Llegar al fondo de la verdad / El Universal


Para enfrentar la crisis en que se encuentra el Estado mexicano y la tragedia humanitaria que vive el país se requiere adoptar, sin demagogia ni ambigüedades, decisiones políticas y acciones concretas.

1. Conocer la verdad de los hechos en contra de estudiantes de la Normal de Ayotzinapa; deslindar responsabilidades y castigar a los autores materiales e intelectuales; así como a las autoridades y dirigentes de los partidos políticos, que permitieron la creación de una red de complicidades y la operación de grupos delictivos en la región, así como su postulación como candidatos a distintos cargos de elección popular.

2. Terminar con la impunidad. Los gobiernos federal y de los estados deben ejercer de inmediato las acciones penales en contra de los gobernadores, presidentes municipales, representantes populares y funcionarios públicos que, conforme a los servicios de inteligencia del Estado y a las procuradurías de justicia en el país, han incurrido en actos de corrupción, malversación de fondos públicos, abuso de autoridad, violación a los derechos humanos o colusión con la delincuencia organizada.

3. Eliminar el fuero constitucional en todos los órdenes de gobierno, incluido el Presidente de la República.

4. Incorporar al régimen de responsabilidades de servidores públicos a los dirigentes de partidos políticos, eliminando la opacidad y dispendio en los partidos como entidades de interés público que se financian del erario público.

5. Rediseñar las corporaciones policiacas, creando instrumentos que permitan el control parlamentario de los organismos de inteligencia del Estado y la conformación de un sistema policial nacional, con facultades, competencias y concurrencias claramente definidas. A nivel municipal para aplicar el Bando de Policía y Buen Gobierno; a nivel estatal, para atender las tareas de prevención y combate de los delitos del fuero común; tránsito y vialidad. En lo federal, disolver la Gendarmería Nacional para contar con una sola corporación: la Policía Federal Preventiva, para enfrentar los delitos del fuero federal, permitiendo la creación de policías metropolitanas por acuerdo entre los municipios o las entidades federativas que la conformen, eliminando las policías complementarias y estableciendo la prohibición a la actuación extraterritorial de las policías estatales.

6. Combatir el lavado de dinero, estableciendo una regulación más estricta en el sistema financiero y de los mercados: inmobiliario, de compra venta de oro, plata y joyas; casas de juego; casas de préstamo y empeño; casas de bolsa y de cambio.

7. Revertir la tentación centralista, replanteando la relación entre las entidades federativas y el gobierno federal, descentralizando el poder público, dotando de mayores atribuciones y recursos a los estados y municipios, bajo nuevas fórmulas en la asignación de los recursos públicos, eliminando el manejo discrecional del Ejecutivo federal en el control del gasto público.

8. Redimensionar el papel del municipio, fortaleciendo sus capacidades económicas, sus facultades ejecutivas, y flexibilizando sus formas de organización, permitiendo mecanismos de asociación municipal, regional, por comarcas o zonas metropolitanas, para instrumentar políticas y programas comunes.

9. Rectificar la política económica, recuperando las responsabilidades sociales y la rectoría del Estado en la economía, para construir un Estado de bienestar que permita revertir la desmedida concentración del ingreso y la desigualdad, favoreciendo una distribución equitativa de la riqueza nacional.

10. Establecer un plazo perentorio para el retiro de las Fuerzas Armadas de las actividades que corresponden a la autoridad civil en materia de seguridad pública. Pero sobre todo llegar al fondo de la verdad.

Senador de la República