Con el propósito de fortalecer el Estado democrático con base en el principio de división de poderes, el senador Benjamín Robles Montoya, propuso eliminar la palabra “Supremo” que describe al Poder Ejecutivo en diversos artículos de la Constitución.
El legislador del PRD sostuvo que los mecanismos establecidos en la Constitución para el control entre poderes son insuficientes o se ejercen inadecuadamente y la figura del Presidente de la República continúa siendo concebida por muchos como la de un “ser omnipotente”.
“Por ello resulta inconcebible que nuestra propia Constitución sea origen de esta clase de ideas que exaltan a la figura presidencial, al calificar al Poder Ejecutivo como Supremo en su artículo 80”, subrayó.
A través de una iniciativa para modificar los artículo 49, 73 y 80 constitucionales, Robles Montoya argumentó que la división de poderes, la prohibición de la concentración de poderes en una sola persona y la prohibición de depositar el Poder Legislativo en una sola persona, son principios que han estado vigentes durante la mayor parte de la vida de México como nación independiente.
Por ello, “considerar que el Poder Ejecutivo es un Poder Supremo, resulta una concepción obsoleta y anacrónica que no es acorde a una democracia constitucional moderna”, agregó.
El senador por Oaxaca reconoció que México tiene un sistema tradicionalmente presidencialista donde el predominio del Poder Ejecutivo es un hecho culturalmente aceptado.
Pero, “a pesar de la tradición presidencialista, debemos reconocer que la lucha contra el autoritarismo ha logrado al paso de los años una apertura democrática en la que tanto el Congreso de la Unión como el Poder Judicial se han fortalecido, a pesar de los constantes intentos regresivos tendientes a centralizar el poder público en la figura del Ejecutivo”, señaló.
Ante el pleno de la Comisión Permanente del Congreso del Unión, el legislador señaló que el principio de división de poderes constituye uno de los pilares fundamentales de cualquier sistema democrático, pues implica la limitación del poder público para evitar su abuso.
En ese sentido, precisó que “tanto el Poder Legislativo como el Poder Judicial desempeñan hoy un papel fundamental en la viabilidad democrática del país y por esa razón es menester que desempeñen de manera efectiva una función de control y limitación del poder público”.
La iniciativa fue turnada a la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado de la República para su análisis y dictaminación.
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