Agua, un factor fundamental para la gobernabilidad, seguridad nacional y para garantizar calidad de vida de todos los mexicanos: Alejandro Encinas


Intervención en tribuna del senador Alejandro Encinas Rodríguez, del Grupo Parlamentario del PRD, para presentar iniciativa con proyecto de decreto por el que se expide la Ley General de Aguas y se abroga la Ley de Aguas Nacionales.

 

Alejandro Encinas Rodríguez, (AER): Muchas gracias, Senador Presidente. Compañeras y compañeros Senadores:

 

Vengo en nombre de Senadoras y Senadores de distintos grupos parlamentarios: La Senadora Dolores Padierna; Layda Sansores; Angélica de la Peña; Ana Gabriela Guevara; Luz María Beristain; Benjamín Robles; Silvia Guadalupe Garza Galván; Manuel Bartlett; Isidro Pedraza; Luis Sánchez Jiménez; Raúl Morón; Salvador López Brito; Fidel Demédicis; Lorena Cuéllar; Rabindranath Salazar; Adolfo Romero Lainas; Armando Ríos Piter y un servidor, a dar nuestro aval a una iniciativa ciudadana que propone reglamentar el artículo 4o. constitucional, que establece: “Que toda persona tiene el derecho al acceso, disposición y saneamiento del agua para consumo personal doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible, donde el Estado garantizará este derecho”.

 

Se trata de una Ley General de Aguas, que parte del trabajo que a lo largo de 2 años realizaron 450 investigadores de distintas instituciones educativas de educación superior, junto con organizaciones de la sociedad civil, representantes comunales, ejidatarios, comités de usuarios, y que parte del principio de que el derecho al agua, al acceso al agua equitativo, suficiente y de buena calidad es un derecho humano en donde debe asumirse como un asunto del interés público.

 

El agua es un bien y un servicio público que debe garantizar plenamente el estado como un bien de la nación que proviene de la naturaleza, y por ello se propone esta iniciativa en la que quiero destacar los siguientes ejes fundamentales:

 

El primero.- El reconocimiento y restauración de los derechos del agua y territorio de los pueblos originarios.

 

La construcción de instancias de planeación ciudadana gubernamental, desde lo que son las microcuencas, hasta lo que es la gestión del agua en el ámbito nacional.

 

La implementación de planes rectores, consensados y vinculantes realizados cuenca por cuenta, con las obras y políticas requeridas para garantizar una gestión del agua de calidad y restaurando los flujos de ecosistemas a fin de eliminar los factores que están generando vulnerabilidad, e incluso, inundaciones y sequías.

 

Se plantea en esta Iniciativa el rediseño del sistema de concesiones para evitar que estas sean transferibles y que estas se ajusten anualmente a la disponibilidad real del agua.

 

Se propone la reorganización de la infraestructura hidroagrícola y el uso agrícola del agua a través de comités de consumidores, investigadores y agricultores por cuenca para poner fin al desperdicio del agua y de energía en este sector y priorizar la producción para la soberanía alimentaria.

 

Se propone la creación de un Fondo Nacional para el Derecho Humano al Agua y el Saneamiento para el financiamiento directo de proyectos auto gestionados por parte de comunidades que hoy no tienen acceso al agua o que tienen acceso a agua en condiciones de muy baja calidad, priorizando el equipamiento en los espacios públicos, particularmente en las escuelas públicas, y al mismo tiempo permitiendo la potabilización de aguas pluviales para bebederos.

 

Se propone la asignación presupuestal equivalente a por lo menos el 0.7 por ciento del Producto Interno Bruto para registrar los planes rectores y los planes municipales.

 

Se propone la creación de sistemas de agua potable y saneamiento en manos públicas y comunitarias sin fines de lucro, esto en el ánimo de fortalecer a las juntas municipales de agua y saneamiento para que garanticen una adecuada prestación del servicio.

 

Se establece como obligación para la explotación y aprovechamiento del recurso un dictamen de impacto socio hídrico ambiental para prevenir daños que son irreversibles, en ocasiones, a cuencas y acuíferos, y así facilitar la protección y buen manejo de áreas de importancia hídrica.

 

De manera particular, se prohíbe el uso de aguas nacionales para la fracturación hidráulica o la minería tóxica, que indudablemente serán de los grandes temas a debate en los próximos meses en este Senado y en todo el país.

 

Y de manera especial se plantea la creación de una contraloría social del agua como una instancia ciudadana que colaboraría con la Auditoría Superior de la Federación, con la Comisión Nacional de Derechos Humanos, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y el Ministerio Público, para poner fin a la impunidad hidrológica y ambiental.

 

Como ustedes pueden apreciar, se hace un replanteamiento total de lo que ha sido hasta ahora las políticas de gestión de este recursos que es fundamental para el desarrollo humano y el desarrollo de la actividad productiva, y esperemos contar con su apoyo, con su acompañamiento para que se generen las condiciones, para que todas las mexicanas y los mexicanos tengan acceso equitativo y sustentable al agua, para que el Estado mexicano garantice su responsabilidad en el ejercicio de esta función, y para que el recurso se utilice siempre con criterios de sustentabilidad para el desarrollo, cuidando nuestras cuencas hidrológicas, nuestros mantos acuíferos, los cuerpos superficiales de agua, porque éste, sin lugar a dudas, es el tema de temas de esta legislatura, más allá del petróleo, de la energía, el agua es un factor fundamental para la gobernabilidad, para la seguridad interior, para la seguridad nacional y para garantizar el buen desarrollo de la calidad de vida de todos los mexicanos.

 

Esperamos contar con su apoyo y esperemos que compañeros, como el Senador Hermosillo, se sumen a suscribir esta propuesta, con la cual avalamos una iniciativa presentada por ciudadanos, por organizaciones sociales y por distintos usuarios.

 

Por su atención, muchísimas gracias.