Discurso del Senador Miguel Barbosa Huerta, Presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, en la Firma del Convenio General de Colaboración en materia bibliotecaria para establecer las bases y mecanismos de colaboración del Sistema de Bibliotecas del Congreso de la Unión con la Universidad Autónoma de Silanoa.
Miguel Barbosa Huerta, (MBH): Gracias.
Bienvenidos a todas, a todos quienes hoy nos reunimos para testimoniar la suscripción del Convenio del Congreso de la Unión y de la Universidad Autónoma de Sinaloa; para mantener un intercambio permanente entre el Sistema de Bibliotecas del Congreso de la Unión y las que corresponden a la Universidad Autónoma de Sinaloa.,
Señor rector Juan Eulogio Guerra Liera, rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, es un honor que esté con nosotros, es un honor que esté en el Senado de la República.
Señor diputado Fernando Rodríguez Doval, integrante de la Comisión Bicameral del Sistema de Bibliotecas del Congreso de la Unión, y próximo presidente de este organismo bicameral.
Senador Adolfo Romero Lainas, actual presidente de esta Comisión Bicameral del Congreso en el subsistema de bibliotecas.
Senador Juan Carlos Romero Hicks, presidente de la Comisión de Educación.
Senador Aarón Irízar López, presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos.
Senador Braulio Fernández Aguirre, compañero, amigo, apreciado senador.
Bienvenidos todos ustedes.
Esta mañana nos reunimos para poder fijar reglas, fijar condiciones de cómo hacer prevalecer el sistema de bibliotecas del Congreso de la Unión, en lazado a otra biblioteca importante del país, la de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Hay un tiempo muy especial en el tema de las bibliotecas:
O se ponen a la vanguardia en esta época de la difusión del conocimiento, o corren el riesgo de volverse anacrónicas.
En muchos textos se ha defendido la lectura; la insustituible importancia del libro en la difusión del conocimiento.
Hay clásicos, hay personas que piensan con ese clasismo y defienden la lectura a través de los libros.
Con modestia, yo soy uno de ellos. Hay que disfrutar de la lectura a través de los libros.
Pero no implica que las bibliotecas de hoy tengan todo tipo de tecnologías, todo tipo de formas de divulgación del conocimiento que complementen la mentalidad y la forma de ver el mundo de parte de los niños y de los jóvenes.
Qué hermoso es el aroma de los libros. Qué tranquilizante es estar en una biblioteca. Cómo se disfruta de ese ambiente. Porque es el concepto de la biblioteca clásica, de la biblioteca de muros altos, de cúpulas, de adornos de otra época, salones silenciosos, con un olor especial: madera vieja y sobre todo personas que se les ve disfrutando del acceso al conocimiento.
Yo, como estudiante, acudía a la biblioteca del Centro Histórico, de la Cámara de Diputados.
Ahí estudiaba muchas tardes y noches; ahí llegué a estudiar.
Ahí tuve acceso a los libros que, como estudiante pobre no tenía yo forma de comprar.
Y esa es la posibilidad que le damos a la gente a través de las bibliotecas, todas públicas, porque no hay bibliotecas privadas más que las que son propiedad personal, pero todas son públicas y afortunadamente todas son gratuitas.
Hay un gran proyecto en la Cámara de Senadores para que en un edificio contiguo a esta sede, un edificio viejo, abandonado, de color blanco, para este año arranquemos la construcción de la nueva biblioteca del Senado de la República.
Es un proyecto que ya tenemos en curso para empezar a desarrollarlo.
Tenemos los recursos; los recursos que quedan después de liquidar el adeudo que se tiene por esta sede, en el famoso fideicomiso de la construcción de esta sede.
Y esos recursos no los queremos destinar a los grupos parlamentarios; los queremos destinar a la biblioteca del Senado de la República. Es una propuesta que tenemos.
Por eso es tan importante estar en estos eventos; por eso felicito el interés de la Comisión Bicameral de Bibliotecas, de construir acuerdos, convenios, con todas las universidades del país, públicas y privadas y poder generar un sistema de vinculación que permita que en línea un estudiante, una persona pueda consultar los textos de Sinaloa, estando en el Senado de la República o los textos del Senado de la República, estando en Sinaloa.
Ese es el secreto, ese es el valor fundamental de este tipo de convenios y poder generar condiciones de alta tecnología, para poder provocar esas formas de acceso a la información y de acceso al conocimiento.
Por esas razones es por lo que legisladores, diputados y senadores, se empeñan en poder construir estos escenarios.
Nuevamente felicito al senador Adolfo Romero Lainas, a la Comisión Bicameral de Bibliotecas del Congreso de la Unión; al diputado que pronto estará en funciones, Fernando Rodríguez Doval, y al rector.
Lleve usted a la comunidad universitaria de la Universidad Autónoma de Sinaloa un saludo del Senado de la República y la reflexión de que estaremos pronto en mejores formas de vinculación, desde los contenidos de nuestros acervos bibliográficos, archivos, documentos históricos, contenidos bibliográficos, en archivos electrónicos o en toda forma de que como hoy se difunde el conocimiento.
Defendamos al libro desde las bibliotecas; defendamos el clasismo de la lectura. Sí a la tecnología, sí a todo el acceso a las nuevas formas de comunicación, pero defendamos al libro; hay muchos textos de ese sentido: defendamos al libro, porque el libro nunca va a desaparecer para quienes piensan lo contrario.
Muchas gracias y felicidades.
