Tajamar huele a corrupción / Excélsior


En sólo 48 horas se arrasaron 22 hectáreas de manglares y selva, donde vivían cientos de especies de flora y fauna.

Se trata del llamado espacio Tajamar, que se encuentra en el municipio de Benito Juárez, mejor conocido como Cancún, en Quintana Roo, y gracias a las protestas sociales, México pudo darse cuenta del ecocidio que se ha llevado a cabo.

En este sitio se planea la construcción de un complejo inmobiliario, “Malecón Tajamar”, uno más que se suma al panorama habitual de esta zona del Caribe mexicano. Sin embargo, éste ha llamado la atención por el grado de agresión al medio ambiente. No son pocas las fotos donde vemos animales mutilados y muertos, flora destruida y mucha desolación por parte de los activistas.

La denuncia de activistas llegó hasta las autoridades federales y escaló a nivel global por medio de las redes sociales. Al día de hoy, un juez había ordenado la suspensión temporal de los trabajos, y varias organizaciones han pedido la suspensión definitiva.

Es realmente preocupante que autoridades que deberían ser capaces de velar para que el desarrollo no afecte a los ecosistemas, avalen este tipo de acciones. Para Fonatur, Profepa y Semarnat todo está en orden, como si lo único válido fuera cumplir un papeleo, sin mayor consideración.

¿En qué momento nos sentimos tan alejados de la noción de comunidad que no concebimos que la destrucción de ecosistemas nos afecta a todos?, ¿bajo qué criterios las autoridades consideraron viable construir un complejo inmobiliario a costa de un territorio tan rico de flora y fauna?, ¿hay estudios de impacto ambiental que avalen el uso de estas zonas para imponer un complejo habitacional?, ¿cuál fue exactamente el análisis costo-beneficio que se realizó para autorizar esto? Así como están las cosas, el olor a corrupción es fuerte y flota en el ambiente.

¿Y cuál ha sido la reacción de las autoridades locales? Para Roberto Borge, gobernador de Quintana Roo, las obras se realizan con apego a la ley, y se cuenta con los permisos correspondientes. ¿Dónde quedó la visión del Partido Verde, que fue parte de la alianza electoral que hoy gobierna? Repiten en sus promocionales que están comprometidos con la protección del medio ambiente, pero las acciones emanadas de su ejercicio son muy diferentes.

¿Cómo podemos dar un cauce institucional a las protestas sociales y ayudar a detener estos abusos en contra del medio ambiente? Pues exponiendo a los responsables, con nombre y apellido, e investigando a fondo por qué se autorizó esta destrucción.

En el Senado vamos a presentar un Punto de Acuerdo para exigir a las autoridades federales que se detenga esta construcción y se presente un plan de reparación y sustentabilidad para la región. También lanzamos la petición en www.change.org“¿Quiénes aprobaron la destrucción de Tajamar y por qué lo hicieron?” para identificar claramente a los responsables, a los beneficiarios, y exigir explicaciones precisas. Ojalá, amable lector, nos favorezcas con tu firma.

En este caso, probablemente existan corruptelas y complicidades. Es necesario exhibirlas para remediarlas. Debemos entender que siempre que existe un acto de corrupción hay terceros afectados, el beneficio inmediato que conlleva para unos cuantos, termina perjudicando a muchos.

Ya no vivimos en un país donde el enojo se calla. Tenemos que fortalecer nuestra acción colectiva para borrar la indiferencia que nos ha caracterizado en el pasado. Tajamar es un asunto de nuestro futuro, donde hay que dejar claro que el desarrollo no debe estar peleado con la conservación.

APUNTE JAGUAR

El precio del dólar sube y el ánimo de la gente baja. Esta variación depende en gran medida de factores como el fortalecimiento económico de Estados Unidos, así como del papel de productores de petróleo en Medio Oriente quienes, a la par de la desaceleración de China, empujan el precio del petróleo a la baja.

Tenemos que entender, de una vez por todas, que la economía petrolizada ha llegado a su fin. Es momento de gastar cada peso del dinero público con efectividad y pulcritud sin precedentes. Es momento de cero corrupción y máxima rendición de cuentas. Por otro lado, como sociedad debemos generar la mayor productividad, esfuerzo, trabajo y creación de valor. De ello depende nuestra independencia a choques externos y la posibilidad de ser el jugador global que estamos convocados a ser como nación.

Twitter: @RiosPiterJaguar