votación total, frente a sólo tres competidores: la coalición PRD-Convergencia (23.23%); PAN (16.96%) y PT (13.90%).

 

A diferencia de hace 6 años, hoy el PRI compite contra seis opciones políticas diferentes: PAN-PRD; Morena; PT, Encuentro Social y dos candidatos independientes. Frente a esta diversidad de opciones es predecible que en la elección del próximo 5 de junio el PRI alcance una votación menor a la obtenida en la elección de 2010 (43.20%). La oposición, en específico la izquierda, frenará su crecimiento. En la última elección a gobernador, la izquierda en su conjunto obtuvo 37.13% de la votación total; en 2004 alcanzó una votación de 49.16%, mayor a la registrada en 2010 por el PRI. Esta misma tendencia se observó en la elección para gobernador en 1998, cuando la izquierda logró casi 47% de la votación total.

En la elección actual que se vive en Zacatecas es de destacar la figura de Rafael Flores, quien ha vencido diversos obstáculos: una candidatura validada en el Tribunal de Justicia Electoral del Estado de Zacatecas después de que la Comisión Nacional Jurisdiccional del PRD había declarado nulo el proceso electoral de su consejo estatal; un trabajo por esquiroles de actores en el interior del partido y serias limitaciones económicas. Pese a ello, Rafael Flores sigue siendo un candidato en crecimiento en la intención de voto, pues ha pasado de 12% en el mes de abril a 21% en los últimos días. Es decir, en menos de un mes el candidato de la coalición PAN-PRD ha crecido casi 10%, que aunado a un buen arranque de campaña y a una visión clara sobre cómo gobernar Zacatecas, se perfila como el próximo gobernador de este estado.

La elección de Zacatecas nos invita a reflexionar y revisar los parámetros de cálculo político.

En este ejercicio observaremos cuáles son los parámetros que actualmente definen una elección y no el paradigma tradicional que ya está agotado. El papel de las encuestas, las estructuras y la oferta electoral no son tan determinantes como las emociones, la aversión social y personalidad de los candidatos. Podremos evaluar también la figura de los candidatos ciudadanos “competitivos” y su posibilidad de crecimiento real, por lo que no sólo el resultado, sino el proceso en sí mismo será sin duda en una elección importante.

El otro elemento fundamental en esta elección es el futuro del PRD y cómo podrá funcionar en esta nueva ecuación política. Observamos un PRD que crece pero no necesariamente sobre su clientela habitual, que en gran parte ha sido absorbida por Morena o por los candidatos ciudadanos. El punto es si el PRD podrá encontrar su nuevo espacio o los sectarismos y el esquirolaje podrán más que un proyecto político de izquierda.