Exige Lorena Cuellar a gobierno de Tlaxcala tomar medidas ante crecimiento acelerado de pobreza, desempleo y la constante pérdida del poder adquisitivo


Intervención en tribuna de la senadora Lorena Cuéllar Cisneros, del Grupo Parlamentario del PRD, para presentar un paquete de dictámenes a nombre de la Comisión de Desarrollo Social.

 

Lorena Cuéllar Cisneros, (LCC): Con su permiso, señor Presidente.

 

Compañeras y compañeros senadores:

 

En días recientes el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social presentó el índice de tenencia laboral de la pobreza correspondiente al segundo trimestre del presente año. Dicho índice muestra el porcentaje de personas que no pueden acceder a una canasta alimentaria con sus ingresos laborales, las cifras de dicho reporte muestran que a nivel nacional, de 2010 a la fecha, se dio una fuerte caída en el poder adquisitivo del salario de las y los mexicanos, pasando de 1, 703.40 pesos a 1,607.50 cuando se ajusta con inflación, y de 1,516.30 cuando se ajusta con el valor de la canasta alimentaria.

 

En otras palabras, los salarios de nuestro país se han deteriorado al grado de que hoy compran un 11.9 por ciento menos de productos de la canasta alimentaria que en el 2010.

 

Lamentablemente eso se reproduce con mayores estragos en el estado de Tlaxcala, mismo que tengo el honor de representar ante esta soberanía, y que ocupa la cuarta posición como uno de los estados con el menor ingreso promedio por individuo ajustado con el valor de la canasta alimentaria al ascender a 1,114 pesos por mes, lo que es inferior en un 26.5 por ciento al promedio nacional.

 

Si bien esto puede tener dentro de sus causas la inercia de los problemas estructurales que nuestra economía padece, en su mayoría son el resultado de una serie de omisiones por parte del gobierno del Estado quien no está interviniendo de manera efectiva para reducir los efectos que castigan la economía de las familias tlaxcaltecas, y hacen que las personas hoy adquieran menos con su ingreso.

 

Es responsable que el gobierno de la entidad no tome medidas ante el crecimiento acelerado de la pobreza, los niveles de desempleo, y ahora la constante pérdida del poder adquisitivo. Todo apunta a una falta de voluntad para tomar cartas en el asunto puesto que sólo se tienen respuestas y acciones autoritarias, así como paliativos que mitigan temporal y clientelarmente sus errores.

 

Como si no fuera suficiente, el estado de Tlaxcala se encuentra también en los primeros lugares en cuanto a la alza de precios de productos de consumo básico, como el gas, la carne, el transporte y la electricidad. Y mientras tanto el gobierno local insiste declarando en medios que trabaja a favor de la gente, sin embargo, hay muchos retos por asumir y enormes pendientes en materia económica y social.

 

A principios del presente año la Secretaría de Hacienda y Crédito Público señaló que Tlaxcala, a pesar de ser el único estado que no tiene deuda, presenta una fuerte contracción de la actividad económica cercana a los cuatro puntos porcentuales. Para enfrentar dichos retos deben articularse acciones hacia un rumbo que le permita al estado activar su economía y mejorar el poder adquisitivo de los salarios.

 

Basta de acciones que sólo mitigan temporalmente la pobreza, es necesario que los actores sociales se reapropien de las acciones del estado en un relevo que no deje proyectos en el vacío. Deben darse herramientas a la sociedad con una visión de estado activo y cívico que fortalezca el vínculo de la población con formas de vida democrática.

 

Hago un atento y respetuoso llamado al Gobierno del Estado de Tlaxcala por un retorno de sentido de lo político donde el estado trabaje para conocer las inquietudes y necesidades de la gente; donde haya propuestas colectivas capaces de establecer los términos de un nuevo contrato social que otorgue certidumbre, apertura y mantenga la esperanza de un mejor porvenir.

 

Es cuando, señor Presidente.