Discurso pronunciado por el senador Miguel Barbosa Huerta, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, durante la reunión del senador Miguel Barbosa Huerta, presidente de la Mesa Directiva del senado de la República, con el vicepresidente de la República Argentina, Amado Boudou.
Miguel Barbosa Huerta (MBH). Yo los saludo primero a todos, a todas, les doy la bienvenida a esta delegación de distinguidas y distinguidos ciudadanos de la República de Argentina.
Bienvenido senador Armando Boudou. Él es Presidente del Senado de la República de Argentina y Vicepresidente de su gobierno.
En verdad nos sentimos muy honrados con tu presencia. Es muy destacado el papel que desempeñas.
Estamos atentos al desarrollo de tu país, del gobierno, el tuyo, y tenemos muy buena relación con la embajadora de Argentina en México. Con ella hemos tenido varias experiencias en eventos que el Senado desarrolla.
Bienvenidos a la comitiva que acompaña esta mañana al señor senador Amado.
Decirles que el Senado es el órgano del Estado Mexicano que evalúa la política exterior que desarrolla el gobierno mexicano, y que permanentemente formamos parte de interparlamentarias, de encuentros, de desarrollo de eventos bilaterales, multilaterales, como lo será la Interparlamentaria México-Argentina, que va a llevarse a cabo a partir de este lunes.
Yo no podré estar encabezando la delegación, te ofrezco una disculpa, por la condición de discapacidad que tengo que ahora tuve una pequeña afectación, y no podré estar por esa razón. Ofrezco a ustedes y al gobierno argentino la disculpa más amplia por no poder asistir, pero habrá una delegación encabezada por el Vicepresidente de la Mesa Directiva, el senador José Rosas Aispuro. Estarán todos por allá.
Con la agenda que se ha preparado, con la agenda hay que desarrollar los diferentes temas de interés en esta relación estratégica y en este vuelco que ha dado la visión de la política exterior mexicana para voltear al sur, para voltear al sur. Es el relanzamiento de una visión que se tuvo por una década de sólo mirar al norte.
Hoy estamos viendo al sur, estamos viendo a Latinoamérica y nos interesa desde el Senado contribuir a la consolidación de esa nueva estrategia de la política exterior mexicana.
Nos acabas de compartir, como Senado, las experiencias que se han tenido en Argentina sobre el tema de las pensiones de los adultos mayores, de la ampliación de las prestaciones, de las coberturas que se otorgan a ciudadanas y ciudadanos que han llegado a la tercera edad; y desde luego son insumos que nos sirven para un tema pendiente y de reto para todos los estados del mundo.
Recordemos que la propia economía europea, entre las razones de su desfondamiento, por no decir quiebra, tuvo que ver con el hecho de no tener la capacidad de fondear la seguridad social, el sistema de seguridad social, entre ellos las pensiones sobre adultos mayores, pero el tema de la seguridad social.
Reflexionábamos el día de la inauguración de esta semana que, repito, ya se instaló como un evento que tiene que llevarse a cabo año con año bajo la exitosa conducción de la misma, el senador Fernando Mayans.
De verdad nuestras felicitaciones, Fernando, en nombre del Senado, por este desempeño tan importante.
Reflexionamos sobre el tema general de la seguridad social y decíamos que es un derecho inalienable, es un derecho que la propia sociedad debe garantizar a sus integrantes y que tiene que ver no solamente con aquellas prestaciones que se otorgan a quienes son trabajadores, tienen una relación de trabajo formal, sino a quien no lo son.
Y qué hacemos en México con toda la población que está en los campos, que está en el agro, un agro que está en una condición muy complicada en cuanto a modernidad, tecnología, productividad y a regímenes de relaciones laborales verdaderamente feudalista, todavía parece que de la época de La Colonia; así se conoce en México la época todavía del dominio español sobre nosotros.
Entonces, es un tema de bienestar social, de bienestar social para toda la sociedad, de la plenitud del bienestar que debe desarrollarse una de muchas cosas integrales.
Y decíamos nosotros que en ese caso cuál debe ser el papel del Estado, ya no de alguno de los tres poderes, del Estado en su conjunto, no volverse temas de demagogia, de populismo, de crítica sin ninguna propuesta, sino que debe ser un tema abordado con mucha responsabilidad: el tema de la seguridad social para todas y para todos los habitantes.
¿Qué fue primero, la sociedad o el Estado, si hablamos de la forma como entendemos nuestra organización política, social, cultural, la que nos permite convivir en sociedad?
Pues fue primero la sociedad. La sociedad se organiza y forma un Estado que la gobierna, pero lo gobierna pare beneficio de la sociedad.
Entonces, ahí encontramos que la seguridad social se forma en el propósito, la esencia y la razón de la existencia del Estado. La seguridad social puede ser vista así, como la razón de la esencia de lo que es la función del Estado como autoridad.
No la encontramos de otra manera y por eso celebramos todo esto. En México hay muchos pendientes, muchísimos. El tema de las pensiones provoca histeria para los que se tocan y que se miren, de cómo podría resolverse incluso; provoca histeria, sí, por donde están cada uno de los pesos de los dineros que han sido descontados a los trabajadores.
Dónde está la posibilidad de formar seguros no solamente de pensiones, pensiones de retiro, sino los seguros de desempleo y todo lo que le permita un desarrollo pleno a la persona de cara país.
Son muchos pendientes que nos sirven mucho; hay muchas cosas que no se deciden a partir de los recursos, que no los tenemos, también debemos hablar de dónde van a salir los recursos, no la crítica que la oposición hace solamente de que falta esto, falta lo otro, bueno y de dónde van a salir los recursos.
Tiene que ir acompañada con un conjunto de políticas, de acciones, estrategias fiscales, de recaudación, que son determinantes para poder otorgar lo que sería la seguridad social.
Y bienvenidos con los elementos que seguramente serán resumidos en un texto -¿verdad Fernando?- de este asunto que nos permitirán el debate legislativo, el debate legislativo en lo que es el tema de pensiones.
Te agradezco mucho Amado; te agradezco embajadora, les agradezco a cada uno de ustedes.
De verdad estamos muy satisfechos con los logros de esta Semana, pero sobre todo honrados con su presencia.
Muy amables.
Si tienes tiempo ojalá y pudieran llevarlo a conocer nuestro Pleno.
Estamos todavía con los ajustes de último momento y están los jaloneos. Tengo que andar negociando. ¿Te parece?
¿Tenemos nosotros regalitos?
Sí. Gracias. Nos paramos.
