- Reprobable, cualquier acto extremista en contra de la población civil.
“Tras los lamentables atentados terroristas ocurridos en las primeras horas de este martes en Bruselas, Bélgica, donde 34 personas perdieran la vida, quiero expresar mis más sinceras condolencias a los familiares de las víctimas, mi solidaridad y apoyo a quienes resultaron lesionados en estos actos de terrorismo que repruebo enérgicamente” expresó el Senador Rabín Salazar, Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Europa.
Este hecho ha marcado la historia de Bruselas, sede de los principales organismos de la Unión Europea, en donde se sufrió el peor ataque terrorista de la historia del Reino de Bélgica.
Diversos medios de comunicación informaron que DAESH, quienes se autodenominan “Estado Islámico”, se adjudicaron estos ataques, situación que torna en un punto delicado la seguridad mundial.
Este ataque es una afrenta contra Bélgica, contra la Unión Europea y contra el mundo, señaló, ya que es allí donde se encuentra el Consejo Europeo, la Comisión Europea (Edificio Berlaymont), el Consejo de la Unión Europea (Secretariado general) y el Parlamento Europeo, así como las representaciones diplomáticas de los 28 estados miembros.
La sociedad internacional ha externado su solidaridad al condenar esta serie de actos terroristas, pero también ha mostrado su preocupación al ver la paz y la libertad vulnerada por un grupo de extremistas islámicos, sobre todo en la Unión Europea.
Actualmente resulta indispensable que entre las naciones exista solidaridad, además de un sentido de responsabilidad por parte de todos los Estados de consolidar y mantener la paz y la estabilidad.
Es por ello que hoy el llamado es a todos los gobiernos del mundo, para atender de distinta manera las problemáticas que generan conflicto y división, recordando los acuerdos establecidos en la reciente cumbre del G-20 en Turquía, señaló el Senador Rabin Salazar, donde México se pronunció en contra de “todos los métodos y prácticas del terrorismo” e hizo hincapié en que el terror “no debe ser asociado con ninguna religión, nacionalidad, civilización o grupo étnico”.
Todo esto quedo de manifiesto en la última reunión de la Comisión Parlamentaria Mixta México-Unión Europea, celebrada en febrero pasado, donde se abordó el tema de la lucha contra el terrorismo y expresamos en la Declaración Conjunta, el compromiso de seguir colaborando para fortalecer las medidas de prevención y combate al terrorismo, al igual que aumentar la cooperación para hacer frente a esta amenaza y sus diversas manifestaciones.
Esta lucha debe llevarse a cabo con respeto al derecho internacional, a los principios fundamentales de la democracia, a los derechos humanos y al Estado de Derecho, con el objetivo de evitar dañar los valores y las normas de la democracia que los terroristas buscan echar abajo.
“Debemos reforzar la unión para liberar al mundo del terrorismo, terminar con las barreras nacionales y el odio, luchemos por un mundo en el que la bandera de la paz y la conciencia sea el estandarte de las naciones”, finalizó.
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