Intervención en tribuna del senador Fidel Demédicis Hidalgo, del grupo parlamentario del PRD, para hablar en contra del dictamen sobre la designación de Comisionados de la Comisión Nacional de Hidrocarburos y de la Comisión Reguladora de Energía.
Fidel Demédicis Hidalgo, (FDH). Muchas gracias, Presidente.
Compañeros senadores; compañeras senadoras:
Hay algo en donde todos los senadores tenemos que poner atención porque esta reforma energética puede meternos en una situación de complicación, sobre todo para los que menos tiene, que no ha entendido todavía que las transnacionales no les interesa el dolor del pueblo, sino que les interesan las ganancias, y esto genera enormes injusticias, entonces no está midiendo las repercusiones y las consecuencias de esta reforma.
Sólo les digo en este asunto que mientras no haya justicia en México el gobierno no tendrá paz. He escuchado con atención a mis compañeros que han venido a hablar a favor del dictamen, y es increíble la prepotencia que genera la seguridad de que se va a perder el debate, pero se van a ganar con los votos, y entonces empieza un falso debate.
Y yo quiero dejar claro la posición del PRD, porque es una posición que conoce todo México, incluso conocida a nivel internacional en materia de la defensa de los derechos humanos, en materia de las libertades políticas, en materia de crear a un México de libres hombres y mujeres, y no un México de parias, como quieren la mayoría de ustedes, los del PRI, los del PAN y los del Partido Verde Ecologista de México.
Por supuesto que el tema tiene que ver con cuestiones jurídicas, pero bien lo decía el compañero Senador Alejandro Encinas, una ley de excepción que hasta el cansancio les dijimos que no era la alternativa para resolver el problema energético en México porque generaba impunidad, y el pueblo está cansado de la impunidad.
Quien sostiene que hemos venido a descalificar aquí, desde la visión de derechos humanos, a los que van a aprobar el día de hoy miente, miente. Igual, que vengan a sostenernos aquí que hemos hecho un señalamiento concreto sobre un ciudadano, ya sea mexicano por nacimiento o naturalizado en relación a su condición de ser humano, no somos iguales, y eso le queda claro al pueblo.
¿Qué hay un debate ideológico? Por supuesto que hay un debate ideológico, y lo que queremos para México evidentemente no coincide con lo que ustedes quieren.
Están planteando aquí situaciones que son verdaderamente preocupantes y sobre todo que la pongan en bocas de nosotros.
Ninguno de mis compañeros he escuchado que diga que es un pecado y menos mortal, haber trabajado en los cargos que han tenido. Yo no los he escuchado, solamente ustedes los han oído.
El debate es si hay conflicto no de intereses al haber laborado en esas empresas. Esa es la litis, y es la litis que ustedes no quieren debatir.
No estamos diciendo que sean malos mexicanos o que es una vergüenza haber estudiado en tal o cual universidad.
Revisamos con puntualidad los currículums y por supuesto que en el tema académico tampoco es la litis. La litis es, entonces, la litis es entonces sí se contraviene o no se contraviene la ley en artículos que hablan de que los propuestos tienen que estar fuera de cualquier situación de conflicto de intereses.
El problema no es su currículum, el problema no es su diversidad académica, el problema no es su trayectoria profesional, el problema no es su transparencia, el problema es, y revisen lo que dicen en todo el mundo con respecto a las reguladoras. El problema es que una reguladora no puede estar dependiente del poder omnipotente del Presidente o del poder fáctico, una condición para que una reguladora pueda actuar a cabalidad es necesario su independencia del poder político y es necesario también que tengan facultades para sancionar. Hoy todo mundo se rasga las vestiduras por el tema del río Sonora, pero cuándo previnieron es en la ley para que no sucediera. Y si sucedía que esas empresas fueran sancionadas de manera ejemplar para que no volviera a pasar.
Han hablado mis compañeros de las situaciones particulares de los conflictos de intereses y de otras situaciones que hacen inviable el nombramiento de estas personas. No voy a meterme ya ese asunto por el tiempo que me está señalando el compañero presidente.
Pero concluyo diciéndoles, compañeros senadores, compañeras senadoras, que este tema sin duda que los mexicanos y las mexicanos lo van a sancionar a partir de cómo vean su repercusión o la repercusión en su bolsillo.
Ahí está el asunto, ustedes están convencidos y vienen a plantear aquí una tierra prometida. Quisiéramos que se diera porque el pueblo tiene un enorme sufrimiento. Pero después de las experiencias que tenemos con el Tratado de Libre Comercio, con las diferentes privatizaciones que se han dado en México, sabemos que todos ustedes han venido aquí solamente a hacer demagogia.
Por su atención, muchas gracias.
