La diplomacia es el instrumento idóneo para operar las relaciones internacionales de los Estados: Rabindranath Salazar


México y la Unión Europea se vinculan por más que acuerdos comerciales y políticos, los une  historia, una cultura y valores compartidos, pero sobre todo los une la afinidad y la amistad, aseguró el senador Rabindranath Salazar Solorio.

 

“Amistad que a lo largo de la historia se ve reflejada con sus diplomáticos”, mencionó.

 

Durante el panel: La visión de los Embajadores de México en Europa, en el marco del Foro “México en el Mundo: Diagnóstico y Perspectivas de las Relaciones Internacionales”; el legislador del PRD resaltó que la diplomacia es el instrumento idóneo para operar las relaciones internacionales de los Estados.

 

El mayor exponente de esta relación de amistad, afirmó Salazar Solorio, fue el diplomático Gilberto Bosques Zaldívar quien fue cónsul general de México en París.

 

“Posición desde la cual ayudó a más de 40 mil refugiados de distintas nacionalidades ofreciéndoles residencia y nacionalidad mexicana”, señaló.

 

El legislador por el estado de Morelos, recordó que las relaciones con Europa se remontan a los años 60, cuando México intentaba diversificar sus relaciones con el exterior y los países europeos buscaban estrechar sus vínculos con América Latina.

 

“En 1975 México y la Comunidad Económica Europea, establecieron una acuerdo con el objetivo de desarrollar y equilibrar su comercio recíproco y ampliar su cooperación económica, Inspirados por su determinación de consolidar, ahondar y diversificar las relaciones para beneficio mutuo”, explicó.

 

Informó que México y la Unión Europea cuentan desde 1997 con instrumentos que han fortalecido su relación: el Acuerdo Global, el cual sienta las bases para la negociación del Tratado de Libre Comercio; el Acuerdo Interino que establece los mecanismos y el formato para lograr la liberación comercial y el Acta Final.

 

Sin embargo, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Europa sostuvo que la diplomacia es el elemento fundamental para mantener una buena relación con el Viejo Continente.

 

Y señaló que hoy en día, esa responsabilidad recae en los Embajadores mexicanos, quienes están al servicio de la sociedad mexicana y cuya meta es ser un puente de entendimiento que le permita a México beneficiarse de los vínculos y las oportunidades que ofrece Europa.

 

Resaltó que en los últimos años gracias a la labor de los Embajadores mexicanos se ha fortalecido el intercambio con Europa, no sólo en el ámbito comercial, sino en el tecnológico, educativo y turístico.

 

Finalmente, Rabindranath Salazar destacó que el gobierno austriaco nombró a una de sus calles, en el Distrito 22 de Viena, en la Ciudad de Danubio, con el nombre del Paseo Gilberto Bosques, como una forma de honrar la memoria del ilustre diplomático mexicano, quien ayudó durante la Segunda Guerra Mundial a salvar a muchos austríacos de manos del fascismo.