El verdadero «punto ciego» es la incapacidad del gobierno que «no vio decenas de camiones que cada día llevaban y sacaban materiales a una casa con una gran bodega construyéndose en un monte despoblado donde se podía ver perfectamente el reclusorio de máxima seguridad del Altiplano y viceversa», señaló la Senadora Angélica de la Peña, al comentar las declaraciones del Secretario de Gobernación quien justificó que el derecho a la intimidad permitió que se les fugara el Chapo Guzmán justo cuando «ejercía su derecho a la intimidad».
Afirmó que en un Estado de Derecho es inadmisible que se argumente que la protección de los derechos humanos de las personas internadas en centros de privación de libertad propició la evasiónde alta peligrosidad,“es un argumento sin sustento porque es evidente que fue resultado de la corrupción de funcionarios por omisión o comisión y fallas en la aplicación de los protocolos de funcionamiento en una instalación de máxima seguridad”, agregó.
Lamentó que resurja aquella alusión que decía que “los derechos humanos son de los humanos, no de las ratas” como una justificación de los errores cometidos por las autoridades y que facilitaron un escape que resultó espectacular y de ese nivel, por lo que el castigo debe ser para toda la estructura jerárquica de la Administración Pública Federal y no solo para los funcionarios del reclusorio o del órgano desconcentrado, pues resulta increíble la versión oficial de que nadie percibió nada por más de un año que duró la excavación del túnel.
La legisladora del PRD resaltó que la Comisión Nacional de Seguridad en 2013 realizó un informe que detectó fallos inaceptables en algún Centro Penitenciario donde se encuentran internos de alta peligrosidad y que cuentan con recursos económicos suficientes para planificar evadirse.
Además se trata de la crónica de una fuga, indicó, ya que el personal de vigilancia y directivo no hizo nada después de que se permitió el ingreso de una mujer con documentación falsa, quien visitó precisamente a El Chapo, lo cual debió haber encendido las alarmas en torno a este personaje, entre otros indicios como la construcción estratégica de la bodega a kilómetro y medio de la celda del Chapo.
De la Peña Gómez coincidió en que el Sistema Penitenciario Nacional requiere de una reingeniería total e inmediata, además de personal profesional con altos estándares en derechos humanos, bien remunerados y en permanente rotación, también urgen los controles internos que prevengan corrupción, y si la hay se castigue con todo el rigor de la ley; hoy no puede ocultarse que el gobierno federal está en una grave crisis de credibilidad sin precedentes y se requiere cambios urgentes en los más altos niveles, finalizó la senadora Angélica de la Peña.
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